2. Inicio de clases

25.4K 2.7K 1.3K
                                    

-No creo que debas sentarte conmigo- dijo harry y ante la confusión que vio en la cara de Matt añadió- a los Slytherin no les va a gustar.

-No me importa, se cuidarme- dijo sentándose. 

El profesor Snape entró cómo solía hacer siempre a las clases de pociones, con su aire imponente y las túnicas ondulando bajo sus pies. La única diferencia que había era el brillo en sus ojos, el cual probablemente se debía a haber conseguido su ansiada plaza como profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras después de tanto tiempo, aunque sin duda ese no era un aspecto que valoraran los Gryffindor. En cambio, los Slytherin radiaban felicidad o maldad según se mire, porque sus sonrisas eran bastante siniestras. 

-Debido al año anterior soy consciente de que sois probablemente el curso con peor formación de toda la historia de Hogwarts. El retraso que lleváis me obliga a hacer un repaso del año pasado y de cuarto. No voy a aceptar incompetentes en esta clase, quien no consiga ponerse al día, será mejor que no venga. 

Harry vio la cara pálida de Neville, el pobre había pensado que finalmente se había librado de Snape al no coger pociones pero se había encontrado con la sorpresa de que Snape era el nuevo profesor de Defensa. Habían intentando tranquilizarle y hacer que confiara en sus habilidades pero no había servido para nada.

-Señor Potter, espero que esté a la altura de sus calificaciones y no sea una decepción como en pociones.

-Si resulto ser una decepción será porque sus métodos de enseñanza dejan que desear- dijo Harry entre dientes. No iba a tolerar que pensaran que le habían regalado la nota. 

-10 puntos menos para Gryffindor por su insolencia- siseó.

-Ya empezamos-murmuró por lo bajo con disgusto.

-Señor Longbottom, me sorprende verle aquí. 

Las risas de Slytherin aumentaron pero fueron silenciadas con una sola mirada de Snape. 

-Supongo que podríamos empezar con un repaso de las maldiciones imperdonables, ya que en cuarto año visteis algo, aunque dudo que lo suficiente.

-No hay forma de que me libre de ellas- refunfuñó Harry en voz baja.

-¿No te gustan? A mi me parecen muy interesantes- dijo con una sonrisa Matt.

-No, no me gustan, aunque parece que yo tengo imán para ellas- susurró Harry.

Voldemort deseaba soltar una carcajada estridente que probablemente revelaría más de lo que quisiera. Le encantaba ese sentimiento, porque sabía perfectamente a lo que se refería su compañero de escritorio. 

-¿Tiene algo que añadir señor Potter? Quizá quiere dar la clase, ya que parece saber tanto sobre el tema y no presta atención.

-No, nada- dijo con los labios apretados en una fina línea. 

-En realidad, las vimos bastante bien. No creo que a nadie se le olvidaran, hay otros contenidos más-

 -Señorita Granger, no recuerdo haber pedido su opinión.

En la clase Harry consiguió perder 5 puntos más por hablar con Matt cuando no tocaba. Aunque más que hablar lo único que conseguía era decir una palabra antes de que le llamaran la atención. A la cuarta le habían quitado los puntos. Como siempre, mostraba una clara preferencia por los Slytherin, quienes claramente si estaban manteniendo conversaciones fluidas y no vieron reducidos sus puntos. 

Harry ya había conseguido ganarse un par de miradas disconformes por haber pedido 15 puntos en menos de una clase. Incluso Ron le había pegado un pisotón cuando pensaba contestarle a Snape por quitarle esos cinco puntos. A Vodemort le divertía de sobremanera la situación, iba a tener que darle a su mortífago más crédito, no sabía a quien de los dos odiaba más el pequeño Potter: si a él o a su profesor.  

InfiltradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora