17 💜 Primera cola.

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No es un simple sentimiento

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—Bien, ¿estás lista? —preguntó Karamatsu.

—Algo nerviosa —respondió, tapándose la boca para toser.

—No te preocupes, si algo pasa estaremos aquí —dijo un sonriente pero igual de nervioso Todomatsu.

—Gracias.

___ buscó un poco de apoyo en los ojos de Ichimatsu, que lo único que hacía era estar agachado en el piso, lejos del grupo, sin mirarlos ni un poco. Entristecida, respiró profundo y cerró los ojos, concentrándose todo lo que pudo en su vínculo con su subconsciente. La ___ original.

Los minutos pasaron en completo silencio, Osomatsu se estaba quedando dormido e Ichimatsu había empezado a jugar con Gin mientras que los otros hermanos permanecían atentos a lo que pudiera pasar.

De pronto, el cuerpo de ___ cayó hacia adelante, Karamatsu la tomó en el aire y la recostó en sus brazos boca arriba. Le tomó el rostro preocupado cuando Choromatsu y Todomatsu se acercaron a ver qué había pasado, fiebre no tenía y tampoco había perdido color.

A los segundos ___ pestañeó lentamente, logrando que el de verde suspirara en su puesto y el de rosa se lanzará de espaldas al piso, aliviado. Karamatsu la apoyó en sus brazos esperando a que tuviera mayor control de su cuerpo, tal vez se había dormido y por eso casi aterriza de cara en el suelo.

Con los ojos completamente abiertos se mantuvo sola mirando hacia todos lados, confundida. Pestañeó repetidas veces tratando de acostumbrar su vista a la luz del sol, abrió la boca para decir algo pero la voz parecía no salir. Se aferró temblorosa de los hombros de Karamatsu para poder levantarse, quien igual de caballeroso como siempre había sido, la ayudó a levantarse y la sostuvo unos segundos para que se acostumbrara a sus piernas, el de azul estaba definitivamente confundido.

Ya de pie buscó en la habitación a Ichimatsu, el cual no dejaba de mirarla desde su puesto. Dio un paso hacia él tratando de articular algo, sus músculos aún parecían estar dormidos. Apuntó al chico hecho un ovillo con lentitud y la confusión en su rostro pasó a ser molestia llegando al enojo.

—Tú... —balbuceó en una temblorosa postura.

Dio unos pasos desequilibrados hasta quedar de frente al chico, estiró su cuerpo y apretó las manos retomando mejor el control del cuerpo que sentía más pesado a la última vez.

—¡Nos debes una disculpa, desgraciado! —gritó propinándole un golpe en el rostro.

Todomatsu del susto se protegió detrás de Karamatsu. El estruendo despertó a Osomatsu que al ver la mitad de la escena sonrió divertido. Con una mano en la mejilla Ichimatsu endureció la mirada.

—¡¿Por qué mierda tengo que disculparme contigo?! —exclamó molesto.

—¡Solo hazlo! —gritó, sintiendo el extraño ardor en su garganta que provocaba su voz—, Tus malditos celos casi nos matan de frio ayer, responsabilízate por tus actos —teniendo las palabras de Ji-chan presentes en la cabeza, eso había sido lo único que se le ocurrió.

—¿Celoso?, ¿por ti? No me hagas reír —contraatacó el de morado con una sonrisa cínica, tratando de ocultar su nerviosismo.

—No tienes por qué enfadarte por eso ¡Kami-sama! ¡No nos gusta ninguno de tus hermanos! —exclamó apuntando a todos los chicos detrás de si—. Solo nos gustas tú.

Después de gritar esa muy grande revelación, le mantuvo unos segundos la mirada al de morado que aún estaba en el suelo, con los ojos abiertos como platos tratando de relacionar lo que había escuchado, había vuelto a seguir uno de sus impulsos. Pronto ___ volvió en sí dándose cuenta de lo que había dicho: ¿"Solo nos gustas tú"? ¿"Nos"? Su rostro se prendió en el rojo vivo y le temblaron las manos al igual que los labios, no le pudo sostener más la mirada y se giró dándole la espalda.

—... Que te quede claro —susurró de espaldas.

Observando toda esta escena tenemos, por un lado, las estatuas de piedra sonrojadas; por otro, a Karamatsu haciendo una pose extraña con misteriosos brillos mientras murmuraba algo en inglés y a Osomatsu rascándose la oreja con desinterés.

—Que aburrido, yo esperaba un poco más de acción —dijo este último mirando su dedo.

___ le dedicó una mirada furiosa, pero esta se fue tan rápido como llegó. Había seguido uno de sus impulsos de nuevo, y lo único que conseguía con eso era un castigo, tuvo miedo de que pasara después, y el aire de fortaleza que había dado por un momento cambio drásticamente, se sentía vulnerable.

—¿Por qué tantos gritos? —preguntó Matsuyo entrando por la puerta, la interrupción hizo saltar del susto a la chica, que no quería mirar a quien tenía en frente.

—¡Ah! Perdemos a Ichimatsu-niisan —gritó Todomatsu.

Se giraron a ver al nombrado que estaba pálido con el alma saliéndosele por la boca. Los menores fueron a auxiliarlo dando como resultado que Jyushimatsu corriera con él en brazos por todo el segundo piso siendo perseguido por Choromatsu que rogaba por la seguridad de ambos.

—¿Qué sucedió? —preguntó la madre a Osomatsu, sin notar todavía como la chica se encogía en su sitio.

—Ichimatsu sacó premio doble —contestó creyendo que ___ lo golpearía, valía la pena decirlo.

—Hablando de eso, ¿funcionó? —preguntó mirando confundida a su hijo mayor que le apuntó perezoso a la chica— ... ¿___-chan? —preguntó hacia ella.

Las 2 Colas Del Gato Perdido「Ichimatsu x Lectora」Where stories live. Discover now