Capitulo 14

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Claude.

Estaba tomando una taza de café mientras analizaba la información sobre el caso; lo que encontró Ann fue realmente de ayuda para lograr un avance en esto. El señor Nicholas aún no se encontraba en casa, por lo que le haré llegar la información al momento que decida regresar. Iba a tomar otro sorbo de mi café cuando mi celular vibró, era un mensaje de Natalia, la información que había solicitado ya se encontraba lista. Rápida como siempre.

Abrí el documento, salteando las partes sobre Miles y Kenneth que ya había leído de antemano en los papeles de Ann, pero justo algo llamó mi atención:

"...Tras la trágica muerte de Marcus Oyanadel, primero hijo del famoso presidente de empresas Oyanadel, el cargo de la compañía se trasladó a manos del segundo hijo adoptivo, Kenneth Oyanadel. Meses después de haber recibido el cargo, se cuenta que fue transferido a otra compañía por decisión propia ... Por otra parte, el otro hijo adoptivo del presidente de empresas Oyanadel, Miles Oyanadel, fue rara veces visto en público y por lo tanto poco se sabe de él. Hasta que un día, el caso sobre la muerte de Marcus Oyanadel fue reabierto para el desconcierto del público. Resulta que tacharon como principal sospechoso del incidente al joven Miles como el posible perpetrador, por una evidencia entregada de manera anónima a la policía. A falta de pruebas y testigos claves, el caso fue nuevamente cerrado y el paradero del hijo menor de los Oyanadel es desconocido..."

Ciertamente, se trata de una familia que parece tener una profunda conexión con los recientes casos.

Dejé esa información de lado y comencé a revisar algunas de las autopsias; los patrones de ataque de algunos cuerpos eran diferentes, lo que me hacía pensar que no se trataba de uno, sino de dos personas quienes estaban causando esto.

Pero, ¿qué diablos tenía que ver Tyler con todo esto, como para que su propia mejor amiga dudara del?

La información sobre él no revelaba nada extraño; un niño exiliado por los demás, estuvo dos años sin asistir a la escuela, lo que causó que se retrasara en sus estudios. Nada extraño, por lo que iba a descartar la idea de que tenía alguna relación con todo esto, hasta que Natalia me envió un enlace a un video.

Dejé mi taza de café a un lado luego de ver el video, no podía creer como esto no fue encontrado como evidencia; se podía ver claramente en el video a alguien acercándose a uno de los lugares donde una de las víctimas fue asesinada. No podía tratarse de mera coincidencia, la persona en el video obviamente era Tyler.

El golpe de una puerta cerrándose fue lo único que logró desviar mi mirada del video, era el señor Nicholas. Al verlo, recordé claramente como Ann perseguía a Tyler en busca de respuestas.

Si Tyler realmente está involucrado en todo esto, y Ann sospecha abiertamente de él, no era seguro estar cerca de él. Me levanté de mi asiento, tomé mi abrigo del perchero y con la desconcertante mirada del hombre que acababa de entrar, salí directamente de la casa. Iba al hogar de Tyler.

Al menos sé donde vive gracias a la información recopilada, por lo que no me demore en llegar. Golpeé la puerta hasta que una mujer, supongo que la madre, me atendió.

- Disculpen las molestias, soy el detective Claude Moore. Me preguntaba si la señorita Ann se encontraba adentro en estos momentos, tengo algunos asuntos que hablar con ella.

Al escuchar la palabra detective, pareció entender que era un tema importante y respondió sin dudar- Ella estuvo aquí hace unos momentos, pero ya se marchó. Estábamos comiendo fuera hoy, ya que nuestro Nick quería comer pizza, por lo que no pudimos verla. Tyler nos contó que ella tenía unos asuntos que atender y por ello se fue tan pronto.

- Ya veo, ¿y donde se encuentra Tyler en este momento?

- Oh, él está acostado, lucía muy cansado y me preocupaba, así que lo mandé a dormir rápidamente- respondió, soltando un pequeño suspiro.

