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La noche había caído y ella no respondía llamadas o mensajes. Realmente se había pasado, se sentía culpable por esas marcas rojas que había dejado en los hombros a pesar de que ya deberían de haberse quitado porque no fueron muy fuertes.

Pero eso no lo redimía de ese error.

—Lady Silence. —Mencionó Freya, pero Elijah no la escuchó. —Calculan que tiene treinta y cinco años aproximadamente por la manera en que ataca.

—¿Una mujer está haciendo esto? —Preguntó Klaus incrédulo.

—No seas sexista. —Rodó los ojos la mayor de los Mikaelson.

—Debe ser bruja o algo, ninguna humana puede asesinar veinticinco seres sobrenaturales sin dejar marcas. —Discutió Klaus.

—Si dejó marcas. —Corrigió Freya. —Por lo menos en los vampiros, muy pequeña, como si una daga les hubiera atravesado el corazón. La bruja de Marcel tenía diferentes hierbas en el sistema cuando murió, eso inhabilita la magia en las brujas. Lo que aun no entiendo es como mata a los hombres lobo. —Freya suspiró y se sentó en uno de los sillones. —A algunos es violentamente, a otros es como si fuera un raspón.

—Una cazadora lista. —Finalmente Elijah salió de su trance y habló. —¿Cómo supiste todo esto?

—Un vampiro en el bar me lo contó. Estuvo en un pueblo cerca de Wichita Falls, no dejó nada, lo limpió de seres sobrenaturales en menos de un mes, por lo menos de vampiros. La llamaron Lady Silence porque no dejaba rastros: nunca supieron quién era.

—¿Cómo saben que es mujer? —Interrumpió Klaus.

—Salió en un vídeo de seguridad, tiene pechos.

—Si estaba en un vídeo cómo...

—Siempre usa mascara, es muy lista. —Interrumpió Freya.

—No lo dudo...

—Si me disculpan... —Se excusó Elijah levantándose de su silla. Había demasiadas cosas en su cabeza y no lograba concentrarse en la conversación. —Debo hacer algo importante. —Pensaba en ir a disculparse con Skylar, él nunca actuaba así y esperaba que ella lo entendiera.

Mientras salía del estudio de Klaus se topó con Rebekah, quien tenía un cuaderno repleto de dibujos en las manos; estaban bastante bien hechos y la rubia nunca tuvo ese don con el arte, por ende, sospechaba que alguien más los había realizado por ella.

—La moda es excelente, hermano. —Habló ella viendo sus bocetos, los dibujos en efecto obligó a alguien a hacerlos, pero los diseños eran suyos. —Elijah siguió de largo, con una misión en la cabeza cuando el teléfono de la rubia sonó y respondió. —¿Fiorella? ¿Qué pasa?

Elijah volvió junto a ella para escuchar; había mucha música del otro lado de la línea. —Bekah... Sky estaba de malas y... —Hipó, demostrando que estaba ebria y solo eran las nueve de la noche. —¿Puedes venir por Skylar...? Estamos en Misty Club.

Elijah se alteró al escuchar eso ¿Qué le pasaba a su... Novia?

¿Era su novia?

—¿Qué tiene? —Rebekah preguntó antes de que él lo hiciera. Dudaba que fuera algo demasiado serio, pero viendo a su hermano mayor supo que él ya estaba imaginando lo peor.

—Ella bebió como si fuera agua... La hierba y... —No podía hablar claramente, cada vez que formulaba una oración terminaba hipando o dando la ilusión de que se había quedado dormida.

—¡No! —Elijah y Rebekah reconocieron esa voz de inmediato: Sky. —¡¿Tú sabes que es internet?! —Hablaba demasiado extraño, muy lento y como si tuviera la lengua pegada al paladar.

Distraction {Elijah Mikaelson}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora