49. Tres semanas.

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-Cuenta Isabel-

"Día 21.

Es increíble el paso del tiempo. Los días se han pasado rápido a pesar de que yo creía lo contrario.

Mi cuerpo ha reaccionado bastante bien al tratamiento y de verdad que la visita de mis papás me ayudó a tomar esta decisión de seguir adelante. Y aún más me motiva la idea de saber que dentro de algunos meses podré conocer a mi ahijada.

Si, ni yo puedo creer estar escribiendo que seré la madrina de la bebé de May. Aún tengo la foto de la ecografía en mi mano y mi corazón se infla de alegría.

Tenía hermosos motivos para luchar... Mis padres, mis hermanos, Mayte, José Manuel, Lisa, Fernanda y mi futura ahijada. No había nada más lindo para mí saber que podía contar con aquellas personas.

Aunque la opresión que siento en el pecho no puedo calmarla. Presiento que algo le pasa a José Manuel y tengo que descubrirlo. No soportaría saber que algo le pasa y yo no puedo hacer nada.
Espero el día de mañana con ansias, estoy segura que vendrá y que me llenara de besos y abrazos. Aquellos que tanto necesito, aquellos que no quiero perder nunca."

Mis ojos estaban llenos de lágrimas. A decir verdad aquella opresión en el pecho no me dejaba respirar... Camine con mis cosas en la mano y me dirigí a mi habitación. Una vez que dejé todo allí fui en busca de Camila.

Camila: ¿Qué pasa Isa? ¿Te sientes bien?
Isabel: la verdad es que no. ¿Podríamos hablar un momento? La verdad es que necesito descargar y no encuentro otra mejor persona que vos para esto.
Camila: dale... ¿A dónde quieres? ¿En tu habitación?
Isabel: donde sea pero que estemos las dos solas.
Camila: Ven conmigo.

Tomó mi mano y me llevo hasta el patio donde comenzamos a caminar. El aire chocaba contra nuestros rostros.

Camila: decime que anda pasándote Isa.
Isabel: me siento rara. -suspire- siento una opresión en el pecho que no me deja respirar.
Camila: ¿Pasó algo con Micaela? ¿Te peleaste con algún familiar?
Isabel: No, pero siento que algo le pasa a José Manuel. Hace días que lo noto raro.
Camila: yo hablé con Él después de la visita que te hizo en tu habitación.
Isabel: ¿Enserio? -asintió- ¿Y qué te dijo?
Camila: me contó lo que sucedió con su hermana menor hace unos años.
Isabel: fui una idiota -agache mi mirada- fue algo que le prometí y yo... Yo no lo pude cumplir.
Camila: no digas eso Isa. De verdad. Si yo hablé con Él fue porque note que había algo que escondía y que necesitaba sacar. A ver... La familia juega mucho en este tratamiento. Y si de verdad José Manuel quiere ayudarte es importante que Él sea fuerte.
Isabel: Tengo miedo de no poder con esto Cami. -suspire-
Camila: no digas eso. Vas a poder, es increíble la mejoría que estás teniendo. -sonrió-
Isabel: te debo un gracias gigante.
Camila: lo hago porque te aprecio mucho Isa. Aprendí a quererte en este tiempo.
Isabel: ¡Y yo a ti! -sonreí- ¿Puedo pedirte un favor?
Camila: dime. -me miro-
Isabel: necesitaría si no puedes conseguirme una computadora para grabarle una sorpresa a mi novio. ¡Por favor!
Camila: mmmm bueno podría prestarte una notebook de la clínica. -sonrió-
Isabel: y un DVD virgen también. -sonreí-
Camila: está bien, en un ratito te llevo todo a tu habitación, mientras tanto tú avanza con los preparativos para la sorpresa.
Isabel: ¡Así será! ¡Muchas gracias Cami! ¡Eres la mejor! -la abrace-

Me salvaste. [Terminada]Where stories live. Discover now