Iba a realizar unas cuantas preguntas más hasta que una llamada interrumpió todo, era el señor Nicholas. Al momento de contestar la llamada, pude escuchar la voz agitada del viejo oficial.

- ¡Claude, acaba de aparecer otro cuerpo!- apenas escuché la palabra cuerpo, pedí la ubicación y la identidad de la persona.

- Fue encontrado en el mismo lugar que los demás, y la identidad...- hubo unos momentos de silencio antes de que volviera a hablar- Es una chica, su nombre es Jessica Gómez... la compañera y amiga de Ann...

Era de esperarse, las probabilidades de que esa chica siguiese con vida eran nulas. También, posiblemente la señora Black no se percató, pero pude notar unas manchas de sangre en el césped a un lado de la entrada de la casa, algo ocurrió mientras ellos no estaban.

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Tyler.

Estaba en el auto de Ken, sin saber a dónde nos dirigimos. Él se había ofrecido a ayudarme a esconder el cuerpo de Ann, y como claramente no tenía ninguna idea de qué hacer en esa situación, acepté su ayuda. Cada vez nos alejamos más de la ciudad, por lo que le pregunté hacia dónde nos dirigimos.

- Tengo una pequeña residencia por las afueras de la ciudad, y a unos km más allá de la residencia hay una cabaña abandonada, los dueños la dejaron olvidada y nadie más sabe de ella- pareció pensar en algo antes de quedarse en silencio. Durante el pacifico trayecto no pude evitar robarles unas cuantas miradas a su rostro, era muy atractivo.

- ¿Tengo algo en la cara?– la voz de Ken me sorprendió, me había pillado mirándolo a escondidas. Me sentía avergonzado y no sabia que decir.

Pude escuchar cómo se reía, lo que ocasionó que me avergonzara mucho más, al punto de que sentía mi rostro arder. Pasaron así unos minutos hasta que el auto se detuvo en una gran casa.

- Ya llegamos, puedes bajar- el bajo y se dirigió a sacar el cuerpo del maletero, yo planeaba seguirlo pero el me indico que lo esperara dentro de la casa mejor. Decidí obedecerlo ya que tampoco me sentía cómodo viendo como enterraban el cuerpo de mi mejor amiga.

El interior del lugar no lucía tan elegante como esperaba, conociendo de donde provenía Ken, pero si lucía muy acogedor y cómodo. Todo luce muy limpio y ordenado, es como si nadie viviera aquí pero tampoco como si estuviera abandonado.

Él había dicho que la cabaña abandonada que había encontrado estaba cerca de aquí, por lo que no debería de tomarse tanto tiempo en volver. Decidí explorar el lugar mientras tanto. Había dos pisos, cuatro dormitorios, dos baños y algunas puertas más, las cuales no pude abrir; posiblemente sean habitaciones vacías. Solo habían dos dormitorios que se veían usados, uno debe de ser el de Ken, pero no sé de quién podrá ser el otro.

Entre para revisar un poco los alrededores de una de las dos habitaciones; primero revise la cama, había algunas manchas rojas, parecía ser sangre; en el velador no había nada interesante y debajo de la cama solo había un poco de suciedad y polvo. Me encamine para ver los armarios y veladores, tal vez ahí encuentre algo interesante de ver; en el armario había solamente algunos abrigos, algunos con algunas manchas en ellos, pero nada más. Al abrir uno de los cajones, pude encontrar una vieja fotografía en él; en ella aparecía un niño pequeño acompañado de una chica, deben de ser familia, pero el chico de la foto me parecía muy conocido... ¿no es el mismo chico que el de la foto que había mostrado Ann...? Miles.

Si el de la foto es realmente él, entonces ¿esta habitación también sería suya?

Pude notar que había algo más en el cajón, pero antes de que pudiera revisar que era, escuché como alguien cerraba la puerta en el piso de abajo, Ken debe de haber llegado. Dejare de pensar en eso y procuraré pasar más tiempo junto a Ken.

Mi Vecino de al Lado [BL]Where stories live. Discover now