Me salvaste. [Terminada]

60. ¡Buenas tardes alegría!

Narra Isabel-

Los días habían transcurrido de la mejor manera. Esperaba los horarios de visita demasiado ansiosa. Todo iba bien, mi tratamiento iba avanzando y yo me sentía mejor tanto física como emocionalmente.

Aquella tarde recibí la visita de Mayte. Estaba increíblemente hermosa, su pancita crecía cada vez más. Su sonrisa no se borraba de su rostro.

Isabel: hola hermanita. -dije con una sonrisa y la abracé-

Mayte: ¡hola mi Ila! -dijo sonriente- ¿Cómo estás?

Isabel: bien ¿Y tú?

Mayte: muy bien. Esperando la llegada de la niña. -sonreímos-

Isabel: ¿Es muy inquieta?

Mayte: ¡Demasiado! -reímos- pero ya nos acostumbramos.

Isabel: qué lindo, me alegra tanto por ti. -tome su mano- ¿Cuanto tiempo te queda?

Mayte: dos meses más.

Isabel: veras que se te pasarán rápido

Mayte: ojalá, ya quiero verla. ¿Y tú? ¿Cómo estás?

Isabel: bien, me siento mucho mejor. Los médicos dicen que hay un gran avance.

Mayte: que bueno hermanita. ¿Y el alta cuando lo obtendrás?

Isabel: los médicos dicen que por más que esté bien es necesario hacer los seis meses de tratamiento aquí así que en unos tres meses podré salir.

Mayte: veras que se pasará rápido hermanita. No pierdas la fe.

Isabel: te lo prometo. -sonreí-

Mayte: estoy muy orgullosa de ti.

Isabel: te amo tanto. -la abrace y mis lágrimas comenzaron a caer-

Mayte: y yo a ti mi Ila.

Nos miramos y reímos ante tanta sensibilidad. Seguimos charlando hasta que sacó un sobre de madera de su cartera.

Isabel: ¿Una nueva ecografía? -sonreí-

Mayte: así es. -sonrió y me la entregó-

La abrí demasiado ansiosa y observé aquella ecografía por completo, eran hermosas las sensaciones que recorrían por mi cuerpo en aquel instante. Mi hermanita menor iba a ser mamá dentro de muy poco y mi ahijada iba creciendo de lo más bien dentro suyo.

Isabel: no puedo creerlo. -dije y la mire-

Mayte: yo menos pero estoy tan feliz.

Isabel: se nota hermana y me alegra tanto.

Mayte: falta algo más que veas.

Isabel: ¿Qué cosa?

Mayte: fíjate dentro del sobre.

Volví a mirar dentro de el y observé otro sobre de papel más pequeño. Lo saque y el mismo llevaba escrito “Isabel” nada más que eso.

Mayte: léelo cuando estés sola y tranquila ¿Si?

Isabel: así lo haré. -la abrace nuevamente-

Ese abrazo fue interrumpido por Camila.

Camila: lamento molestarlas.

Isabel: ¿Qué pasó Cami? -dije y con Mayte la miramos-

Camila: cerca del lago las están esperando Fernanda.

Isabel: ¿Enserio? -preguntamos con May al unísono y Camila asintió- gracias por avisarnos Cami.

Camila: nada que agradecer, con permiso. -se retiró-

Nos miramos con mi hermana y sonreímos. Nos levantamos y caminamos hasta la orilla del lago donde Fernanda nos esperaba con su sonrisa tan característica.

Fernanda: ¡Buenas tardes alegría! -dijo con su brillo en sus ojos y su sonrisa tan bella-

No dijimos nada tan solo la abrazamos. Entendí en aquel momento cual importante eran aquellas dos personas en mi vida. Entendí el verdadero significado de unión y amor verdadero. Entendí que no había nada mejor que la compañía de mis hermanas.

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¡Espero que les guste! ❤