El nuevo Jefe - James Maslow

Capítulo dieciséis.

Mi hora del almuerzo había comenzado así que junte tres de los archivos encima de mi mesa y agarré mi bolso. Miré la puerta al pasar por enfrente y caminé apurada hacia el ascensor.

...

Sentada en frente del edificio con mi capuchino y mi brownie estaba leyendo el primer documento. Hablaban de los derechos y privilegios. Las ventajas... el precio ¿el precio?

Abrí el segundo documento y hablaba de lo mismo. El tercero también. Distintos precios. Mucha cantidad de dinero ¿Pero que quería vender? Mire el edificio. No podía ser, o si.

No ____, no debes sacar conclusiones.

Tiré el vaso vacío de mi capuchino y me comi lo que quedaba del brownie. Debía leer los otros para saber de que trataba. Cruce la calle y entre al edificio, Merith estaba con la mujer que antes había estado en el despacho de James. Parecía que le estaba gritando... no, no. Le estaba gritando.

- La próxima vez piensalo bien antes de si quiera pasar por delante de mi. Inservible

Camino con decisión hacia las puertas de entrada y se subió a una limusina que estaba esperandola.

- Eh conocido gente desagradable-dijo Merith- Pero ella supera a todas esas. James estaba buscándote.

Suspiré notoriamente.

- Marcarías mi tarjeta de entrada, por favor -ella asintió mientras me dirigía al ascensor-

Al llegar al piso de arriba vi a James esperándome sentado en mi escritorio. Camine rápidamente hacia él y apoyé los documentos en la mesa y mi bolso en el suelo.

-¿Dónde estaba? - preguntó mientras se daba la vuelta-

- Fui... No quiero sonar descortés, pero ¿Le importa acaso? -me senté en mi silla esperando sonar serena-

- Todo respecto a usted me importa. ¿Donde estaba? - él estaba intentando mantener el control-

- Solo me fui -estaba harta de que sea tan controlador-

Él asintió lentamente y se paró con movimientos calculados.

- No sé si le dije, pero este viernes vendrá conmigo a Francia.

- ¿Qué? -me pare de mi silla- El señor Charles nunca me llevó a ningún viaje, no entiendo porqué usted debe hacerlo.

-En primer lugar usted es mi secretaria, debe acompañarme a cualquier reunión. Y en segundo lugar el señor Charles nunca la llevo para que nadie piense que se aprovechaba de la pequeña e inocente secretaria -estaba inclinado muy cerca de mi- En cambio a mi, me podría importar menos lo que piense la gente. Así que empaque ropa, el viernes nos vamos.

Él camino decidido a su despacho y yo suspiré con frustración. Mis planes de mantenerme alejada de él estaban arruinados.

...

Espero y me disculpen por no subir capítulos, pero es que no sabía si les iban a gustar. Me falta inspiración y los hice medio medio.

Voten porfis!!

xoxo