9. El diario de Laura

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Caminé con Jason por las calles.

— ¿Y bien?— dijo—, ¿Qué pasa ahora?
— Interferí con lo de Emery y Zac— dije avergonzada.
— Pensé que ya no harías eso.
— Yo también lo creía pero no pude evitarlo— dije afligida—. Me preocupa que arruinen lo que Zac y Will tienen. Fue muy difícil que decidieran estar juntos como para que algo así les cause problemas.

Él me observó.

— ¿Qué hiciste?— preguntó.

Le conté. Él me escuchó.

— ¿Y ahora qué hago?— dije—, va a ser un desastre. No quería que le pasara nada malo a Emery pero estoy segura de que le dolerá conocer a Will. Además sé que me odia porque Zac le dijo que gracias a mí él sale con Will.
— Sin contar con que fue por ti que Emery va a conocer a Will aunque no quiera— dijo Jason.
— ¡Ese no era mi plan!— le dije—, ¡Yo sólo estaba preocupada por Zac! Él es muy torpe. Además Emery me preguntó todas esas cosas primero, la verdad creo que sí tiene motivos oscuros.
— O quizá sólo quería saber que Zac estaba a salvo— dijo Jason.
— Pues ahora podrá comprobarlo aunque no quiera porque Zac va a presentarle a Will— dije.
— Va a dolerle eso— dijo Jason—. Cuando hablé con él entendí que de verdad le tiene un cariño sincero a Zac.
— ¿En serio? No lo parece... su cara es muy inexpresiva.
— No lo era esa tarde— dijo él.

Me sentía terrible. De repente tuve una regresión a los días donde me gustaba Zac y me sentía mal porque sabía que Will era mejor que yo en todo aspecto y que Zac lo prefería. Entendía lo que era amar a alguien que no era para ti.

— Trataré de arreglar esto— le dije a Jason.

Al día siguiente planeaba disculparme con Emery y contarle la verdad. Así él entendería que realmente no quería perjudicarlo, sólo estaba preocupada por Zac.
Llegué temprano. Fui a la sala del consejo estudiantil. Por la ventana vi a Zac y Emery. Me escondí y los espié.
Zac hablaba animadamente (porque su ánimo en esos días era simplemente excelente) mientras Emery lo miraba fijamente. Entonces y de la nada, Zac le dio palmaditas en la cabeza (como solía hacerlo con Jimi) y Emery sonrió.

Casi me voy de espaldas, era la primera vez que veía a Emery sonreír (de hecho creí que no podía). Me quedé envuelta en un montón de dilemas. ¿Por qué Emery seguía tan cerca de Zac si ya sabía que él salía con alguien?

Entré rápidamente al lugar. Al verme, Emery fue a sentarse y pareció la misma persona inexpresiva de siempre.

— Hola Laura, buenos días— dijo Zac—. Te alegrará saber que ya le comenté la idea del siguiente festival al director y él me dio permiso para organizarlo.
— Qué bien— dije sin despegar mis ojos de Emery.
— ¡Será tan emocionante!— dijo Zac—, ¡A Will también le encantó la idea! Estoy pensando que él y Madie podrían dar una conferencia. ¿No sería increíble?
— Sí, claro— dije, Emery fingió que escribía algo, miré a Zac—, ¿Evan ya lo sabe? Su madre estudió artes escénicas, quizá podría dar una conferencia también.
— ¡Qué gran idea!— dijo Zac—, ¡Iré a decirle!

Salió del salón. Me quedé con Emery. Habían dos cosas que podría hacer:

1. Pretender que no sabía nada y manejar la situación discretamente, teniendo todo bajo control y actuando según me indicara lo que descubría. Es decir, lo que Jason haría.
2. Confrontar a Emery y poner todas las cartas sobre la mesa como una psicópata. Es decir, lo que yo haría.

Y obviamente, hice las cosas a mi estilo.

— De acuerdo, dejémonos de juegos tontos— le dije en tono autoritario—, ¿Qué es lo que pretendes?

Secretos de PasilloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora