Con un vestido color crudo de encaje floreado, que le llegaba dos dedos arriba de la rodilla, con un cuello de camisa abierto un poco los tres botones del cuello, un lazo negro debajo del busto con una delicada flor a composé con el vestido, zapatos de tacón negros con un margen del mismo color del vestido, una cartera que simulaban las teclas de un piano a composé, joyería de diamantes (heredado de su madre) anillo, brasalete y collar, mientras que su cabello estaba en un típico peinado de las cincuenta, lacio, y un movimiento ondulado en la punta del pelo. El maquillaje era delicado, cálido y una gran linea negra por arriba de los ojos, clásico de la época.
—No me veo tan mal. —comentó, fijando su vista en el espejo de su casa. Y mientras hacía esto, un mensaje de su teléfono la sacó de sus pensamientos. Era de Louis, el cual, estaba esperándola abajo. Ella, tomó su cartera, el teléfono lo metió allí dentro y bajó a toda prisa.
—Tu es belle. (Estás hermosa).
—Merci. Vous avez l'air beau. (Gracias, tu te ves muy apuesto).
—Merci. Allons-y. (Gracias. Vamos). —Coemtó este, tomando de la mano a la muchacha, mientras subían en el auto de aquel adinerado muchacho.
El baile se dió en el gimnacio, el cual estaba decorado con globos, serpentinas, luces, telas y demás elementos decorativos que si no conocieras la escuela, no sospecharías que es el área de deporte. Todos los alumnos estaban con el look de los cincuenta (año de la creación del Rock and Roll), mientras Chuck Berry sonaba de fondo, haciendo bailar y moverse al ritmo de la música a toda la población estudiantil.
Louis y Charlotte comenzaron a bailar sumamente divertidos, como antaño lo hacían, y allí Charlotte se sorprendió de lo mucho que extrañaba la compañía de Louis, que él en su vida, era sumamente importante, aunque claro, ya no sentía esas chispas, esas mariposas colándose en su estómago para matarla de los nervios como cuando tenía quince años. Ahora, era el simple hecho de el disfrute de su compañía, la cual, le parecía simplemente maravillosa. Su cabello castaño, sus ojos cielo, su sonrisa centellante y ese caracter felíz y divertido que siempre lo envuelve.
Ahora, sonaba Long Tall Sally, de Little Richard, mientras que las miradas de todos se desconcentraban del baile, y se posaban en la puerta de entrada, donde las muchachas, soltaban a sus parejas y salían corriendo a la puerta y allí, Charlotte pudo observar a Liam, Niall, Zayn y Harry vestidos con trajes verde musgo (Zayn), negro, (Niall y Liam) y un traje azul marino (Harry). Mientras todas las muchachas del Westminster School, practicamente les rogaban que bailaran con ellas.
— Sont-ils vos amis? (¿Son ellos tus amigos?)
—Oui. (Sí). —contesta, mientras posa la mirada sobre estos, los cuales, estaban como cuatro modelos de Armani o Givenchi. Los cuatro se acercaron a la pareja francesa, mientras esta, saludaba a cada uno (incluyendo, a su pesar, a Harry).
—Je vais aller prendre quelques verres. Ne vous en voulez un? (Voy a buscar algo de beber. ¿Quieres algo?)
—Oui, s'il vous plaît. Tout ce que vous voulez. (Si, por favor. Lo que quieras). —le contesta esta, mientras el castaño le sonrié a los chicos y se va a buscar la bebida.
— ¿Dónde fue? —pregunta Niall, ya que no entiende una palabra de lo que el francés dijo.
—Se fue a buscar algo para beber. —contesta Liam, que es el único del grupo que habla el idioma.
—Permiso. —suelta Harry, retirándose del lugar y llendo hacia la zona de las bebidas. Se colocó en la barra y le pidió al barman un jugo de frutas, ya que al estar en la escuela, el alcohol estaba prohibido, para su desgracia.
— ¿Qué quieres con Charlotte? —preguntó una voz calma, dulce y con una pronunciación extraña. Harry, se gira para ver a Louis, el cual, lo observa detenidamente.
