SUSURROS (taeten)

cuántas cosas

Todo avanza de manera rápida y para cuando Ten se da cuenta de que el tiempo no se detuvo en la estela rojiza desapareciendo de su vista, los días siguen intermitentes.

Cada uno de los miembros se ocupa con sus agendas personales y Ten no es la excepción. No vuelve a tener ensayos de Baby Don't Stop con Taeyong hyung pero eso no quiere decir que no esté ocupado. Además, hyung también tiene cosas qué hacer; muchas más cosas qué hacer, así que prefiere no pensar tanto en el hecho de que el mayor no ha contestado a ninguno de sus mensajes. Ni siquiera parece haberlos leído.

Pero Ten tampoco ha contestado los mensajes de Johnny pidiéndole explicaciones. Sabe que va a tener que hacerlo pronto, pero cada vez que ve la notificación de un mensaje nuevo por parte del americano, piensa que Taeyong tiene prácticamente las mismas agendas que él, y sin embargo el líder no da signos de siquiera saber que tiene un teléfono celular, a juzgar porque tampoco ha hecho acto de presencia en ninguna de sus otras redes sociales.

No obstante, aunque Ten no es orgulloso ni guarda ningún rencor, sí que es profesional, por lo que decide no seguir intentando (al menos por el día de hoy). Los chicos de NCT 127 tienen la presentación en los Seoul Music Awards 2018, y no quiere causar una distracción.

Además, es mejor si ocupa su mente en su actividad actual: la de preparar su maleta para el vuelo a los Ángeles. La estadía no va a ser muy larga, pero no está seguro si llevar ropa de frío es prudente.

-¿Qué haces, hyung? -Una voz lo saca de sus pensamientos. Es Renjun, que le habla asomándose por la puerta de su habitación.

Ten lo regaña con la mirada y el menor rueda los ojos antes de salir y cerrar la puerta tras él. Sonríe complacido y burlón pero carraspea y recupera la compostura cuando escucha un par de golpes llamar a la puerta.

-¡Adelante! -Indica con el final de la sonrisa en la cara.

Renjun entra por la puerta echando humo y Ten estaría preocupado si supiera que el enojo del menor va en serio. Se carcajea sentado en la cama y su dongsaeng se acerca y toma el par de calcetines que está más cerca de su cuerpo y se lo lanza antes de salir corriendo. La puerta abierta de par en par. Ten recoge las prendas, que cayeron al suelo después de golpearle la cabeza, a la velocidad de la luz, y sigue al otro chico hasta el pasillo, donde lo encuentra "escondido" detrás de una columna.

-¡Hyung! -Ríe el delgado muchacho y levanta los brazos a la altura de los hombros en posición de estarse rindiendo. -¡Pido paz! ¡Ofrezco una tregua!

-¿Qué me ofreces para que la acepte? -Pregunta Ten, de inmediato en modo negocios.

-¡Una pera! -Sigue riendo Renjun. Ten empequeñece los ojos al tamaño de rendijas y bufa. -¡Bromeo, hyung! -Aclara pero sigue riendo y Ten se da el lujo de poner él mismo las condiciones.

-Te diré lo que quiero. -Anuncia solemnemente.

-Ugh. -Renjun parece disgustado y Ten sonríe perverso. -¿Qué quieres? No estoy dispuesto a hacer de cupido entre tú y Taeyong hyung.

Ten exhala fuerte por la nariz en indignación. ¿De qué habla Injun? Se supone que nadie sabe sobre su crush con el líder.

-No digas tonterías, niño. ¿De dónde sacas esas cosas?

-Por favor, Ten hyung. Todo el mundo sabe de tu crush con Taeyong hyung, incluso él. ¿Qué, me vas a decir que no sabías?

