Lealtad Tatuada (R#4) [Lealtades #1]

64. Juega limpio, traidor

Caigo tras varios golpes y he de admitir que Adrik no ha perdido su estilo. Me levanto y doy un giro pegándole una patada.

Aleshka corre y le da un puñetazo a Nithael, pero este la esquiva y la da vuelta tirándola al suelo. En mi distracción el morocho me da un rodillazo y me agarro el estómago por el dolor.

—Te lo dije —se burla —si te distraen las piernas de una mujer, nunca lograrás nada —Vuelve a ponerse en posición.

Sonrío.

—¡Ja! Mira quién lo dice.

Se ríe.

—Eso es lo que crees tú, pero realmente no me conoces —Bloqueo su ataque cuando hace su siguiente movimiento.

—Puede ser, pero si fuera así, ya hubieras usado tu arma.

Levanta las manos.

—Me gusta jugar limpio.

Frunzo el ceño.

—¿Cómo puedes decir que estabas jugando limpio cuando es obvio que me traicionaste? —Le pego un puñetazo justo en la cara y me río —Auch, eso debió doler.

Se relame la sangre de su labio partido y luego sonríe.

—Yo no te traicione, te salve la vida. Iban a matarte, Aleksandr.

Entrecierro los ojos.

—¿De qué estás hablando?

—Porque no lo piensas un poco mejor, te darás cuenta de lo que te estoy diciendo —Hace una pausa al yo quedarme serio y completamente callado —quizás debería darte un recordatorio.

Saca de su bolsillo una carta y la tira al suelo. Me acerco con cautela y despacio la agarro, luego la abro para comenzar a leer aquello que me sorprende.

Vuelve a hablar.

—Robe eso de la oficina del director, es una orden directa para asesinarte. Si te fijas la fecha, es la misma del día que dices que te "traicione".