𝗢𝟮𝗢. el ángel que volvió al cielo

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𝗢𝟮𝗢. el ángel que volvió al cielo

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La castaña bajó la mirada cuando hizo contacto visual con Rick, este se encontraba bastante afectado luego de los acontecimientos de la noche anterior, y Rachel pudo entenderlo ya que todos se encontraban de aquella manera, incluso la familia de Hershel que no conocían mucho a Dale, se encontraban afectados.

—Dale...podía ponerse en tu lugar, de seguro él puso en el mío.—la voz de Rick se entrecortó.—Porque él nunca tuvo miedo de decir lo que pensó, cómo se sentía. Esa clase de honestidad es rara y valiente, siempre que tenía que tomar una decisión. Miraba a Dale y él me miraba con esa mirada que tenía. Todos la hemos visto alguna vez, no siempre podía leerlo, pero él a nosotros sí. El veía a las personas por lo que eran. Él...sabía cosas acerca de nosotros la verdad, quienes realmente somos. Al final, él hablaba cerca sobre perder nuestra humanidad. Él decía que el grupo estaba separado. La mejor manera de honrarlo es mantenernos unidos, dejar de lado nuestras diferencias, y mantenernos juntos. Dejar de ser lastima por nosotros y tomar el control de nuestras vidas...nuestra seguridad, nuestro futuro. El grupo no está separado. Vamos a demostrarle que estaba equivocado. De ahora en adelante, le vamos hacer a su manera, así es como honraremos a Dale.—terminó de decir Rick con lágrimas bajando por sus ojos.

Rachel apretó más la mano de Glenn a su lado cuando sintió un apretón en su pecho.

La culpa que sentía en su pecho la castaña, y ella podía aceptar que todos incluido Rick se sentían de aquella manera, si no hubieran ido a matar a Randall, Dale no hubiese salido por haberse sentido culpable. 

Todos cogen un puñadito de arena y lo tiran en el montón de tierra que cubría el pecho muerto de Dale.

—Lamento por no haberme expresado, ni haberte defendido. Lo siento amigo.—susurra con dolor la de ojos marrones, sin agregar más, se aleja inmediato de allí.

Ella sabía que ahora él esta en el cielo, con su difunta mujer, con Jim y Jacqui, ella sabía que se cuidaran bien entre ellos y del grupo también.

La castaña debe coger ánimo, todos se sentían mal en aquel momento y Hershel les dejará ir a vivir a su casa. Aunque eran poquitos más de trece, estarían apretados un poco pero no les importaba con tal de que estén en un lugar seguro para todos.

Todos hacen su trabajo, mientras Hershel les da de comer a sus pocos caballos que le quedan. La castaña se sienta en el porche cansada de trabajar, mientras Suni se acerca con lentitud al niño del ojiazul.

—Carl..—le llama con la voz apagada, Carl se gira a mirarle con el ceño fruncido.—¿No me has perdonado todavía?—le preguntó ladeando la cabeza, Carl suspira.

—No.—la voz seca que proviene de él hace que Suni baje la mirada.

—No quise herir tus sentimientos, ¿podrías perdonarme?—pregunta con una mueca, Carl le mira unos segundos antes de ladear la cabeza.

—Bien. Te perdono, Sun-sun—Suni no puede evitar sonreír al escuchar las palabras del niño.—Pero para la próxima no me lo digas de esa manera, me puse triste.—espeta haciendo una mueca, ella se acerca hacia él.

—Prometo no volver a decírtelo de esa manera, ¿amigos?—alza su meñique con una pequeña sonrisa, Carl traga saliva antes de alzar su meñique.

—Amigos.—ambos sonríen, y se quedan mirando unos segundos antes de separarse.—Iré con mi papá.—informa. Suni lleva su mano hacia su pucho y ríe con inocencia cuando siente su corazón saltar con emoción. Carl le produce sentimientos que no sabía de que se trataban, pero a ella le gustaban.

—Suni, ¿si te confieso algo, no te molestarás tu conmigo?—el niño murmuró acercándose más a la pelinegra, ella ladeó la cabeza.

—Claro, no podría molestarme contigo, Carl.—el suspiró antes de sacar de su cinturilla una arma, la niña alzó ambas cejas de la impresión ya que no había visto una arma tan de cerca.—¿Por qué tienes eso?

—La tome de la moto de Daryl sin que nadie se diera cuenta, pero...fue por mi que Dale murió.—confesó haciendo una mueca, la niña tomó su mano aún confundida.

—¿De que hablas, Carl? 

—Yo...anoche vi que un caminante lo mordió.—Suni abrió su boca de la impresión, sintiendo una ola de tristeza golpear su cuerpo, ella sabía que él había muerto, pero no de esa manera.—Y fue mi culpa ya que yo atraje al caminante, estaba atascado en el lodo y empecé a lanzarle piedras, cuando le iba a disparar se liberó y yo escapé, por eso mató a Dale..—confesó con los ojos cristalizados, la niña jadeó ante la confesión.

—Debes decirle a mamá, Carl.

—No, no. Es un secreto, por favor.—el niño apretó su mano con tristeza, ella tragó saliva antes de asentir.—Promete que jamás le dirás a nadie.

Suni dejó escapar aire antes de hablar.—Lo prometo, Carl.

La castaña sigue secando su sudor con el viejo trapo que Glenn le había prestado hace un tiempo, sin embargo, poco después una presencia se sienta a su lado.

—¿Qué te sucede?.—pregunta Glenn a mi lado.

—Nada, solo que me siento cansada, es todo.—se encoge de hombros.

—Yo...sé que él definitivamente esta en un lugar mejor.—Rachel le miró.—Está mejor allá arriba que aquí abajo con los muertos. Créeme.—ella tragó saliva y asintió con lentitud.

Ella sabía que afín de cuentas Glenn tenía razón, pero no paraba de pensar que extrañaría sin duda alguna los chistes de Dale, su confianza y su gran amistad que le brindó.

—No te lo había dicho antes...pero te ves como un ángel con ese corte de pelo.—ella dejó salir una risa sin gracia debido a sus ánimos.

—Ya sé...—susurró tratando de sonreír, no solo decía aquella palabra por las palabras anteriores dichas por el asiático, si no por las palabras sobre los muertos.

Ella sabía que ellos estaban mejor allá arriba que aquí abajo. Glenn apoyó su brazo en su antebrazo y se acerca más.

—Ven aquí.—susurra atrayéndola a sus brazos.—Todo mejorará..—susurró sobre su  oreja, Rachel apretó más el agarre y solo se permitió cerrar los ojos.

—susurró sobre su  oreja, Rachel apretó más el agarre y solo se permitió cerrar los ojos

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✓ 𝗟𝗢𝗩𝗘 𝗠𝗔𝗭𝗘 ━━ glenn rheeWhere stories live. Discover now