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El frío se cuela entre mis piernas una vez salimos de la casa, y por instinto me abrazo a mi misma. Una vez nos parece suficientemente lejos de la multitud, nos detenemos y Lauren me mira a los ojos.

—¿Entonces? —pregunto—. ¿Dinah no sabe de eso?

Coloca una de sus manos en su cabello y lo aparta de su cara—. No.

Suspiro—. ¿Esperas que le mienta a mi mejor amiga?

—No, yo le diré… pero, aún no estoy lista, sólo dame tiempo —pide. Trago saliva. Si algo he aprendido en las novelas, es que es mejor decir las cosas en la primera oportunidad, porque siempre que el protagonista no lo hace, y la persona a la que se lo están ocultando lo descubre por su cuenta, se pelean gravemente por la falta de confianza y yo amo demasiado a Dinah como para perderla por una estupidez de Lauren.

Por más que la chica me guste, primero es mi mejor amiga. Además, es mi deber decirle, ¿no?

—No lo sé, Lauren, no creo que deba ocultarle algo así a mi mejor amiga —comienzo—. Se supone que debo decirle…

—Es un asunto de pareja. Deja de ser tu deber. —aparta su mirada como si no estuviera segura de eso—. Haría lo que quisieras. Te trataría bien...

Niego con la cabeza—. No se trata de que lo hagas para silenciarme. —me observa—. Si no le dices esta noche, le diré mañana. —asiento y me doy la vuelta para irme.

—No me puedes poner un límite. —toma mi brazo.

—Me estoy poniendo un límite a mí —susurro—. Vámonos, no quiero seguir aquí.

—Espera... —dice—. No podemos... estar peleando todo el tiempo. —volteo para encontrarme con sus ojos, incrédula—. Simón dijo que debíamos hacer de camren algo, uh, adorable —susurra—. Han pasado como dos semanas y la gente sólo cree que hacemos esto por publicidad...

Elevo una ceja—. Sólo hacemos esto por publicidad.

Entrecierra sus ojos y gruñe—. Mierda, Camila, yo estoy intentando hacer las pases contigo y tú no dejas de ser tan- —guarda silencio y junto mis cejas.

—Casualmente quieres llevarte bien conmigo ahora que sé que engañaste a Dinah. —tenso la mandíbula, creo que tenía a Lauren en un aspecto más alto del que al parecer es—. ¿Todo siempre se trata de ti haciendo cosas por tu propio beneficio?

Eso parece afectarla, así que me siento un poco mal, porque no me gusta insultar a las personas, pero esta vez, lo dejo pasar.

—No, ¿qué? Yo sólo pensaba en que debíamos hacer las pases. No tiene nada que ver con eso. Fuiste muy clara con tu decisión, la respeto. —sus ojos parecen sinceros, pero no estoy segura de que lo sean, tomando en cuenta que casi no hablo o paso tiempo con la chica—. Creí que era un buen momento para sacar el tema, pero, mierda, siempre soy inoportuna como cuando le pedí a tu amiga ser mi novia —declara sonriendo para sí—. Le diré a Dinah, no considero que sea buena idea que tú se lo digas.

Desvío la mirada ante su sonrisa y me doy la vuelta para irme de una vez. Siento la mano de Lauren en mi cintura y me regaño internamente por disfrutar el contacto.

—Aléjate de mí.

—Hay cámaras en la entrada, y ante ellas somos novias, ¿recuerdas? —explica sin ánimos y me remuevo incómoda—. Eres mala actuando. Espera a que se te quite el mal humor.

Nos detenemos—. Oh, y tú eres la mejor actriz, ¿no?

Se encoge de hombros—. Algunas personas creen en camren gracias a mí. Tú siempre pareces odiarme.

Parpadeo—. Tú también me odias.

—Pero sé disimular y estoy haciendo el intento de que me agrades, o al menos te soporte. Por eso te dije de las pases —asegura en tono neutro.

Me parece estúpido alegar con ella sobre el hecho de que yo también lo intento, por lo que tomo su mano y nos conduzco a la entrada. No creo que camren funcione.

Fake Love | CamrenWhere stories live. Discover now