LA HIJA DE JEFFREY |Andrew Lincoln| TERMINADA

Capitulo 21.

—Contame algo de tu vida— le dijo al muchacho.—¿Que has hecho en estos últimos cinco años?— preguntó mientras le tendía el vaso con café que acababa de comprar.

La hija de Jeffrey había salido bien temprano de su casa, pues había quedado con Mark a las 10, iba a hacerle un "tour" por algunos lugares de la cuidad.

Luego de mostrarle algunos lugares - o a los que ella más concurría - decidieron ir a tomar un café y terminar de hablar allí.

—Soy modelo— contestó el.— Para algunas marcas de ropa, ya van casi tres años que trabajo de eso, y por esa razón nos mudamos aquí— bebió de su café.

—Recuerdo que siempre habías querido ser modelo, y los chicos te molestaban por eso, decían que eras homosexual, que locura— rió, pero Mark volvió serio su rostro.—¿Lo eres?— el asintió.—Oh lo siento mucho, no tenía idea, yo..— no supo que más decir y simplemente se calló. Mark rió a carcajadas.

—Te estoy jodiendo, claro que no soy homosexual— siguió riendo. Cathy lo golpeó.

—De todas formas no tendría nada de malo si lo fueras, pero viniendo de ti era poco creíble— dijo ella.

—¿Por qué?— preguntó el.

—Siempre andabas con una chica distinta, tenías a todas las mujeres que querías. Te conozco desde que tenías seis años, y en ese entonces ya besabas niñas, no me quiero imaginar lo que debes ser ahora que tienes veintiséis— ambos rieron.

—¿Te acuerdas del galpón que tenía tu padre?— ella asintió y sus mejillas se tornaron rojas.—¿Recuerdas cuand..— Cathy lo interrumpió.

—Cállate— puso un dedo en los labios de el.—Tenía catorce años en esa época. Todas en el barrio estaban muertas por ti, era obvio que yo también lo estaba. No hagas que recuerde esa vergonzosa escena— tapó su rostro mientras reía.

Cathy había pasado parte de su adolescencia "babeándose" por Mark, pues en el barrio donde vivían antes, él era el chico que mataba de amor a todas las pendejas que vivían allí, y estaba con todas las que se le antojaba, menos con la hija de Jeffrey. Un día ella lo encerró en aquel galpón que su padre tenía, le confesó su ridiculo amor adolescente, y lo besó sin esperar que el hiciera lo mismo, pero Mark la rechazó, diciéndole que eran muy buenos amigos como para arruinar la amistad, y que a demás ella era una chiquilla en comparación a el, ella tenía catorce y el diecinueve, era muy distinto a ahora, Cathy ya tenía veintiuno y el veintiséis, no se notaba tanta diferencia.

—¿Sabes por qué te dije que no?— preguntó él, ella asintió indicándole que hablara.—Tu padre siempre me prohibió acercarme a ti de esa forma. Siempre que nos veía juntos me decía que si te ponía un dedo encima, iba a olvidarse de todo el cariño que me tenía— rió mientras confesaba aquello. Cathy abrió ambos ojos como platos.—¿Sigue igual de protector?— preguntó.

—Aja, igual o peor. Todavía quiere golpear a mi ex, así que imagínate— contestó.—Cortamos hace casi dos meses, mejor ni preguntes— aclaró al ver la cara de intriga que el muchacho tenía.

Salieron de la cafetería y subieron al auto de Mark, ya iban de regreso a lo de Cathy. Su celular sonó, era Andrew, no contestó ya que no podría hablar allí.

Llegaron a la casa y entraron. Lo primero que vio fue a su padre, y junto a él estaban Norman y Andrew, el último la fulminó con la mirada, estaba molesto. Saludó a Jeffrey luego al novio de su amiga, por último se acercó a Andrew y este plantó un beso bastante sensual en su mejilla.