Capítulo 05

1K 132 25
                                    

Tyler.

No sabia porque de repente decidí preguntar si podía acompañarlo, de donde habré sacado el valor.

- ... ¿Acompañarme? - preguntó confundido.

Me arrepiento de haber preguntado descuidadamente, no sabía ahora que decir para justificar y decir que estaba bromeando.

- S-si es que no te molesta- decidí seguir con la sugerencia, no tenía nada que perder.

- No es que me moleste, solo que... ¿podría saber por qué quieres acompañarme de la nada? - parecía genuinamente confundido, pero una sonrisa colgaba de sus labios. Mi corazón saltó un latido al ver su sonrisa.

- Porque quiero conocerte un poco más- respondí. Reuní todo el valor del mundo para decir esas palabras con confianza.

El silencio fue lo único que sentía, lo que era como una torutra para mi, que estaba esperando su respuesta. Mis nervios comenzaron a agitarse al ver que todavía no recibía una respuesta, y solo se calmaron cuando escuche como soltó una risa de la nada.

- Está bien, si así quieres no veo el problema- una sonrisa que fácilmente podría acelerar mi corazón colgaba de su rostro.

Decir que no estaba emocionado y con ganas de dar saltos de alegría sería mentira. El hecho de tan solo caminar a su lado, aún sin intercambiar palabras, era razón suficiente para que la felicidad invadiera mi ser. Aprovecharía este momento para resolver una pregunta que me carcomía la cabeza cada vez.

- ...Kendrick- asintió su cabeza, dando a entender que estaba escuchando- La vez que me encontraste estando tan exaltado, quería saber... ¿qué hacías en ese lugar? Quedaba muy lejos de tu casa también.

Traté de ver qué expresión tenía en su rostro al escuchar mi pregunta, pero su rostro se mantuvo neutro, sin mostrar ningún cambio. No sabía si sentirme aliviado o molesto por la falta de reacción.

- Nada en especial, estuve en una reunión en uno de los bares cercanos con un jefe de mi empresa, pero se terminó alargando más de lo necesario. Lo que me hizo salir tarde del lugar, y no había usado el auto, asique debía caminar- me explico mientras seguíamos caminando- Aunque por alguna razón, me encontré con un chico que lucía muy asustado que con el más mínimo ruido saltaría, me parecía muy conocido por lo que decidí acercarme- fijó su mirada en mí y sonrió- Ya deberías saber que paso después de eso.

Me sentí avergonzado al recordar el estado en el que me encontraba esa vez, por lo que no pude mirarlo a los ojos en estos momentos. Quería contarle lo que había presenciado esa noche, pero tenía el presentimiento de que era mejor no hacerlo, lo arrastraría a eso y esa no era la idea.

- ¿No tienes más preguntas?

- ... No.

- Entonces es mí turno de hacerte una pregunta, para ser justos- dijo riendo- ¿Qué es lo que hacías tú por esa zona y por qué estabas de esa manera?- la pregunta me dejó sin palabras, no sabia que responderle.

- E-estaba...- joder, no se me ocurria nada para decir- Creí haber visto a alguien que conocía y.... lo seguí hasta que lo perdí de vista- lo admito, era poco convincente, pero era lo unico que pude pensar.

- Hmm ya veo- la sonrisa seguía en su rostro- ¿Por eso casi terminas llorando?

- ¡No!- mis orejas estaban ardiendo- Es que había perdido de vista a la persona... y no sabía en donde me encontraba ya que no conocía esa zona, por lo que me perdí.

Maldición, esto era demasiado humillante para decir, pero era lo mejor que podía hacer para no sonar sospechoso.

- ... Con que perdido- parecía estar pensando en algo, por lo que aproveche de robarle unas miradas rápidas- ¿Vas a pasar?- no sabia cuanto tiempo pasé mirándolo, pero ya estábamos frente a su casa y él había abierto la puerta.

