Parte 4

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Hola!!! Les dejo la foto de Javier...y una nueva parte de la historia. Espero les guste.

Carla y Laura estaban  organizando la mesa para la cena cuando sonó el timbre, Laura le señaló la puerta a su amiga invitándola a abrir, sabían que era Martín, el invitado especial.

Estaba emocionada, era la primera vez que se la veía así por hombre, parecía una adolescente que esperaba su primer salida con el chico que le gustaba,  Laura estaba contenta viendo así a su amiga, necesitaba un compañero de vida, no sólo la compañía de amigos, quería que sepa lo que era amar intensamente como lo hacía ella, le deseaba toda la felicidad que ella sentía.

Cuando abrió la puerta y lo vio se le iluminó la cara, Martín era muy buen mozo, parecía más joven de lo que realmente era, con cara de nene, flaco, rubio, alto y de ojos marrones, prolijamente desprolijo y con aire casual, era justo la clase de hombre que a Carla le gustaba, cuando él la vio la abrazó fuerte y la beso apasionadamente.  Carla se sonrojó a darse vuelta y ver  a sus amigos mirándolos con picardía.

-Les presento a Martín – les dijo  a Laura y a Javier.

-¡Hola, que gusto conocerlos por fin!, sé bastante de ustedes, Carla los quiere mucho –dijo Martín muy desenvuelto con su hermosa voz algo ronca, era una persona muy extrovertida, y eso les había caído bien a Laura y Javier, no les costaría tratarlo como a un amigo más del grupo como sí les había pasado con Marijo cuando Federico la presentó, era una mujer tímida, demasiado silenciosa aunque era muy simpática, pero les costó entrar en confianza porque era muy seria para lo que ellos estaban acostumbrados a ver en las mujeres de Federico, hoy era aceptada como una más y se habían acostumbrado a su formalismo y les gustaba sacarla de ese lugar con bromas. Su vida había sido un tanto dura de chica con una familia demasiado católica, estricta y protocolar.

Los cuatro amigos eran muy unidos,  desde pequeños se habían convertido en compinches, se confiaban todo y se pedían consejos por cualquier  tema, eran como hermanos unidos por el destino. Por eso era tan importante para ellos aceptar las parejas de cada uno, lo que hasta ese momento no había presentado problemas. Marijo era una mujer muy dulce y comprensiva y, aparentemente Martín era un buen tipo y muy divertido.

Al rato llegaron Federico y su esposa y comenzaron a charlar  animadamente, sirvieron el primer plato y con la copa de champagne en la mano Javier pidió silencio para hablar.

-Primero, quiero dar la bienvenida  a Martín a nuestra casa y a la vida de nuestra querida Carla y  por ende a nuestra vida –dijo levantando la copa a modo de brindis y dio el tiempo suficiente para que ellos se den un beso–y, segundo, –continuó –quiero brindar por mi hermosa mujer que me hace el hombre más feliz del mundo sólo por estar conmigo y, a esto, le sumó la noticia de que está embarazada…Entonces brindo porque vamos a ser papás.

Todos los felicitaron, los abrazaron y brindaron con ellos, la noche había comenzado con buenas noticias y estaba terminando con un postre riquísimo que había preparado Marijo.

Para tomar el café, las tres mujeres, se juntaron en el futuro cuarto del bebe con el pretexto de contarles cómo sería la decoración, adonde pondrían la cuna y los peluches y de qué color sería la pared. Una vez sentadas en el cómodo sofá del escritorio comenzó la charla de mujeres, comenzaron  con Martín y el buen gusto de Carla a la hora de elegir hombres sin desmerecer a los demás esposos, de lo felices que estaban los futuros padres con esto del embarazo, Carla  se intrigó en cómo había sido la sorpresa que armó Laura para decírselo a su marido, ya que cuando la había dejado en el departamento le había dicho que prepararía algo original para él, cuando ella terminó el relato y ante la felicitación de sus amigas, Marijo tomó la palabra y con mucha vergüenza y preocupación, comenzó a hablar de su problema con Federico.

Volver a Intentar (Completa y en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora