Fixing Your Heart ➳KookV

➳Capítulo 42

Después de todo lo que me había dicho Ari solo pude decirle la verdad porque no había dejado de insistir mientras que yo no sabía muy bien cómo asimilar todo, me fui mucho antes de lo normal y ese día en particular me hubiera gustado recorrer el escenario, las gradas y todo el lugar despidiéndome del Tour, pero solo me apetecía volver a casa tirarme en la cama y no volver a salir de ahí, comerme el bendito ramo de girasoles o sacarme la memoria por unos minutos, solo por unos minutos necesitaba un escape, un respiro y sabía que en casa probablemente tampoco lo encontraría, le envié un mensaje a Jimin avisando que me iría de ahí antes de lo acordado probablemente luego me atacaría de preguntas, pues si es extraño que no me fuera con él y más que saliera antes, no me veía capaz de seguir soportando revivir todo el día una y otra vez sabía que eso pasaría si me iba a casa porque habían sido muchas emociones por hoy, no podría soportar aún más.

Pude salir sano y salvo gracias a Ari que fingió ser mi pareja, por un momento pensé que sería mejor para mi estabilidad dejar el ramo en las oficinas de la compañía, pero no pude simplemente dejarlo, quise cortarme la mano cuando lo tome aun así para ser más convincente como pareja le pase por el momento el ramo de girasoles y no morir por colapso mental. Luego de estar a una distancia prudente de donde se había hecho el show me separe de Ari despidiéndome de ella y entre en la primera tienda que vi para comprar un paraguas todavía llevaba el pelo húmedo desde la ducha fría, no podía salir así de despreocupado, por el hecho que la lluvia iba y volvía, ya faltaba ponerme a caminar descalzo para pronto confirmar que me enfermaría, camine lo que más pude hasta que mis pies pidieron un descanso no sabía cómo después de un concierto me quedaban fuerzas cuando otras veces quedaba muertisímo, probablemente ya era muy tarde y a pesar que intente distraerme pasando por lugares bonitos para acortarme camino mi mente seguía jugando en mi contra, me resigne a no poder eliminar lo que había sucedido y acepte que caminar no iba a cambiar el hecho de que estaba en la madrugada sosteniendo un ramo de girasoles y con sus ojos haciendo presencia en mi memoria como un eco tortuoso, di un par de vueltas más hasta parar un taxi pues la lluvia ya estaba comenzando a caer.

Lo detuve cuando llegamos hasta el lago por alguna razón sentí necesario ir, pague con una extraña emoción en el pecho al dar un paso fuera, ¿podría este seguir siendo aún su paraíso terrenal? ¿Estaría tan atormentado como yo en este momento? ¿Por qué había ido en primer lugar? ¿Me tendrá rencor por no haber podido llegar aquel día? Nunca dejé de cuestionarme se me era inevitable pensar en que hubiera sucedido si yo no hubiera tenido ese accidente, si yo hubiera logrado llegar al aeropuerto ¿En qué situación me encontraría ahora mismo? ¿Por qué después de tantos años aparecía y de esta forma? Y porque yo sigo dándole más vueltas a eso, si tan solo nos hubiéramos mantenido lejos el uno del otro no me estaría cuestionando de esta forma, las cosas ya estaban hechas, las lágrimas ya habían caído hace mucho, nuestras vidas eran distintas ahora, ya no era un maldito adolescente.