Me avergoncé al ser atrapado, pero rápidamente acepté la invitación y entré. Él se disculpó un momento y fue a dejar sus cosas en su habitación, por lo que decidí dar una vuelta por la sala nuevamente. Note que había una foto en el suelo, debajo de una de las cajas de mudanzas, parecía haberse caído por accidente de la caja mientras estaba organizando. Me agache un poco para tomarla y ver de qué se trataba; una foto familiar.

En la derecha se encontraba una bella mujer de rasgos finos y cabellera larga, color castaño; sus ojos eran de un hermoso color castaño y su apariencia irradiaba felicidad. A su lado izquierdo, un hombre de estatura alta, pelo y ojos negros, su apariencia demostraba frialdad. Por último, frente a ambos padres, se encontraba un niño; parecía tener unos 4 o 5 años, su rostro era la agradable combinación de ambos padres.

Lo extraño era que el niño no lucía para nada como Kendrick, por lo que no debe tratarse de él.

¿Quienes eran esta familia?

- ¿Qué estás haciendo?- no me había percatado cuando volvió, por lo que me asuste apenas oí la voz a mis espaldas.

- Veía esta foto- levante la foto que había estado en el suelo hace unos momentos- ¿Quienes son? - pregunté con curiosidad.

Por un momento creí haber visto cómo su mirada se oscurecía al ver la fotografía, pero luego vi que estaba normal. Debe de haber sido mi imaginación.

- Es de alguien que conozco, debe de haberse metido entre las cosas- respondió. Su mirada parecía estar recordando algo, por lo que encontré que lo mejor sería dejar el tema de lado.

Decidí cambiar el ambiente, por lo que me ofrecí ayudarlo a hacer unos sándwiches para llenar nuestro estómagos mientras conversabamos. Durante ese tiempo que pasamos hablando, logre aprender más y más acerca de él; su color favorito era el azul, tuvo un conejo llamado Lilo, la ciudad donde antes vivía se encontraba a unos cuantos kilómetros lejos de aquí, no tiene muchos amigos y la razón por la que se mudo fueron problemas familiares. Aún cuando eran pequeños detalles, estaba aprendiendo poco a poco más sobre él, lo que me hacía feliz.

Incluso me dejó llamarlo Ken en vez de su nombre completo cuando le pregunté. Planeaba continuar con nuestra conversación, pero mi celular vibró; un mensaje de Ann.

Ann: ¡Maldita sea, responde las condenadas llamadas!

Estuve tan absorto hablando con él, que no me había fijado que tenía ya unas cuantas llamadas perdidas.

Yo: Lo sientooooo, tenía el celular en silencio y no me percaté de las llamadas.

Una pequeña mentira no hace daño.

Ann: ¡Ya no importa! Solo te aviso que he descubierto algo interesante que puede estar involucrado con nuestro asesino en serie. Mañana hablaremos, cuando todos estén presentes.

Me pregunto con qué tontería saldrá ahora esta mujer.

- ¿Qué pasa?- despegué mi mirada del celu y lo volteé a ver- ¿Mensajes de tú novia?

- ¡No!- por dios, eso salió de mi alma- Es solo una amiga.

No quería que malinterpretara mi relación con Ann, antes muerto que hacerle pensar que estaba saliendo con ella.

- Con que es así, pero ¿tienes a alguien que te gusta como para negarlo tan fuertemente?- mis palabras quedaron atoradas en mi garganta.

La pregunta vino de la nada, por lo que no sabía cómo responderle. Cerraba y abría la boca a cada rato, tratando de decir algo pero sin que mis palabras salieran.

- Parece que es correcto, ¿puedo saber quién es?- su rostro mostraba que estaba curioso.

No sabia que decir, por lo que tome una decisión arriesgada, mejor ahora que tarde.

- ... T-tú- aún cuando dije que tomé una decisión, no significaba que la otra parte debía oirla.

Mire su rostro, solo para percatarme que mi humilde confesión si fue escuchada.

Mierda.

Mi Vecino de al Lado [BL]Место, где живут истории. Откройте их для себя