EL MEJOR AMIGO DE MI HERMANA

Capítulo 9

Todo el camino iba bien por el momento, era un viaje bastante largo así que como era de suponerse habían turbulencias muy leves cada tanto, pero la viejita a mi costado, que por cierto, se llama Sarah me contó muchas historias y eso me tranquilizó.

- ¿viajas sola? - dijo la señora Sarah.

- no, de hecho viajo con 4 personas más. Mi hermana... - dije apuntandola, ella estaba escuchando música - con mi mejor amiga y su novio... - los volteé a ver y vi que Isa está recostada sobre el hombro de Liam mientras los dos duermen, se ven muy lindos - y un amigo más.

James está durmiendo, se ve demasiado lindo así, que cosa, el se ve lindo siempre, esté despierto o durmiendo, el siempre se ve muy bien.

- ese amigo del que hablas ya te flechó - dijo Sarah.

- bueno... Ummm... Un poco... Bueno, en realidad si, y mucho, pero no pensé que se me notara tanto - dije un poco avergonzada.

- Ay mi niña, no es que se te note, es solo que esta viejita a visto muchas veces en su larga vida esa carita, además noto como se te iluminan los ojos cada vez que hablas sobre el, o cuando lo miras - me dijo con una voz bastante reconfortante.

Estar aquí, sentada con la señora Sarah, contándole sobre mis cosas y ella tratando de ayudarme, me recuerda mucho a mi madre, y eso hace que yo la extrañe, y me arrepiento de lo que hice antes de su fallecimiento, pero todo eso ya quedó en el pasado.

- bueno, pero yo ya perdí las esperanzas, el solo me ve como su "casi hermana menor" - dije triste y con todas las esperanzas completamente perdidas.

- ¿cómo lo sabes? - dijo Sarah con una sonrisa en el rostro.

- el me lo dijo, el me dijo que yo era como su "casi hermana menor" - dije.

Me sentí muy triste al recordar ese momento, que el chico que te gusta te vea como su hermana menor, no es lo mas bonito del mundo. De pronto sentí a alguien tocandome el hombro.

- Em, hola, si, este, necesito que me ayudes con un pequeño problema de unos seis años.

Volteé a ver a Sarah y vi que se hizo la dormida, eso me causó un poco de gracia, eso lo podría esperar de Isa, pero Sarah es una persona mayor pudo habersele ocurrido otra excusa.

- ¿qué cosa tan mala te pudo haber hecho un niño de seis años? - dije un poco queriéndome reír.

- oh creeme, mucho, está pateando mi asiento y no me deja dormir tranquilo, y su estúpido papá no le dice absolutamente nada, yo ya traté de decirle que me deje en paz, pero tu, de alguna manera te llevas demasiado bien con los niños y bueno, si pudieras decirle que por favor deje de patear mi asiento, te lo agradecería, y mi espalda también - dijo lo último con una voz un poco divertida.

- está bien, pero, no te prometo nada James - dije levantándome.

Me dirigí hacia el niño, y tal como me lo dijo James aparenta unos seis años, es un niño con cara angelical, es rubio, ojos café muy oscuro, y estos resaltan con su piel muy blanca, parece un niño muy tranquilo, incapaz de hacer algo malo a propósito.

- hola amiguito ¿cómo te llamas? - dije con voz amable.

- me llamó Daniel - dijo con una voz dulce.

- bueno, hola Dani, me dijo mi amigo el gruñón - dije señalando a James - que estuviste pateando su asiento, y que por más que él te dijo que no lo hagas, tú sigues haciéndolo, ¿eso es cierto? - dije acercándome a Dani.

- si, es cierto - dijo bajando la cabeza - pero es que el fue muy grosero conmigo, me gritó y me dijo que cada vez que yo pateaba el asiento le avisaba al diablo dónde estaba para que me lleve con él - dijo asustado.