LA HIJA DE JEFFREY |Andrew Lincoln| TERMINADA

Capitulo 1.

Narrador omnisciente:

Cathy vivía con su padre desde que era una bebe, su madre los había abandonado cuando apenas ella tenía un mes de vida, pero para Cathy no fue un gran problema ya que Jeffrey se encargó de hacer de madre y padre toda su vida y le daba todo el amor del mundo, el era un famoso actor bastante reconocido en todos lados, pero más lo era ahora que había comenzado a actuar en una de las series favoritas de su hija, The Walking Dead.

Jeffrey había tenido varias novias en su vida, pero ninguna le duraba, hasta que conoció a Hillarie con la cual sentó cabeza y tuvieron un hermoso hijo llamado Gus. Hacía ya seis años que vivían los cuatro juntos en la gran mansión que Jeffrey tenía, y Cathy se llevaba espectacular con la esposa de su padre, digamos que ella ahora cumplía el rol de madre.

Se llevaba bastante bien con uno de los amigos de su padre, Norman Reedus, lo conocía desde que era una bebe, así que ya lo veía más como un tío o segundo padre.

A pesar de que Jeffrey fuera un reconocido actor, y por más de que él intentó varias veces meterla en el mundo de la actuación, Cathy nunca quiso ser parte de eso, ya le bastaba con que todos en su escuela le pidieran fotos con su padre o autógrafos. Ella ahora estaba empezando su segundo año de abogacía en la universidad, junto a su mejor amiga Daniela.

Hacía ya dos años que mantenía una relación amorosa con un campanero de la universidad, Nick.
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El sonido de la puerta sonando fue lo que despertó a Cathy está mañana, o medio día, ya que eran las doce.

Hoy no tenía clases ya que estaba en vacaciones hacía un mes, y le quedaban dos semanas más para disfrutar de no hacer nada.

—Preciosa, ábreme y baja a almorzar, ya es tarde— la voz de su padre se escuchaba atrás de la puerta.

Cathy paso sus manos por sus ojos, se puso de pie y aún adormilada fue hasta la puerta y la abrió.

—Que buenas fachas— río Jeffrey al verla con el pelo todo enredado y los ojos achinados de tanto dormir.— Buenos días, amor— dejó un beso en su mejilla.

—Buenos días pa— sonrió aún con los ojos cerrados.— ¿Que hay de almorzar? Muero de hambre— froto su panza.

—Sorpresa, vístete y baja— dicho eso su padre desapareció de allí, dejándola sola.

Cathy entro al baño que tenía en su habitación, lavo sus dientes y su rostro, peino su cabello, luego revisó su placard y se colocó un jean con una blusa corta que dejaba ver un poco de su barriga.

Bajo las escaleras y se dirigió a el gran comedor que tenía la casa.

—Buen día, enano— despeino el cabello de su hermano menor, que se encontraba sentado ya en la mesa. Este le sonrió y luego saco su lengua.

—Buen día, hermosa— saludó la esposa de su padre a Cathy.— ¿te quedaste toda la noche viendo the walking dead, cierto?— preguntó alzando una ceja. Cath rió y negó.

—Ya la termine por segunda vez el otro día, ahora solo quiero que sea domingo para saber a quién mierda va a matar papá— contestó mirando a su padre y luego se tapo la boca por haber dicho una mala palabra frente a su hermano de solo seis años.

—Esperaste 7 meses, dos días más no van a hacer nada— contestó Jeffrey riendo y colocando un plato frente a ella.

Macarrones con queso. La comida favorita de Cathy desde que era una niña.