Assassin [Katekyo Hitman Reborn]

38

Kaia

De alguna forma, todos resultamos sentados en la mesa de un restaurante de comida rápida. Hibari también estaba allí, pero en una mesa aparte porque no le gustan las multitudes.

—¿Qué pasa? ¿No dijeron que traerían a todos? —preguntó la chica de los Simon.

—Ustedes tampoco están completos, así que puedes meterte tus comentarios al... —habló Hayato.

—Es que fue algo inesperado. —le interrumpió Tsuna. —Lambo se fue a jugar y no pudimos contactar a Chrome en Kokuyo Land.

—También lo intentamos, pero Kato Julie se encuentra fuera y Shitt P. está ocupada meditando. —siguió la chica.

—Así que a esta hora se comunica con los suyos... —escuché a Hayato en voz baja.

—¿Sigues con eso? —pregunté.

—No puedo dejar pasar a una AMNI sin estudiarla. —respondió.

—Por cierto... —habló Tsuna. —¿No había algo que tenías que decir?

—¡Es cierto! —exclamó Hayato. —Como todos saben, el Décimo y un miembro de la Familia Simon fueron atacados hoy. Por lo tanto, propongo que Vongola y Simon se unan para proteger a nuestro jefe.

Así que era algo como eso...

—He notado que el área de habilidades de cada Familia está balanceada. Como eso no será un problema, formaremos los equipos de acuerdo a intereses en común. —sacó una hoja de papel. —Primero, los que resguardarán el área cercana al club de baseball, Yamamoto y Mizuno. En el edificio de tercer año, estarán Hibari, Suzuki Adelheid, Sasagawa y Aoba Koyo. En la parte trasera de la escuela, Kaia y Thiago. En el parque Namimori, Lambo y Ooyama Rauji. En las áreas cercanas a Kokuyo, Chrome y Kato Julie. Y aquellos que protegerán el salón del Décimo seremos Shitt P. y yo. También estará, Kozato Enma, aunque dudo que sirva de algo.

—Es una tontería. —habló uno de los Simon. —¿Por qué tendríamos que formar parte de la seguridad si somos invitados?

—Todas las Familias italianas están subordinadas a Vongola. —dijo Hayato. —Nunca había oído de una no afiliada, pero supongo que consistiría a una violación del Tratado de Rendición Total y deberán ser declarados en rebelión.

—¡¿Y quién dice que nosotros estamos de acuerdo con eso?! —gritó. —¡Siquiera considérennos sus iguales, idiotas!

—Pero, no lo son. —dije. —Vongola siempre está más arriba. Eso ya deberían saberlo.

—¿Kaia...? —preguntó el Décimo algo asustado.

—Tiene razón. —habló Hayato. —¿O acaso quieren que les recuerde qué les sucede a las Familias que no cooperan?

El ambiente se puso algo tenso, pero esto es lo que debemos hacer cada que ocurren cosas como estas. Somos asesinos de Vongola, la Familia reinante en Italia. Si alguien trata de poner en duda su autoridad, simplemente tendremos que hacernos cargo de forma silenciosa.

—¡Ya basta, Koyo! —exclamó la chica. Él dejó de hablar de inmediato. —Me gustaría discutirlo con aquellos que no están aquí, así que dennos un poco más de tiempo para acordar los detalles.

Todos se levantaron cuando ella dio la orden. Si mal no recuerdo, se llama Suzuki Adelheid. Es la que se atrevió a pelear contra Hibari en el primer día de su transferencia.

—Lo siento por todo ese alboroto. —escuché la voz de Thiago. Él en verdad es bueno ocultando su presencia. —Solo iremos a hablar con el jefe para informarle de la situación. No pretendíamos ser irrespetuosos.