✓ 𝗟𝗢𝗩𝗘 𝗠𝗔𝗭𝗘 ━━ glenn rhee

𝗢𝟰𝟳. la iglesia de gabriel

𝗢𝟰𝟳. la iglesia de gabriel

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—Come algo, por favor.—Glenn se colocó de cuclillas para mirar a Rachel, quien se encontraba de cuclillas al río llenando varias botellas de agua para el grupo en compañía de Tyreese y Carol, pero estos se encontraban del otro lado.—No has comido nada durante todo el día.

—Casi no queda nada para comer.—ella se giró para acariciar su mejilla levemente.—Estaré bien.

—Estás embarazada.

—Desde hace dos meses...y lo he sobrellevado bastante bien.—bromeó con una sonrisa.—No te preocupes por mi, ¿sí? debemos de buscar comida, y entonces cuando tengamos suficiente comeré suficiente.—Glenn suspiró.—Pero por ahora estaré bien comiendo lo suficiente para estar estable.—Rachel sonrió una vez más y besó la comisura de sus labios.

—Eugene tiene la cura.—ambos giraron a mirar al cientifico, quien se encontraba mirando como Rosita disparaba a un caminante que se acercaba.—Si logran llevarlo a Washington puede que todo vuelva a la normalidad...y, bueno, podremos ser una familia normal.—Glenn habló de una forma tan ilusionado, que Rachel sintió un pinchazo de felicidad e ilusión dentro de ella.

—Rachel.—ambos se giraron hacia Bob, quien amablemente y una leve sonrisa tendia una manzana en dirección a la pareja, la castaña resopló.

—No hace falta, Bob, comela tú.—él moreno negó.

—Deberías comer tú, el feto en las primeras semanas esta en crecimiento.

La castaña negó.—Esto le vendría bien a Suni, gracias Bob.—él negó con diversión y se alejó en dirección a Sasha.—Por cierto, ¿has visto a tu hija?

Ambos giraron la mirada en dirección a Suni, quien se encontraba hablando con Carl.

—¿Lizzie mató a Mika?—preguntó incrédulo el ojiazul.

—Eso me dijo de una forma muy discreta Tyreese, no soy estúpida para no entender que eso quiso decirme.—la asiática se quejó en un suspiro.—Sabía que tarde o temprano lo haría, Lizzie...no estaba bien.—negó.

—Lo supe desde la prisión.—él ojiazul dirigió su mirada de vuelta a la asiática.—Al menos...seguimos tú y yo en pie.—la asiática ladeó la cabeza.—De los niños que estaban en la prisión me refiero. Mientras yo te tenga a mi lado me sentiré más tranquilo.—Suni sonrió tras las palabras de Carl, no pudo evitar pensar en el beso que anteriormente se había daod con el ojiazul, por lo que muy sonrojada miró para otro lado.

—Lo sé, Carl....yo también pienso lo mismo.