32

3.9K 313 25
                                    


Hoy hay luna llena, estoy en el balcón de la habitación del hotel en el que estamos observando lo hermosa que se ve hoy. Brilla y me siento esperanzada, como si su brillo me diera los abrazos, o el cariño que necesitaba antes. O tal vez, sigo necesitando, pero no importa. No espero que alguien me lo brinde, así que mi consuelo eterno será el brillo de la luna. La luz en mi oscuridad.

—¿Camz? —escucho a mi compañera abrir la puerta y entrar a mi escondite—. ¿Podemos hablar? —supongo que sé porque me pregunta eso. Ya que me he dedicado a ignorar a las personas que no son importantes en mi vida ahora. Osea, todas—. Por favor...

Mis ojos se despegan de la luna para observar los ojos verdes de Lauren, tenía algunos días que no los observaba, y tal vez es por eso que me parecen hermosos.

—¿Qué?

Ella hace una mueca—. No tengo idea de qué te pasó, pero por favor... Vuelve a ser tú.

—Estoy siendo yo.

Aparta la mirada hacia la luna, luego suspira pesadamente—. Haces que crea que Dinah tiene razón.

—Oh, ella dijo que te diría quién soy en realidad, sólo que creí que no sería tan pronto. Una lastima.

Muerde su labio—. Hace mucho tiempo confiaba en ella, pero si tengo que elegir en quién confío más, te elegiría a ti —susurra. Mi vista vuelve a la luna.

—Lo lamento, Lauren, pero no puedo decir lo mismo de ti. —se acerca más, pero sigo dándole la espalda.

—¿Por... qué? —si tuviera que ponerle un sentimiento a su voz, sería decepción.

—No confío en nadie. —una nube tapa la luna por unos segundos, trago saliva—. No es tu culpa.

—¿Cómo pudiste cambiar tan drásticamente en unos días? —pregunta.

Nadie cambia tan rápido, Camila, yo aún vivo en ti.

Suspiro mientras ruedo los ojos, yo soy una persona nueva. Volví a nacer.

—No cambié, tal vez siempre fui así, sólo que ahora por fin estoy libre. —no sé porqué, pero Lauren se coloca a mi lado, y por alguna otra razón, no la aparto cuando coloca su brazo sobre mis hombros y me acerca a ella.

—No es cierto, no eres real. —abro mis ojos en exceso, pero ella no puede verme porque se convirtió en un abrazo normal, en el que yo no participo—. Mi Camz, me abrazaría si le dijera que estoy triste. Me alegraría la vida, o nos iríamos a beber juntas.

—Lauren, basta, suéltame —pido, pero siento como niega—. No me interesa lo que haría, ya no lo haré.

—¿Por qué, Camila? ¿Puedes terminar con todo lo que construimos tan pronto? ¿No fue importante para ti? —me separo por completo de ella. La observo.

—No, lo último que me dijiste acerca de esto es que no había sido real, ¿No? Entonces, ¿Por qué algo falso tendría que importarme? —sus ojos se llenan de agua—. No entiendo, tú misma lo dijiste, Lauren.

Cierra los ojos con fuerza—. Era mentira, todo fue real.

Suelto una carcajada seca—. No, ya no me interesa, y no vas a cambiar eso con una simple palabra.

Una lágrima resbala por su mejilla, puedo apostar a que está fría—. ¿Qué te interesa entonces?

Parpadeo rápidamente, aparto la mirada y observo la luna—. Venganza. O más bien, justicia. —vuelvo a verla—. Esto —nos señalo—, ya no entra en mis planes.

Una de sus manos va hasta mi mejilla, la acaricia con tranquilidad—. Unas palabras no pueden cambiarlo, pero, ¿y esto? —sin más, junta nuestros labios. Me tenso inmediatamente, pero cuando empieza a moverse, me relajo un poco. Es la primera vez que nos besamos sin cámaras grabando, me cuesta pensar, no lo correspondo, es como lo había imaginado antes, es como el primero, pero no estoy decepcionada—. ¿Ya entré a tus planes?

Fake Love | CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora