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Si bien Blake no era la persona más cuirsi del mundo si que era bastante atento y detallista, este luego de varios minutos de caminar habían llegado a un lugar apartado dentro del bosque el cual tenía sólo una mesa en el centro con luces luminosas como las pulceras que brillan en la oscuridad, en realidad se veía muy lindo a demas de ver que había un pequeño florero que lo adornaba y dos sillas color cafe.

Blake: ven siéntate.

Invitó el chico con una gran sonrisa, Sam por otro lado estaba sin palabras, solo pudo murmurar un "si" de su parte mientras se sentaba en la silla la cual como todo un caballero Blake lo ayudaba.
El lobo no podía dejar de sonreír, su lobo chillaba de la emoción mientras veían el lugar, parecía bastante sencillo pero con solo el hecho de pensar que Blake lo había echo solo para el lo llenaba de ternura.

Sam: ¿ya me dirás por qué vinimos a este lugar?

Preguntó con una sonrisa coqueta mientras recargaba sus brazos en la mesa y veía directamente a los ojos de su mate. El vampiro sonrió negando un poco y sn esperarlo abrió aquella charola frente a ellos, justo frente a él se veían dos platos los cuales contenían lo mismo, espagueti, carne empanizada, un poco de enzalada y un pequeño vasito que contenía gomitas y chocolates.

Blake: prepare la comida hace un rato así que si no te gusta o esta malo lo puedes dejar.

Murmuró mirando directamente la comida, por lo que sabía Sam, Blake no sabía cocinar nada de nada, y a pesar de ver como la carne parecía quemada y el espagueti semi crudo, tomo uno de las platos con una mirada enternecida y sin que el vampiro se lo esperara Sam ya se encontraba comiendo tranquilamente su comida.

Blake: ¿está... Bueno?....

Sam: está... Delicioso.

Comentó con una pequeña sonrisa, en realidad este no era el caso pero si el chico se había esforzado por preparar algo con su esfuerzo solo para el, no le molestaba comer hasta rocas por el. Blake se sentía muy feliz, a pesar de ser un vampiro este carecía de gusto, amenos de que fuera cruda la carne o la sangre por lo que fue un gran logro para el al escuchar como su mate comía tranquilamente la comida.

Blake no quería ser excluido por lo que también tomo su plato aunque esté tenía la carne totalmente cruda, platicaron de varias cosas, mirandose a los ojos que hacían reflejo en la luna. Sonreían y reían en una amena platica sintiendo como sus corazones se conectaban cada vez más.
En un momento de risas y sonrisas Blake tomó la mano del chico muy junto a sus copas, esto había sido tan naturalmente que Sam no se dio cuenta hasta luego de unos minutos después.

Blake: Sam... Hay algo que te quiero decir.

Sam le sonrió y tomo con un poco más de fuerza la mano del chico indicándole que continuará mientras le prestaba su total atención, sin duda esta había sido la velada más fantástica del mundo y estaba muy agradecido por ello, se sentía muy tranquilo y feliz junto a su mate que había olvidado todos sus problemas para sólo concentrarse en su mate.

Blake: yo... Quería preguntarte algo muy inportante, tu sabes que... Al principio no nos llevamos muy bien que digamos, eramos peor que un gato y un perro.

Aclaro con una risita la cual no pudo evitar sonreír Sam ante su semejanza, aunque se quedó callado al ver como este le sonreia con ternura y con lentitud colocaba su mano en su mejilla acariciandola con lentitud y cariño.

Blake: siempre pensé que serias un chico que cambiaría mi vida por completo... Y mírame ahora, no te puedo sacar de mi mente en ningún momento, mi corazón late cada vez que te veo sonreír y llora cuando te vez triste, eres la persona más inportante para mi y en verdad agradezco mucho que aquel día en aquella estación te haya conocido... Por eso y por más quería hacerte un simple pregunta... Sam Moon Meller ¿me harías el honor de ser tu novio?


Si tuviera agua en su boca de seguro la hubiera tirado en seguida, pero ahora que lo pensaba y escuchaba el se encontraba igual que el, su corazón latía con rapidez al verlo, ya no tenía excusas para negarlo y por extraño que el pareciese le gustaba la sensación de ser amado por el... Por aquel vampiro de ojos azules...


Sam: yo... Acepto.

Afirmó con una gran sonrisa mientras tomaba con delicadeza la mano que aun reposaba en su mejilla apretandola con cariño. Blake en ese momento abrió los ojos con sorpresa y para asombro de él este se levantó de su asiento con felicidad realizando un baile bastante gracioso, Sam no pudo evitar soltar una risita sintiendo como su lobo gritaba de alegría.
Y tomándolo por sorpresa este con rapidez se acerco a él y lo beso con intensidad sintiendo de inmediato aquel sabor que lo caracterizaba, un dulce manjar para su boca, no dudo en corresponderle y tomarlo de las mejillas mientras se levantaba de su asiento sin dejar de besarlo.






Ahora por fin... Serían felices...







–1. y... ¿Qué crees que pase?–

–2. Es muy gracioso esta situación jaja–

–3. Siempre decías que el era el amor que tanto habías querido y miralo ahora... Un gay entregandose a quien sea–

–¡YA PAREN! No les permito hablar así de el, el... Solamente esta confundido eso es todo... –

–1. Cariño...el no esta confundido... El es su mate, por favor ya dejalo de una vez, permite le que su vida sea encantadora y dejalo ir... Deja que el sea feliz... –

–El no se merece una vida feliz... El... Me quito la mia–

"Un Omega Diferente"Where stories live. Discover now