|10|: Seth

16.8K 2.3K 501
                                    

No siempre podemos ayudar a las personas, pero si tenemos la oportunidad no la dejemos pasar, podemos ser una pequeña luz para esa persona que se encuentra en la oscuridad

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

No siempre podemos ayudar a las personas, pero si tenemos la oportunidad no la dejemos pasar, podemos ser una pequeña luz para esa persona que se encuentra en la oscuridad. Seamos más empáticos.

Hemos permanecido en silencio por un largo momento, por lo que noto Hades a quedado mudo por lo que le he dicho y yo solo me que quedado sentada a su lado para que sienta que alguien está aquí, junto a él.

No lo conozco en lo absoluto, pero no por eso lo dejaré solo. Yo siempre he tenido a mi madre para desahogarme, llorar, reír y hasta bromear, sin embargo no de si Hades tenga a alguien para hacer todo eso, tal vez nadie es capaz de sentarse con el a hablar de cualquier tema. Por eso supongo que insisto en conocerlo.

La lluvia a cesado, poco a poco las gotas se han dispersado, ahora solo caen pocas. La brisa siguió siendo gélida y las ramas de los árboles son azotadas por ella.

—Soy una persona solitaria, eso me gusta —su gruesa voz interrumpe el silencio.

Asiento —ya lo he notado.

—No como nada de dulces, ni carne —sus piernas se estiran, colocándose de pie.

Alzo mi vista hasta mirarlo. Su mandíbula se ve igual de prominente que siempre y sus ojos siguen aferrados a la tumba que tenemos al frente.

—Nunca he conducido, ningún auto, ni motocicleta. Siempre tengo un chófer que lo hace por mí —prosigue.

Enderezo mi cabeza y siento la curiosidad invadiendo mi rostro.

¿Por qué no conduce? Estaba segura de que poseía grandes y lujosos autos que manejaba él.

—¿Por qué? —pregunto sin pensarlo.

El silencio que le sigue a mis palabras es tenso y tirante.

Sin responder a mi pregunta despega sus pies, caminando con dirección el camino por el que llegamos a este lugar.

Me pongo de pie, siguiendo sus pasos. Cuando logró alcanzarlo suspiro con fuerza.

—No debí decir preguntar eso —me aferro a la sombrilla que tengo en mi mano —. Lo siento.

Se define en seco, toda su atención se concentra en mí. También dejo de caminar.

—¿Por qué? —inquiere en un tono de voz exasperada.

No giro mi cabeza para mirarlo, me concentro en mi respiración.

—¿Por qué, qué?

Con el rabillo del ojo percibo como sus ojos escanean mi perfil.

—¿Por qué quieres conocerme?

Sonrío ante su pregunta para luego encararlo. Su cabello aún está mojado, al igual que su rostro, sus labios se ven casi rojos y sus cejo se encuentra fruncido.

Perfecta Destrucción| Completa ✔️Where stories live. Discover now