Capítulo 17

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La directora del instituto no podía creer lo que estaba sucediendo en su oficina y menos cuando unos de su empleado más antiguo y de confianza le estaba dando la razón a su alumna y su padre, ambos sentados frente a ella.

Las cámaras de seguridad no lograron grabar el momento en que Gael estaba con Carla, pero si había logrado con otra cámara observa como el chico comenzó a correr muy rápido hasta llegar a la planta de arriba en busca de su auto e irse del instituto.

Sabe muy bien el peso del apellido Ortega en este país, es imposible realizar esa demanda la cual sería inútil, Gabriel tiene demasiada influencia y con solo ordenar, sabe que harán lo que digan.Pero tampoco puede permitir que su colegio se convierta en un infierno para sus alumnas, es suficiente con los rumores que indican que este instituto es un burdel.

— Necesito juntar las pruebas necesarias para comenzar el proceso y quiero que usted me acompañe a dar las respectivas declaraciones. — señala al vigilante que asiente a la petición del abogado — le pido de por favor que me colabore con esto señora directora; no voy a permitir que mi hija o alguna persona inocente que esté aquí o fuera, sea víctima de ese chico, no es culpa de nadie que él quiera dañar a los demás por su orgullo.

Andrew habla pensando en como sucedió y comenzó los ataques de Gael hacia su hija.

— Yo le voy a colaborar, en mi oficina tengo la navaja guardada con un pañuelo, de seguro puede servir para esta denuncia, lo digo por las huellas.

La directora estaba muy metida en sus pensamientos, estaría arriesgando mucho con la denuncia, Gabriel puede intervenir en contra del instituto si es necesario, el hombre puede estar enfermo, pero puede ser severo y decisivo en sus órdenes y si Gael le dice que haga algo, él lo hace.

Andrew se dio cuenta de lo que la directora podría estar pensando y le dijo que si no lo hace el chico se convertirá en algo peor y que otra víctima inocente caerá en las garras de él sí no le detienen.

El abogado llamó a al comisario de la policía de los ángeles (y amigo personal) para realizar la denuncia en el instituto, la directora le comento que hará parte de la denuncia cosa que agradecía el abogado y su hija.

Para hacerlo más cómodo a la directora, Andrew decidió llamar al hombre para que se acercara al instituto.También la madre de Carla tuvo que dejar la clínica para participar en la denuncia.

1 hora después

— Bien, necesito el orden médico de la señorita Carla Martínez, junto con esta navaja que contiene sus huellas y el video de la cámara de seguridad. Levantaremos la orden de aprensión el joven Gael Ortega — el policía iba a decir algo más, pero Andrew le interrumpe.

— Hay otra denuncia — el policía frunce el entrecejo — hace 3 años el también abuso de mi hija físicamente, aquí tengo las pruebas del abuso.

El abogado le entrega una carpeta con documentos, fotos y estado clínico de Andrea, la prueba de que Gael había atacado a la rubia.

— ¡¿El también abuso de ti?! — comenta Cecilia y la directora desconocía ese hecho, bueno pensó que había tenido un accidente.

— Sí.

— ¿Qué fue lo que ocurrió entre ustedes? — Andrea no estaba prepara para contar lo sucedido, así que le dio una mirada a su padre y este asiente entendiendo que no quiere hablar sobre eso.

— Aquí hay un resumen de lo que sucedió oficial, ella aún no ha superado ese accidente, por lo tanto, le cuesta hablar de ese tema.

Considera a su padre como el héroe sin capa, el mejor definitivamente, la ama, así como es y la defiende de quien sea, es una lástima que su madre no fue así.

— Pero esto es grave ¿por qué no lo detuvieron?

— Esos papeles son los originales; las copias están en la estación de policía de los ángeles, puedes encontrarlos si quieres. Denunciamos, pero la orden no se dio debido a que su padre pago para que su hijo no fuera a una cárcel de menores y mi denuncia se quedó ahí, no hicieron nada.

Claro, era de suponerse, él sabía que ese hombre hace lo que sea por su hijo, su chequera tiene mucho ver en todo esto. Pero en ese entonces, el personal que había en la policía era unos vendidos al dinero, corruptos como nadie y lo que no se espera el señor Ortega es que el director de la policía odie los sobornos.

Esta vez no hay dinero que intervenga para su defensa. 

— De acuerdo, solo necesito llevar esto a la estación de policía, redactar la orden de captura y solo faltaría los chequeos médicos de la señorita Carla y así prepara un juicio para el joven Gael Ortega — el hombre observa a Andrew — no está fácil, sabes que viene de una familia de grandes recursos, pero hay suficientes pruebas.

La noche cae y Andrea quería ir a la clínica; pero su padre se negaba a prestarle su auto, se había enterado por medio de un mensaje de su amiga que Carla había despertado ya estable y con dolor en su herida, la enfermera le había dado para aliviar esa tortura y se quedó más tranquila.

— Papá, mi auto está en esa clínica, tengo que ir por él, además hay que lavarlo está lleno de sangre — recordarlo hacía que un escalofrío recorra su cuerpo.

— Dile a tu hermano que te lleve en la moto, yo necesito el auto así puedo prestarlo, lo siento hija.

No insistió más y fue en busca de su hermano que le dijo que si, así que se arregló un poco, tomo las llaves de su auto y ambos partieron con rumbo a la clínica.

Más que ganas de ir a buscar su auto, tiene ganas de ver a Carla y observar con sus propios ojos su estado, decirle que todo estará bien y que Gael pagara lo malo que ha hecho.  






ASÍ TE QUIERO © (Gip) (borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora