Capítulo 13

7.2K 573 11
                                    


Luego de una charla amena, conociéndose y disfrutando del desayuno entre Andrew, Andrea y Carla, esta última estaba un poco nerviosa debido al aura intimidante del padre de la chica rubia, el mayor dejó a solas a las chicas y un incómodo silencio se instaló en ellas.

Andrea tenía cabeza hecha un lío, no recuerda mucho lo que sucedió, tampoco es que haya hecho algo malo, pero lo que le dijo la castaña no se le olvida para nada.Aún puede escuchar su voz diciéndole "No me desagradas Andrea".

Era la primera vez que se sentía feliz de no ser rechaza, ya que Carla comienza a meterse dentro de su mente de manera constante y recordar ese baile hizo que pequeños sentimientos comience a tener e inevitable ilusionarse y más cuando hace un rato la castaña llamó a su padre "suegrito".

Escucharlo hizo que su corazón lata de manera rápida.

Pero tiene miedo a que todo sea una broma de su parte.

Por otro lado, Carla la observa muy detenidamente pensando en que mundo esta cabeza que la tiene con el entrecejo fruncido mirando un punto fijo del comedor. Sabía que a lo mejor piensa que ella la rechazará, así como lo hacen casi todos en el colegio, pero eso no sucederá.

"Espero que recuerde lo que le dije anoche".

"¿Y por qué le dije suegro a su padre?"

Anoche... Ese baile hizo que sensaciones indescriptibles salieran a relucir en ella, que pensaba que al menos no ahora, lo tendría y eso le aterra, no por el qué dirán, le importa muy poco lo que piensen. Apenas se conocen y está entre seguir al pendiente con sus estudios o darse la oportunidad de conocer a esa rubia frente a ella.

— Carla, Yo...

— Antes de que digas cosas que no deberías, quiero decirte que no me desagradas, no voy a rechazarte como muchas personas lo hacen y menos voy a juzgarte o a insultarte como lo hicieron ayer en el colegio. Pero si me molesto algo — la rubia hace contacto visual con la castaña y esta última no puede evitar observar ese gris de sus ojos tan brillosos y tan vivos — Me molestó el hecho de que tú no hagas nada para que dejen de hacerlo; me molesta que se metan contigo como si no fueras una persona de carne y hueso, como todos.

Andrea cierra sus ojos trata de no querer llorar, sus ojos comienzan a picar anunciando la salida de unas cuantas lágrimas.

— No puedo hacerlo... Ya sufrí las consecuencias y no es correcto hacerlo de nuevo — la castaña queda con dudas.

— ¿Qué te hicieron? — ella niega, no quería hablar de eso, no ahora.— Tal vez, más adelante lo sepas... Por ahora no — no quería presionarla así que asintió a su petición.

— Está bien... Pero tienes que darle un stop a todo esto. Y eso que es primera vez que miro y escucho algo así, que quedara para ti.

— Desde que mi madre comenzó a llamarme así.

Andrea se levanta y camina a la cocina dejando más confundida a la chica, aunque ya tiene una idea de lo que sucede. No hay fotos por ningún lado de la madre de la rubia y su prima había sacado un comentario sobre eso.

Esperaría a que ella confíe lo suficiente en ella para que se lo cuente

2 horas más tardes.

Sam había bajado a la cocina y lo primero que se encontró fue a su prima junto con su amiga.

Andrea sabia lo incomoda que se encuentra e incluso Carla también se dio cuenta e interpretó el silencio que hubo por un momento, sentían la confusión de Sam, mientras desayunaba.

Había despertado asustada, al mirar al "chico que odia" dormir junto a ella completamente desnuda. El dolor de cabeza no le dejó pensar en lo que sucedió y pequeños recuerdos de anoche colándose a su habitación le llegó. Aunque no era necesario recordarlo. Se levantó de la cama tomo su ropa, se vistió, quedando descalza (no iba a colocarse los tacones) y observó al hermano de su mejor amiga durmiendo profundamente.

La sabana blanca ocultaba nada más su entrepierna, dejaba a la vista sus piernas largas con muchos vellos, luego su cintura marcada con la V muy pronunciada, su abdomen perfectamente tonificado junto a sus pectorales, el cabello desordenado y por último las marcas en el cuello la cual la hizo sonrojar.

Tuvo que salir de esa habitación de inmediato y se quedó en el pasillo para calmar su pulso. No quería que nadie los descubriera, pero ya era demasiado tarde.

Andrea les dijo que encantada las llevaría, pero no podía conducir en ese estado y que iría a su cuarto a tomar una ducha, así que llamaron a un taxi y luego de unos cuantos minutos, las chicas habían llegado a la casa de Sandra.

— ¿Qué hiciste? — Sam llega a la sala y se recuesta en el sofá, al parecer, su madre no se encuentra. Supone que estará en el restaurante.

— ¿Qué hice de qué? — con el entrecejo fruncido mira a su prima.

— Tú... Y Andrés, desnudos en su habitación.

Sorprendida, pensaba en que nadie se habría dado cuenta y la vergüenza comenzó a recorrer su cuerpo entero, su expresión lo refleja y sonrojada pregunta:

— ¿Nos vieron?

— Ojalá yo los hubiera visto o la misma Andrea — horrorizada con sus ojos bien abiertos espera no escuchar eso que dirá su prima.

"No por favor".

"Que no sea él".

"Que no haya visto semejante imagen".

"De seguro quedó traumado".

"Le dirá a mi madre y estaré en problemas"

"Me gusto estar con él... Espera ¡¿Qué?!"

— ¿Andrew? — Carla afirma — ¡Ay no puede ser!

— Casual... Sales para animar y hacer que tu mejor amiga pase una noche inolvidable y la que termino teniendo una noche inolvidable fuiste tú — Carla sonríe y se va a la habitación de su prima en busca de ropa cómoda y darse un baño.

— Que vergüenza con el padre de Andrés.

Y para agregarle más, un mensaje de Andrés llego a su teléfono.

Ella lo abre y observa la foto que le envió.

La foto hizo poner más roja su cara.

Su espalda estaba roja llena de heridas hechas por sus uñas.

— Me gustó el tatuaje que me dejaste...       







ASÍ TE QUIERO © (Gip) (borrador)Where stories live. Discover now