Papá, ¿Qué Es Pilurre? (EDITANDO)

Capítulo 57

《Boda parte 1》

Narra Ariadna

Estoy muy nerviosa.-- dijo mi madre mientras yo le entregaba el ramo de flores a Sofía.

Mis padres habían decidido casarse en Mayo. Llevaban 3 meses organizándolo todo.

También durante esos tres meses, fueron varias veces al ginecólogo.

Yo sabía que ya conocían el sexo del bebé, pero los dos me aseguraron que hasta el día de la boda no lo iban a decir.

Te vas a casar con el amor de tu vida.-- dijo mi tía Araceli-- ¿Qué más quieres? Ojalá me pasara a mí.

Ella sonrió y se giró para mirarla.

Estoy segura de que encontraras a tu alma gemela.-- le dijo

¡Tenemos que bajar ya!-- dijo Rena entrando.

La tripa de embarazada de Rena se notaba mucho más que la de mi madre.

A ella ya le quedaba poco para dar a luz.

Bajamos todas las escaleras y nos colocamos en nuestra posiciones.

La boda era al aire libre, en la misma playa donde tuvieron su primera cita.

Desde lejos vi a mi padre nervioso en el altar.

Estaba guapísimo con el traje negro. A su lado iban Santi, Simón y sus hermanos.

Donde estábamos nosotras no se nos veía porque habían colocado unos arbustos tan altos que no se podía ver absolutamente nada.

Toma-- me dijo Rena entregándome los anillos de matrimonio.

Sí, yo iba a llevar los anillos.

No sé si realmente era mi madre la que estaba muy nerviosa o era yo.

Estás preciosa.-- me dijo Toby que iba a ser el acompañante de una de mis primas.

Gracias.-- contesté nerviosa.

¿Por qué me ponía nerviosa? Era mi mejor amigo.

Quité esos pensamientos de la cabeza y observé a mi madre.

Hoy era su día, el de ella y el de mi padre.

Por fin, íbamos a ser una familia de verdad.

Ella me miró y me sonrió.

¿Pasa algo?-- preguntó y yo negué

No llores Ariadna, no llores.

Es que esto no es nada de como me lo imaginé.-- dije y ella frunció el ceño-- Es muchísimo mejor. Cuando papá te vea si no se cae al suelo será un milagro.

Me apretó la mano y la música empezó a sonar.

Primero salimos los niños.

Delante mía iban todos mis primos y primas echando pétalos de flores por el suelo.

Yo iba detrás de todos ellos y en mis manos llevaba los anillos de compromiso.

Cuando llegué al altar, miré a mi padre y le guiñé el ojo.

Las madrinas fueron las siguientes en salir.

Cuando se colocaron en el altar yo me puse a su lado.

Entonces la música cambió de ritmo y apareció mi madre.

Iba acompañada de mi abuela, es decir, su madre.

Como mi abuelo murió hace unos años, a Pilar le hacía especial ilusión que fuera ella quien la llevara al altar