Capítulo 17

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—¿A dónde estamos? —preguntó Sakura.

Habían paseado por varios salones del dichoso club, subido escaleras y caminado por largas galerías. Ella se había dejado llevar por Sasuke sin chistar dada la inesperada ayuda que le había brindado.

—En el bar de la terraza.

Con sólo esa escueta explicación terminó de conducirla hasta los elevados asientos enfrente a una barra de bebidas. Desde que habían iniciado la travesía él la condujo posando su mano en la espalda baja de la chica, ahora que habían llegado a la meta le costó soltarla más de lo que había creído.

La pelirrosa miraba a todas partes extrañada de no ver más personas haciendo uso del lugar.

—¿Por qué este sitio está tan solo?

—Lo había alquilado para beber después de que terminara la fiesta —el barman se acercó ante la mirada del azabache presto a servirle— Lo mismo de siempre.

No fue necesario nada más y en cuestión de segundos un vaso lleno de un líquido transparente reposaba enfrente del joven.

—Pide lo que quieras.

—¿Eh? —respingó Sakura.

—Me imagino que necesitas tomar algo fuerte luego de verlos besándose —el pelinegro tenía su rostro hacia la barra, llevó el vaso a sus labios y tomó un poco.

De inmediato ella tensó su espalda, sus mejillas se enrojecieron y bajó la mirada.

—No sé por qué dices eso —su voz era más un susurro— Total... ¿qué oportunidad podría tener una persona como yo ante Fū Nanabi? —soltó una risita triste— No soy tan bonita como ella ni tan inteligente o especial... y tampoco tengo una familia adinerada.

—Cierto, además tu personalidad deja mucho que desear al igual que tus modales —ante ese terrible comentario, la ojijade entrecerró los ojos mirando a Sasuke— Pero te equivocas.

—¿Ah si? —dijo Sakura imprimiendo el mayor sarcasmo que pudo a la pregunta.

—Tu tienes algo, algo que te hace especial —Sasuke la volteó a mirar— Si Sai te hubiera conocido antes que a Fū estoy seguro de que se hubiera enamorado de ti.

El pelinegro acercó su cuerpo al de la sorprendida pelirrosa que parecía no respirar, atrapó entre sus dedos un mechón que se había escapado del peinado de la pelirrosa, comenzó a jugar suavemente con el, su voz se volvió baja y ronca.

—Quizá no seas tan bonita ni tan inteligente pero tienes algo que te hace única... y por eso eres la primera chica que le llama la atención a Sasuke Uchiha —terminó colocándole el mechón detrás de su oído y se giró de nuevo hacia la barra.

La pelirrosa continuaba estática como si se hubiera tragado un palo y roja como un tomate.

El azabache frunció el ceño, llevó un poco más de su bebida a la boca y carraspeó.

—Disculpa, voy al baño —salió de allí rápidamente.

Apenas se fue Sakura parpadeó varias veces y tomó el aire que le pedía a gritos su cuerpo. También volteó su cuerpo había la barra, tocó el mechón que ahora reposaba detrás de su oído y con esa misma manó se abanicó. Sentía la garganta seca y cerrada así que al no haber más vasos decidió tomar el que tenía Sasuke y sin miramientos se lo bebió hasta el fondo.

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Sasuke se estaba lavando las manos mientras procesaba lo que le había dicho a la pelirrosa. Él nunca hablaba, nunca soltaba sus mas profundos pensamientos, por eso ese momento había sido surrealista.

BOYS OVER FLOWERSWhere stories live. Discover now