-¿Quién te dijo eso, Renjun? -Pregunta ante la seguridad con la que el adolescente profesa lo que dice. Ten está seguro de que nunca le dijo nada a nadie, a pesar de que su flechazo con el mayor no pasara desapercibido para algunos. De todas formas, le gustaría que nada de eso se diera a conocer. Al menos, no todavía, considerando que ni siquiera ha tenido contacto alguno con Taeyong. Tal vez debería empezar a considerar las palomas mensajeras. -Y por favor, baja la voz. Nunca sabes quién puede estar escuchando lo que decimos. -Aconseja, y toma de la mano a su dongsaeng para luego arrastrarlo de vuelta a su habitación y cerrar la puerta con seguro una vez que ambos están dentro.

-Estás paranoico, Ten hyung. Nadie va a decir nada. -Le asegura.

-¿Cómo estás tan seguro? Aquí hay que desconfiar de todos. -Exclama con el ceño fruncido y un puchero en los labios.

-Primero; -empieza Renjun, -no hagas esas caras que el único que cae por ellas es Taeyong hyung. -Le apunta con un dedo acusador y Ten exagera el puchero en sus labios. Renjun rueda los ojos por segunda vez desde que lo vio durante el día y prosigue. -Y segundo; no hay nadie en el dormitorio, nadie nos puede escuchar.

Oh.

-De todas formas, no me has dicho quién te dijo esas cosas. ¿Y por qué las estás repitiendo si no estás seguro?

-No lo sé. -Renjun se encoje de hombros. -Es que me parece indignante verte pendiente del celular esperando por un mensaje de Taeyong hyung que puede que nunca llegue.

Renjun tiene razón, y por más triste que eso le parezca, tiene que aceptarlo. Como le dijo el delgado muchacho, su crush con el líder es un secreto a voces, y a pesar de que ha habido ocasiones en las que el mayor parece corresponderle, el hecho de que no tenga noticias de él y no le haya dirigido la palabra todavía quiere decir que su obsesión romántica no funciona a la inversa. O al menos, no al mismo nivel.

Sin embargo, no puede evitar preguntar:

-¿Cómo estás tan seguro de que no va a contestarme? -Se sienta lentamente en la cama y continúa doblando la ropa que piensa llevarse a Los Ángeles. Espera que su voz suene tan desinteresada como quiere aparentar.

-Mark hyung me dijo que tienen confiscados los celulares durante el día.

-Oh, vaya... espera, ¿qué? ¿Por que hicieron eso? -Cuestiona alarmado.

-No entendí muy bien. Parece que John hyung y Taeyong hyung se pelearon. Y supongo que en algún momento deben regresárselos para comunicarse con sus familias, pero tal vez Taeyong hyung está muy cansado y por eso no te ha dicho nada. Dice Mark hyung que ha estado practicando más de la cuenta desde que regresaron de Ucrania. -Termina Injun y respira profundo, como si lo hubiese dicho todo con una bocanada de aire.

Taeyong hyung y Johnny hyung se pelearon. No sabe cómo tomarse esa noticia, y debería no creerlo todo al pie de la letra, pero Renjun no es un mentiroso. Suspira. Y espera que ambos puedan arreglarlo todo porque al final de cuentas fue por ellos que ésta barrera entre los tres se erigió. No sabe por qué pero tiene la intuición de que Taeyong hyung va a contestarle los mensajes cuando arregle las cosas con Johnny. Sea lo que sea que tengan que arreglar.

-¿Hyung? -La voz de Renjun lo saca de su ensueño.

-¿Qué ocurre? -Pregunta distraído.

-Todavía no me dices qué estás haciendo.

Cierto.

-Estoy decidiendo qué me voy a llevar a Los Ángeles. ¿Tú ya tienes todo listo?

Renjun parece confundido. ¿Y ahora qué me va a decir?

-¿No te han dicho nada, Ten hyung? Retrasaron el viaje.

Los ojos de su dongsaeng muestran sinceridad y algún otro tipo de reacción que Ten no quiere detenerse a analizar pues sabe que no va a gustarle para nada, pero es algo parecido a la lástima. ¿Es que no es importante que él sepa si su vuelo se retrasó?

¿Cuántas cosas no me están diciendo?