Hard Luck Woman. | Paul Stanley.

Capítulo 9

El viaje a California había sido muy tranquilo. Al menos hasta ahora, pues se encontraban aterrizando y había un poco de turbulencias, pero para ser la primera vez de Vee en un avión, había ido bastante bien.

Tenía los ojos cerrados, puesto que se había asustado un poco. El chico estrella que ya comenzaba a acostumbrarse le miró, y posó su mano sobre su brazo.

-Todo está bien, Vee. No te alteres. -alentó con voz calmada. Gene que estaba en el asiento del frente los miró y volteó los ojos a Paul.

"¿Qué?" articuló el Starchild, a lo que Gene respondió con un "Veo lo que haces". Paul fijó su atención de nuevo en Vee que abrió lentamente un solo ojo.

-¿Ves? Sé que sientes que una parte de ti se queda allá arriba, pero estás completa. -aseguró divertido.

-Sí. -rió.

-¿Estás bien?

-Nunca había viajado en avión y ya sabes... Estoy un poco nerviosa. -confesó. -Pero supongo que este es un viaje de muchas "primeras veces", así que sí, estoy bien. Gracias.

Vee ofreció una sonrisa al cantante, le había parecido dulce que hubiera tenido el detalle de ver cómo estaba y pensando en eso giró el rostro para controlar el rubor de sus mejillas. Cuando al fin aterrizaron y tuvieron su equipaje de mano con ellos, los chicos se dispusieron a bajar.

Al salir del estacionamiento había dos autos esperándolos, en uno viajarían Ace, Peter y Paul. Gene y Vee irían en otro, junto a Bill. La chica había conocido al mánager después de abordar el avión, y le había agradado al instante. El hombre había sido muy amable con ella, además a Vee le divertía ver cómo se colmaba la paciencia con los cuatro músicos.

No tardaron mucho tiempo en llegar a su destino; los dos autos entraron en una zona un tanto lujosa y estacionaron frente a una casa muy bonita, al menos así le pareció a Vee, cuyas antiguas casas no entraban en la lista de las mejores en Nueva York.

-Oh, hogar, dulce hogar... Por los próximos dos meses. -agregó Peter a su frase inicial. Los chicos sonrieron.

-¿De verdad la conseguiste para nosotros? -cuestionó el demonio a Bill.

-Por supuesto, además tenemos una nueva integrante en el equipo. No la iba a llevar a una pocilga. -obvió, devolviendo la sonrisa que Vee ofreció.

Todos excepto Bill sacaron su equipaje, y después se encaminaron hacia la puerta de la residencia con Bill siguiéndolos.

-Las damas primero. -Paul se hizo a un lado para dejar a la chica pasar. La pelinegra agradeció y abrió la puerta.

-Wow. -fue lo primero que dijo al entrar. Sus grandes ojos recorrieron el interior del lugar.

Lo primero que se encontraban al entrar era una gran sala con sillones de piel, una televisión hizo que Ace festejara con un "¡Sí!". Hacia la izquierda había un espacio vacío y luego se encontraba una puerta. Luego vieron una gran barra que separaba la sala de la cocina, había una puerta en un lado de la barra por la parte del frente y otra en la pared del lado izquierdo que daban acceso a ella. Luego había un pasillo con cuatro puertas, y dos más se encontraban en el fondo enfrentadas, había una más que también estaba en el fondo, pero ésta de cara al pasillo.

-Bien, chicos. Esta es la sala, esa es la cocina y la puerta de la izquierda es una habitación para que ensayen, según Kenny la acústica es excelente. -explicó. -La puerta del fondo es un baño que tendrán que compartir...

-¿Qué? -se quejó Ace. -¿Sabes cuánto tardan Gene y Paul en arreglarse el cabello?

-Espero que no demasiado porque lo van a compartir. -sentenció con rapidez, Ace siempre lo interrumpía. -Y las otras puertas son habitaciones, por favor peleen por ellas después de que me vaya.