El Misterioso Visitante. (Cherik - Wolvesilver)

II

Dedicado a KiKaLoBe

II

Logan fue derecho a su recámara. Abrió el último cajón de la cómoda, revolvió las ropas y sacó la pistola, que tenía escondida. Poco podía hacer tal artefacto de metal contra Erik, según lo que podía deducir, pero no tenía otras opciones para proteger la casa. Probó la pólvora y el mecanismo del arma. Guardó varias balas en el bolsillo y se acomodó la pistola en el cinturón, camuflándola con el saco. Bajó a los brincos las escaleras y llamó a dos cocineros y un muchacho, que habían estado en la milicia. Les ordenó que con el mayor sigilo, buscaran sus armas y las prepararan. No debían hablar con nadie del asunto. Cuando Lady Xavier se marchara a dormir, se reunirían con él en la cocina. Después enfiló hacia el comedor.

La cena se sirvió puntualmente a las siete y media. Laura ya de once años, se sentaba con los adultos para poner en práctica el protocolo de la mesa y porque Sharon sentía que la larga mesa se veía desolada con la sola compañía de su padre. Extrañaba a Charles y esta excusa era una manera de paliar su ausencia. La dama se ubicaba en la cabecera, Logan a su derecha y la niña a su izquierda.

Retirados los platos, Laura se marchó a sus aposentos para dormir. Los adultos continuaron con una sobremesa. Sharon solía ordenar dos vasos de whisky para concluir la velada pero esta vez sorprendió al mutante pidiéndole uno de sus cigarros. Logan manejaba prácticamente todo el comercio del tabaco en Escocia, así que los suyos eran de una calidad exquisita.

Como buen comerciante siempre preparado para vender su producto, Howlett sacó de su bolsillo una elegante cajita de madera tallada, la abrió y le ofreció a la dama los puros que allí guardaba. Ella eligió uno y él se lo encendió. Después Logan se acercó a una vitrina para escoger un cenicero y regresó a la mesa y preparó otro habano para él.

Fumaron un largo rato en silencio. Sharon era una dama de alcurnia desde el tocado del pelo hasta las uñas de los pies pero tenía a veces salidas que asombraban, como pedir un puro y degustarlo como una experta, o hacer preguntas que sin faltar el respeto, descolocaban a su interlocutor. Soltó el humo en una de sus pitadas y cuestionó.

― ¿Quién es ese desconocido, Logan? ¿Por qué temes que estemos en peligro con él bajo nuestro techo? – lo miró, entretenida con su expresión de sorpresa, y sonrió ―. No tengo la telepatía de mi hijo, pero tu rostro me lo dijo todo. No has hecho más que preocuparte desde que te sentaste a la mesa, no disimulas tus emociones, Logan. Recuerda que no eres de esta isla – bromeó en referencia al célebre "carácter británico."

―La Canadá de la que vengo está llena de personas de esta isla ― respondió Logan y soltó una carcajada para distenderla. Luego se puso serio ―. Sí, señora. Realmente este tal Erik me preocupa pero quiero que le quede claro que estoy para protegerla a usted y a mi hija.

― ¿Quién es realmente? ― insistió Sharon.

Logan se acomodó en el asiento y dejó caer la ceniza en el recipiente.

―Este mutante es Magneto.

La dama se cubrió la boca, asustada.

― ¿Estás seguro?

―Vi su anillo con el sello único e indiscutible – contestó Howlett amargamente ―. La famosa M mayúscula. Aunque habla perfecto inglés tiene la tonada con una mezcla de alemán y polaco. Lo poco que se sabe de Magneto es que creció en Düsseldorf pero pasó su juventud en Polonia, allí se casó con una campesina de un pueblo, y vivió tranquilo hasta que la patrulla anti mutante asesinó a su familia hace ya diez años.

―A su esposa y a su hija ― recordó Sharon con pena ―. Dicen que las atravesaron con flechas para que él no pudiera defenderlas.

―También dicen que quemaron su casa con ellas adentro ― continuó Logan ―. Lo cierto es que perdió a su familia y allí comenzó su venganza. Una vez conocí a un hombre que estuvo presente cuando liquidó a los soldados que la habían asesinado. Fue una masacre y esto dicho por un sujeto que vivió guerras. Magneto es como una sombra oscura, se mueve como un fantasma vengando a los que atacan a los mutantes. También mata a los mutantes que tienen problemas con mutantes que él protege. Su código no está claro, se duda que tenga el honor de un caballero y es temido, temido como el diablo mismo. Mata sin piedad, no se guía por la justicia establecida, tiene la suya, la de la venganza, es peligroso, puede controlar cualquier arma ― bufó para tranquilizarse ―. Si alguien llega a enterarse de que está en esta casa, la desgracia caería sobre nosotros.