Taeyong

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-Hyung, ¿qué? -Le pregunta Ten y se encuentra a punto de decir la mentira más grande de su vida.

Su dongsaeng lo mira directamente a los ojos y se siente como la primera vez que es sometido a un escrutinio en toda regla. Los ojos de Ten jamás se habían visto tan abiertos y a la vez confundidos. Lo que daría por borrar ese ceño de preocupación. Y se lo pregunta seriamente pero no tiene una buena respuesta. La verdad es que no tiene nada qué ofrecer.

-¿Oh? -Intenta ganar tiempo. No quiere mentirle, así que opta por una media verdad. Niega con la cabeza. -Estoy cansado, Tennie.

No es del todo falso, lo sabe. Pero tampoco es tan cínico como para decir que una media verdad no es una mentira incompleta. Su conciencia le dice que debería hacer muchas cosas mientras que su empresa, sus mánagers y su sociedad, le dicen cosas distintas. Es cierto que está cansado. Y es jodidamente cierto que no va a aprovecharse de eso y empezar a flojear.

Pero está consciente de que Ten no le cree del todo.

-¿Estás seguro, hyung? -Le cuestiona el chico con la cabeza ladeada y a Taeyong le pica la lengua por decirle cuán lindo se ve haciendo ese gesto. Pero no lo hace. -¿Por qué no te creo?

-Porque tú sospechas de todo el mundo. -Se encoge de hombros y sonríe de lado cuando ve que Ten lo mira con los ojos entrecerrados. El joven hace un puchero.

-Voy a investigar, hyung.

Y por “investigar” sabe que se refiere a Johnny, quien, por supuesto, va a decirle todo. Tiene que actuar antes de que Ten y Johnny se junten, al menos por esta noche. Francamente, le gustaría no estar presente cuando los amigos hablen de él y lo hagan sentir como una maceta, destinada a decorar y esperar a que alguien haga algo por ella.

-Puedes hacer eso después. -Indica. -Por ahora tenemos que empezar con esta reunión.

-Te tomaré la palabra, Taeyong-ssi. -Asiente Ten. -Pero es porque los mánagers no estarán aquí.

Taeyong empieza a preguntarse qué pretende el chico cuando este lo toma de la mano y los encamina al sofá, donde se sienta y hace a Taeyong sentarse a su lado. Enseguida, todos hacen silencio y esperan a que hable.

Distribuidos en los sofás, sillas y en el suelo, Taeyong los mira de uno por uno; Taeil hyung con su rareza carismática; Johnny y Yuta, sus amigos; Doyoung y Kun, quien por fin saldrá a la luz; Yoonoh y Sicheng, guapos y más inocentes de lo que en realidad son; Jungwoo, cuyo “personaje” le queda bien y lo disfruta; Mark y Yukhei, niños inteligentes y talentosos; luego están los bebés de la 00 line -Donghyuckie, Jeno, Jaemin y Renjun-; Chenle, el pequeño noble de corazón; y Jisung, el maknae on top. Y Ten. Ten-ssi. Chittaphon. Siempre sonriente y con algo qué aportar.

No exagera cuando piensa que daría la vida por estos chicos, a pesar de los desacuerdos o los argumentos. Son su familia y se siente orgulloso de cada uno de ellos. Es increíble cómo un sueño los llevó a todos a un mismo lugar, y cómo, cada una de las personas presentes en esta sala de estar, ha derramado sudor y lágrimas por alcanzarlo. Sabe que si las decisiones las tomara él, ya todos estarían sentados en sus tronos, en la cima del mundo, hablando entre ellos y eligiendo qué hacer para poder ayudar a otros. Sabe que ninguno se negaría. Sabe que todos hicieron un sacrificio de algún tipo, que no tendrían qué haber hecho, pero aquí están. Y se siente agradecido por ello.

Recorre con los ojos los rostros de los demás, intentando que lo que va a decir se sienta más personal (aunque haya dieciocho de ellos), y cada uno le sonríe o asiente con la cabeza. Saben a qué vinieron. Y cuando sus ojos llegan a Ten, el chico toma su mano y sonríe imposiblemente brillante. No podría sentirse más listo que en el presente.

-Falta poco para la presentación de NCT 2018. -Habla por fin. -Y hemos trabajado mucho día a día, sin descanso, para lo que está a punto de suceder. No digo que vaya a ser fácil, habrá momentos en los que vamos a querer tirar la toalla y llorar y rendirnos de una vez por todas; habrá personas que no nos quieran ver triunfar y no lo hacemos por ellos, lo hacemos por nuestros fans y por nosotros mismos. Vinimos a cumplir un sueño, y por más difícil que sea, sé que con el trabajo duro llegará el día en que podamos decir que ha valido la pena. -Hace una pausa para dejar que los demás digieran sus palabras. Y continúa. -Y estoy feliz de compartir este sueño con ustedes. Con cada uno. -Ten aprieta su mano a su lado y lo inunda un calor que lo hace querer saltar de alegría o esconderse y ponerse a llorar. Cuando se termine la reunión, probablemente haga lo segundo, pero por ahora, se decide por hacer un gesto de asentimiento y sonreír suavemente, con los labios apretados. Es su primer sonrisa real en horas. -Gracias, chicos. Son mi familia y los quiero.

Y alguien en la habitación empieza a aplaudir y pronto están todos parados y gritando en celebración (probablemente sean Yukhei o Chenle quienes empezaron todo, pero no  es difícil sentirse contagiado por ellos), algunos empiezan a bailar.

Y no se demora en verse rodeado por unos brazos, y luego otros, y luego el resto de los diecisiete chicos están unidos. No sabe qué pasa por sus cabezas, pero sabe qué pasa por la suya: que no importa lo que suceda, no cambiaría esto por nada.
















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Necesito un mejor trato para los miembros de NCT. Descanso para los que no lo tienen y oportunidades para los que les faltan.

Gracias por leer ♡

SUSURROS (taeten)Where stories live. Discover now