BOYS OVER FLOWERS

Capítulo 25

No hay nada como escribir junto a mi hija que me da ideas para algunas frases, mi orgullo y mi princesa al ciento por ciento.

Espero que lo disfruten.

Un baño en la mansión Uchiha era tan grande como la sala del apartamento donde vivía Sakura, pero a pesar de la inmensidad la pelirrosa sentía el sitio pequeño por la proximidad del Uchiha.

Ella estaba sentada en una banca con apenas una pequeña bata de baño que no le alcanzaba a cubrir ni las rodillas. Su corazón palpitaba rápidamente, observaba con la respiración agitada y superficial sus piernas llenas de profundos raspones a causa de la caída, pero lo que la tenía en ese estado era el toque del pelinegro que estaba agachado junto a sus extremidades colocándole yodo en cada herida. Era doloroso pero cuando Sasuke terminaba con una se deslizaba lentamente a la siguiente sin perder el contacto con su piel, allí donde rozaban sus dedos parecía que la piel quedaba hipersensible.

Después de curar sus rodillas siguió ascendiendo hasta la última herida ubicada justo donde terminaba la bata. Sakura no pudo evitar emitir un pequeño gemido cuando los dedos de Sasuke incendiaron el camino.

—Yo... yo puedo terminar de hacer e-eso —su voz era apenas un susurro.

—¿Te vas a quedar quieta o te tengo que atar? —no había sido una pregunta, era una clara orden que envió un extraño dolor directo al estómago de la ojijade.

Ella miró el concentrado rostro del chico y cruzó sus brazos para cerrar un poco más la bata. ¿Acaso pensaba que con esa tela iba a cubrir también su corazón?

—Ya sabía que eres una molestia pero no me había dado cuenta de que eres también una tonta.

—¿Cómo? —el entorno cambió volviéndose beligerante ante las palabras del joven.

—¿Por qué no huiste cuando empezaron a atacarte? —Sakura frunció el ceño y sus ojos se oscurecieron— ¡Mira como quedaste de herida por ese tonto orgullo que tienes!

—¿Hablarme de esta manera te hace sentir muy hombre, Uchiha? No necesito que hagas nada por mí.

—Cierra los ojos.

El azabache soltó sus piernas, cogió otro algodón impregnado de yodo y le agarró la nuca. Ella intentó huirle al contacto pero él la tomó más fuerte.

—¡Arde! —gritó la chica ante el primer contacto del antiséptico con la herida de su frente pero como sabía que Sasuke no iba a parar decidió dejar de pelear y cerrar los ojos.

Sasuke intentó concentrarse en esa parte de piel que necesitaba sus atenciones pero al tener el rostro de Sakura tan cerca se fue acercando sin darse cuenta. Sus manos detuvieron la labor, no podía dejar de mirar su boca, se encontraba irremediablemente hipnotizado y cuando ella la entreabrió para humedecerse los labios su respiración se atascó.

Se levantó y dio un par de pasos hacia atrás, se sentía como un cabrón, ella estaba malherida y él quería... llevó sus manos hacia su cabello para revolverlo, ni siquiera sabía que era exactamente lo que anhelaba pero lo que fuera era mejor ocultarlo en su acostumbrado muro de hielo.

—Termina de curarte tú misma —arrojó el algodón a los pies de la chica y salió dando un portazo.

—¡Tú sí que estás loco, shannaro!

Terminó la enfadada frase pegando un puntapié al piso, la enojaba no entender nada del comportamiento de Sasuke, un día la trataba mal, luego la abrazaba y rescataba. Quizá tenía doble personalidad o simplemente era un desquiciado, definió ella.