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Me observo una vez más en el espejo del sanitario, mis ojos están un poco rojos, pero me veo normal fuera de eso.

Lauren aún no aparece y aunque la conversación con Dinah terminó hace varios minutos, no puedo decir que me siento mejor.

Suspiro y me acerco hasta la puerta, intento abrirla y me llevo la sorpresa de que alguien la cerró por fuera. Y lamentablemente sólo puedo pensar en Dinah.

—¡Gracias, Dinah! —grito pese a que sé que no va a escucharme—. Increíble, el vuelo sale en veinte minutos.

Analizo mi alrededor con la esperanza de encontrar algo que me ayude a abrir la puerta y salir, pero al no ver nada útil, me dispongo a intentar abrir la puerta de nuevo, fallando una y otra vez.

Comienzo a tocar fuertemente ya que alguien debe estar pasando o alguien debe tener ganas de entrar, ¿no? Golpeo e incluso pateo la puerta, pero parece que nadie está pasando.

—¡Mierda! —no suelo maldecir pero se siente tan bien en ocasiones como estas.

Tampoco me doy por vencida tan rápido, pero me siento cansada emocionalmente que me permito tirarme al piso a llorar, de nuevo.

¿Por qué Normani pondría en mi contra a mi mejor amiga? ¿Y por qué a mi mejor amiga se le olvidaría nuestra amistad tan pronto? ¿No le importé realmente? ¿Es mi culpa?

Mis lágrimas parecen hacerme recordar algo de lo que me dijo Lauren.

"Cuando dejamos de sentirnos bien, debería dejar de importar."

Lo único que me debe importar es Lauren.

Me vuelvo a levantar y golpeo aún más fuerte a la pobre puerta, porque ella no tiene la culpa de nada, así que lo lamento por tener que lastimarla sin razón pero, demonios, tengo que salir de aquí en menos de diez minutos para alcanzar a abordar.

—¡Alguien! ¡Ayuda! ¡Me quedé encerrada! ¡Abran la puerta, por favor! —probablemente alguien debe de estar buscándome al notar mi ausencia, después de todo estoy en una girlband relativamente famosa—. ¡Por favor! ¡Ayuda! ¡Mi vuelo está por despegar! ¡Tengo que salir! —mis golpes a la puerta se hacen más intensos—. ¡Lauren!

Escucho el seguro ser removido y por inercia doy algunos pasos hacia atrás.

—No soy Lauren, pero te conseguí a alguien que te sacó de aquí, ¿qué opinas? —una chica de cabello castaño y ojos entre verdes y azules creo, aparece frente a mí, tiene una sonrisa hermosa y natural, definitivamente es una chica hermosa—. Gracias, y perdón por molestarla —le agradece a la señora del aseo antes de que se vaya y quite el anuncio de 'fuera de servicio', el cual observa con curiosidad, pero igualmente se va—. ¿Eres Camila Cabello?

—Oh, uhm, s-sí —susurro—. Gracias por ayudarme.

—Soy Taylor —informa—. Taylor Hill. —asiento y sonrío, ella me imita—. Perdón que lo pregunte, pero, ¿estabas llorando?

—¿Se nota mucho? —asiente—. No le comentes a nadie, por favor.

—No lo haré —afirma—. Pero no me agrada la idea de que mi ídola estuviera llorando en el baño, nadie es digno de tus lágrimas —dice mientras hace un puchero adorable y frunce el ceño.

—Hermosa…

Suelta una carcajada y me sonrojo al notar que lo dije y no lo pensé—. Gracias, pero tú me pareces más hermosa aún.

Paso una mano por mi cabello y recuerdo que debo irme—. Gracias de nuevo, pero mi vuelo está por salir y-

—Entiendo, no te preocupes. —se hace a un lado para que pueda salir y cuando paso a su lado, percibo su delicioso perfume, sin embargo, unos ojos verdes más hermosos llegan a mi mente y me apresuro a llegar a mi vuelo.

Abordo justo en el límite y cuando entro a la primera clase me llevo una sorpresa y a la vez un dolor al ver a Lauren sonriente y sonrojada al lado de Dinah.

Fake Love | CamrenOnde as histórias ganham vida. Descobre agora