Capítulo III

3.6K 183 3
                                    

Otro día más de tratar de no morir en clases, encontrar comida decente y seguir enamorando a Sergio.

--Vengo por ti en la salida -Jaden tiene entrenamiento toda la mañana porque tiene un partido muy importante para el fin de semana.

--Puedo llegar a casa, no te preocupes tanto hermano mayor -le doy un beso en su mejilla

--Eres mi responsabilidad, además eres demasiado adorable. -aprieta mis mejillas a pesar de que sabe que odio que haga eso.

Mi hermano era lo más similar a un mejor amigo.
Le podía contar todo sin preocuparme de que me juzgará, él sabia de Dylan y cada vez que alguien me ofendia por eso, Jaden salia en mi defensa.

--Te veo al rato Jay -él rueda los ojos ante mi apodo, bajo del auto sintiendo una mirada.

Mis ojos viajan buscando al responsable y de nuevo me encuentro con esos profundos ojos oscuros.

Llego a hasta la entrada esperando que Sergio no se interponga en mi camino y que mi hermano ya haya arrancado su auto.

--¿Ahora Jaden? -Pregunta burlón Sergio mientras apaga su cigarro.
¿Cigarro a las 8 de la mañana?

Si había algo que odiaba era el olor al cigarro.

--¿Celoso? -cuestiono enarcando una ceja, él ríe sin despegar su vista de mi.

--Para nada, no tengo que sentir celos porque una vez que me tengas no me dejarás ir y vas a querer ser la única. -Si claro, le doy una mirada de diversión.

--No seas tan arrogante, guapo -palmeo su pecho y paso a su lado, entrando al instituto.

Tuve que pasar sola el almuerzo ya que Jaden (con quien desayuno siempre) no estaba, y su novia estaba pegada a su amiga Ross. Novia de Rees (quien si pudiera matarme con la mirada, yo ya estaría 4 metros bajo tierra)

No entendía las inseguridades de Ross, no era hermosa pero tenía lo suyo.

Y lo más importante: ella y Rees habían tenido la cliché historia de la nerd que logra enamorar al chico popular.

Mi día había pasado aburrido hasta que veo el auto de Jaden estacionado en el estacionamiento. Comienzo a caminar más a prisa.

Al llegar al lado de Jaden saludo animadamente a Natalia quien me da un saludo sonriendo.

Después saludo a mí hermano.
A lo lejos veo a Sergio observando seriamente a su hermana, sonrió con malicia hacia él.

Cuando sus ojos se posan en mí aprieta sus puños a su costado y desaparece de mi vista.

Nos subimos al auto de Jaden.
Primero dejamos a Natalia en su casa y luego nos dirigimos a comprar comida para nosotros dos.
Siento mi celular sonar.

DE: ROGGERS El SEXY -¿en serio así se había registrado?
Estás metiendote de más, Nicole.

Leo de nuevo el mensaje sin entender a que se refiere claramente.
Decido ignorar el mensaje.

DE: ROGGERS EL SEXY
Debes saber que mi hermana va primero que nada, te quiero lejos de Jaden. -Suelto una carcajada de pensar que Sergio cree que voy a arruinar la relación de Nat.

PARA: ROGGERS EL SEXY
No seas idiota.

DE: ROGGERS EL SEXY
Hablo en serio. Metete con Rees o con Dylan. Con cualquier chico, menos Jaden.

PARA: ROGGERS EL SEXY
¿Acaso son novios tu hermana y Jaden?

DE: ROGGERS EL SEXY
No y espero no lo sean. Pero sé que a mi hermana le gusta... Solo no fingas ser amiga de Nat y acostarte con su amor a escondidas.

PARA: ROGGERS EL SEXY
Tu nivel de idiotez me sorprende. Jaden es mi hermano. Zoquete.

DE: ROGGERS EL SEXY
¿Pretendes que te crea cuando no se parecen?

Era cierto, los que nos veían no creían que fuéramos hermanos, físicamente no nos parecemos. Pero todo el instituto sabia que éramos hermanos.
El popular y la zorra.
Malditas etiquetas. 

--¿A quien le escribes que sonríes? -Pregunta pícaro mi hermano
¿Yo estaba sonriendo?

--Con Sergio -respondo casual, mi hermano gira con rapidez su cabeza a mí.

--No creo que sea buena idea que te acerques a él -vuelve su vista al camino

--No pienses que me atrae o algo por el estilo, solo tengo unas cuantas cosas para él -digo inocente.

Jaden sabe lo que paso con Kensy, y si, mi hermano no tolera a Sergio debido a eso.

Mientras comíamos tranquilamente el timbre de la casa sonó.
Abrí esperando ver a mi ex novio, pero sorprendiendome al ver a Sergio.

--¿Lista para explicarme el tema más reciente de matemáticas? -Pregunta neutral, con las manos en las bolsas de sus jeans y una sonrisa de labios cerrados.

--No puedo hoy -respondo seria

--Yo no puedo el resto de la semana, así que será hoy.

--¡Nikky! -Un Dylan comienza a correr en mi dirección, escucharlo de nuevo llamarme así hace que mi corazón se apriete.

Ahora me daba cuenta que lo había extrañado.

--Vas a tener que cancelarle a Dylan -sonríe encogiendose de hombros, yo niego con la cabeza.

--Tengo que aprovechar la visita de Dylan, no sé cuando regrese. -Grito a mí hermano que ya regreso y camino hacia Dylan.

Llego a él, me mira sorprendido y con cierta ternura en sus ojos, sin pensarlo mucho me envuelve en un abrazo.

Como lo había extrañado.

--Hola bonita -me sonríe besando mi mejilla

--Hola -le sonrió de vuelta
Volteamos al sentir una presencia muy cerca de nosotros.

--Me voy, dejamos esto para después Nicole. Cuida a mí chica Dylan -lo apunta con el dedo y se sube a su auto.

--¿Su chica? -Pregunta Dylan enarcando una ceja

--No soy nada de él, solo le doy clases de matemáticas -explicó, Dylan parece comprender y asiente.

--Quiero pedirte disculpas, te ofendí sin escuchar tu explicación -agacha la cabeza apenado.

--Dylan, eso ya paso. Puedes irte tranquilo, todo bien entre nosotros. -Le sonrió sincera, sus ojos se iluminan y toma mis manos.

--Ya no voy a regresar a Canadá, regrese para quedarme y te quiero recuperar Nikky. -Sus palabras me dejan helada.

--¿Recuperarme? -Hago la pregunta más estúpida, él ríe

--Si, quiero recuperar lo que teníamos, porque ha sido lo mejor que me ha pasado. -De repente siento ganas de salir corriendo.

--No puedo, lo siento Dylan -realmente no sé de donde salen esas palabras, solo tengo la imagen de Kensy llorando y pronunciando el nombre de Sergio acompañado de miles de insultos.

--Lo sé, no te voy a presionar. Sé que te perdí, pero creeme cuando te digo que voy a luchar para recuperarte

--¿Por que? ¿Por que después de decirme hasta de lo que me iba a morir? -Me arrepiento de mis palabras al ver como la tristeza se refleja en su rostro.

--Porque soy impulsivo, hablo al momento de lo que siento y no pienso. Me dolió en el alma pensar que me engañabas, no porque fuera mi mejor amigo sino porque te amo intensamente, y que me dejes me hace perder la cabeza. -Wow.

¡Golpe bajo, preciosa! (En Edición) Where stories live. Discover now