Taeyong

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El dolor de cabeza de la mañana siguiente es agudo pero nada que no pueda arreglarse con un analgésico. Es raro. Taeyong sabe que la noche anterior bebió un poco pero no lo suficiente para ocasionarle cualquier malestar como el de ahora, entonces se pregunta qué es lo que le tiene tan mal.

Al levantarse de la cama se queda quieto en su sitio, intentando evitar los mareos. En la otra cama se encuentra Doyoung, también sentado pero ya vestido y con las maletas listas para irse, lo mira fijamente y niega un poco con la cabeza.

Apunta con la mano a la mesa de noche entre las camas.

-Una pastilla. -Aclara su amigo. -Mánager hyung no tarda en venir. Deberías entrar a la ducha ya.

Taeyong asiente con la cabeza.

-¿Ya están listos todos? -Pregunta en un intento de parecer responsable. Doyoung le dirige una mirada de desaprobación y Taeyong no sabe qué es lo que desaprueba, si el que haya bebido o el que intente parecer interesado. Prefiere no preguntarle. -Lo siento. -Termina disculpándose.

-Ahórratelo. Todos merecíamos relajarnos un poco. -Dice Doyoung con ojos muy abiertos. -Además, no creo que sea yo con quien deberías disculparte.

-¿Eh? ¿A qué te refieres?

-No lo sé. -El chico se encoge de hombros mientras le extiende el medicamento de una vez por todas y un vaso de agua. -Al final de la noche Ten se veía malhumorado. Podría ser cualquier cosa pero de verdad temo por la vida de Jungwoo, al final de cuentas los dos durmieron en la misma habitación.

Taeyong abre mucho los ojos, imitando la expresión del más joven, y de pronto se siente en alerta.

-¿Tú de verdad crees que le haya hecho algo a Jungwoo? -De repente está frenético y no entiende por qué. -¿Que le haya dicho algo?

-Claro que no, hyung. Ten podrá sonar amenazante pero en realidad es un gatito. -Doyoung ríe un poco. Luego se queda serio. -No le digas que te dije eso. De todas formas, ¿por qué iba a decirle algo a Jungwoo? ¿Pasó algo?

Taeyong niega con la cabeza pero se siente incapaz de mirar a Doyoung a los ojos. Prefiere lidiar solo con sus pensamientos tormentosos.

Luego todo se vuelve un destello. De Jaehyun entrando para encontrar a Doyoung, de ambos apresurándolo para entrar al cuarto de baño y dejándolo ahí, del ruido de mánager hyung buscando a los menores y luego tocando la puerta del baño para apresurarlo, una vez más, para encontrarse con él y Ten en el lobby del hotel, donde se irán a la locación del video musical de su dueto con el menor. Llega casi cayéndose a los pies de Ten y sin haber probado bocado.

Sólo espera poder comer algo antes de empezar a grabar.

Ya en el sitio, ambos son llevados a vestuario y maquillaje. Ten se ve más descansado de lo que Taeyong se siente.

Mánager hyung aparece con el desayuno y Taeyong casi puede imaginarse el coro de ángeles y arpas bajando desde el cielo. A su lado, Ten podría estar pensando lo mismo si la expresión de su cara y el brillo de sus ojos fueran una pista de ello.

-¡Hyung! -Ten se pone de pie de un brinco. La chica de maquillaje sólo ríe y niega con la cabeza. -¡Creí que iba a morir de hambre!

Taeyong se pone de pie también y se acerca a los demás. En cuanto llega a lado de Ten el menor se tensa y Taeyong puede ver cómo un escalofrío recorre la piel del cuello del otro, enseguida Ten lo mira a los ojos un par de segundos y se retira antes de que pueda decirle algo. Se pregunta si sucede algo con él.

-¿Qué está pasando con ustedes? -Pregunta mánager hyung cuando nota lo sucedido.

Taeyong se encoge de hombros porque es verdad que no recuerda haber hecho algo para incomodar a su compañero.

-No sé. -Declara en voz baja; tampoco va a hacer un escándalo de algo tan pequeño.

-Bueno, pues espero que no les desconcentre a la hora de grabar.

-No lo hará. -Contesta con seguridad.

Pero la verdad es que Taeyong está mucho menos que seguro sobre todo el asunto, y se nota cuando, al terminar de prepararse para empezar a grabar, se dirige a Ten para hablar con él y afinar los últimos detalles y el pequeño sólo escucha y asiente con la cabeza, sin dirigirle la más mínima palabra. Quiere preguntarle qué ocurre pero el director los llama a posiciones y Taeyong tiene que esperar.

Se da cuenta de que nada va bien desde el mismo momento en que la música empieza a sonar. Taeyong está distraído, la actitud fría de Ten inundándole la cabeza al igual que un vaso que se llena de a poco y pronto se encuentra casi rebasado. La cercanía del otro a su lado y el toque de las manos de Ten sobre sus hombros no se siente bien, de hecho, es como si hubiesen vuelto al principio, donde la incomodidad era más grande que el profesionalismo.

Empieza a pensar que es injusto que sea el único sintiéndose de esa manera, quiere creer que el otro está mejor que él, pero enseguida cambia de opinión cuando Ten (o él mismo, ya no está seguro de nada) se acerca demasiado y hace que ambos cuerpos choquen y la coreografía se estropeé.

La música se detiene y todo se queda en silencio.

Ten y él jamás habían estado tan descoordinados, ni siquiera cuando los ensayos de Baby Don’t Stop apenas empezaban.

Por primera vez en su vida Taeyong siente miedo, y el pensamiento egoísta de que es el único lidiando con una emoción tan negativa se evapora en el instante en que Ten le dirige una mirada llena de lágrimas cautivas.











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Es raro escribir capítulos de mil palabras o menos, pero sí que es mucho más fácil.

En fin, el próximo capítulo se viene medio intenso así que es probable que lo suba hasta mañana tarde en la noche o el martes durante el transcurso de la mañana.

¡Gracias por leer!

SUSURROS (taeten)Where stories live. Discover now