Blanco. | Golxy |

Capítulo 4.

Este cap no me gusta!! >n< lo escribí miles de veces pero nada me conforma. Espero que a ustedes sí.

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Efectivamente era una carta, o bueno, decirle "carta" es mucho. Es sólo un trozo de papel. Lo agarré. En tinta negra, estaba escrito lo siguiente:

"Sé que esto suena muy raro porque ni siquiera me hablas pero disculpa que no me haya acercado a animarte por lo que sea que te hayas sentido mal, no soy muy buen- animando a la gente y no me quería arriesgar. Espero que estés mejor. (Por cierto, si no es mucho problema ¿puedes confirmar o denegar que te sientes mejor por medio de este papel? Mi habitación es la número 122. Claro, si no es molestia)"

Sonreí ligeramente sin saber el motivo específico al leerla, cosa extraña porque estoy destrozado por dentro. No sé, me dio ternura el hecho de que alguien anónimo se preocupe por mí, ni siquiera reveló su género. Le responderé más tarde.

Estuve relativamente "bien" hasta que me topé con Bonnie. Al verlo, tan sólo podía visualizar en mi mente espejos rotos, como si de una representación de mi corazón se tratase. Las lágrimas amenazaron con salir de nuevo, pero por suerte me contuve.

No me di cuenta que me quedé mirándolo hasta que empezó a sacudirme.

— Golden, otra vez te quedaste tildado. Te saludé y tú sólo te quedaste mirándome —dijo.

— ¿Eh? L-lo siento... ya sabes que antes de tomar el desayuno parezco un zombi —solté una suave risa nerviosa, esto me sucede seguido así que no es sospechoso para él en lo absoluto.

Fuimos hacia el comedor y a la segunda persona que me encuentro es... Lily, esperando a Bonnie. No quise sentarme a su lado esta vez, si escucho algo que me lastime de nuevo no aguantaré, me verán llorar y me mandarán a la hoguera, el horno, lo que sea, me quemarán.

Luego de obtener mi comida (la cual constaba de cereal, galletitas y té), me fui a sentar en el primer lugar que encontré, el cual era al lado de un chico pelirrojo. Es extraño, porque siempre estoy con Bonnie, más no creo que lo note. Siempre está demasiado entusiasmado hablando con la de lentes que no me presta atención.

Noté que todos murmuraban sobre algo ¿me pregunto sobre qué? Esta vez traté de no escuchar, sólo por las dudas. Sin embargo, se me fue imposible cuando una albina me pidió que me moviera de donde estaba para sentarse al lado del pelirrojo. Qué bueno que igual quedaba lugar, sino tendría que haber buscado otro y sería algo vergonzoso.

— ¿Te enteraste que llamaron a los padres de Fede y Félix? ¿Y qué les aplicaron una sanción? Además ya no les van a permitir estar más juntos. Ambos estaban en la división "A" y ahora mandaron a Félix a la "B" —escuché... así que de eso hablan todos. Además ¿con qué Lily les avisó a los directores del colegio?—. Qué triste, con lo mucho que se aman. No entiendo por qué su Dios prohíbe la homosexualidad si supuestamente dice "ámense los unos a los otros". Es como si prefiriera que se maten entre ellos si son dos del mismo género. Me pregunto quién los habrá delatado.

— Sí, es una pena... —contestó él— Ojalá la delatora o el delator le descubran haciendo algo peor... o bueno, malo, ya que lo que ellos hacían no era malo y le castiguen.

Tenía ganas de meterme en la conversación y decirles quién fue, pero algo me decía que no lo haga, que no debería, ya que su amor está mal y ella no hizo más que lo correcto... ¿desde cuándo tengo esta clase de pensamientos? Creo que las palabras del pelimorado junto con las de mi prima me afectaron... o tal vez simplemente estoy descubriendo la verdad.