25: Cruda verdad

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Drake

No sabía que me había pasado en el poco tiempo que estuve con Lena, todo aquello paso como si algo se apoderase de mí, pero a pesar de no haber estado por completo en control de mí, sentía una gran satisfacción, así como Lena. Cuando ambos terminamos, nos recostamos sobre el suelo, muy cerca el uno del otro.

—Sabes... —dije mirando directamente a los ojos de Lena—, me siento algo diferente, como sí mi mente fuera otra.

—Tal vez se deba a que por fin dejaste salir lo que realmente eres—contestó—. Dejaste que él dragón que había sido reprimido por vivir entre humanos saliera.

—Quizá tengas razón, pero si yo no fuese hijo de una humana, tú y yo jamás nos hubiésemos conocido.

—Sabes, casi nunca uso esta palabra, pero... creo que te amo.

—Yo te amo también Lena.

Un gritó nos interrumpió, ese grito era de mi hermana, y se escuchaba realmente cerca de aquí, ella debía de estar en problemas. Me puse en pie tan rápido como pude, escuchando como nunca antes los gritos de Chloe; Lena tardó un poco en ponerse de pie, dejando salir un quejido.

— ¿Te encuentras bien? —pregunté.

—Sí, solo no me he recuperado del todo. Eres más pesado de lo que aparentas.

Cuando ella pudo caminar con normalidad fuimos en busca de Chloe. Después de recorrer un buen tramo de camino, la encontramos restregándose los ojos, parecía que algo le había caído en ellos.

—Chloe, ¿te encuentras bien? —pregunté.

— ¡Dios mío! —Exclamó—, Drake, ¡oh no puedo ni verte! ¡Solo los veo a ustedes dos haciendo...! ¡Nooo...! —gritó.

—No puede ser, ¡nos viste!

— ¡Sí! Y lo que me quedaba de inocencia murió al verlos de esa forma. ¡Necesito lavarme los ojos con cloro!

Chloe salió corriendo directo hacía nuestra casa, sentía tanta vergüenza de que ella hubiese visto cuando Lena y yo nos apareábamos, pero no pensé que se metiera al bosque ella sola estando tan oscuro; solo me quedaba ir con ella, y convencerla de olvidar lo sucedido.

Carrie

—Tenemos que hacer algo —dije observando muy seriamente a Louis y a Max.

— ¿Cómo qué? Eso sería muy difícil —contestó Louis, levantándose de la silla en la que estaba sentado.

Habían pasado unos treinta minutos, mi encuentro con Michael en el bosque fue más que alarmante, fue una señal, señal de que debía irme de Dark lake... Para siempre. En el camino de vuelta, había llamado a Louis y a Max, quienes llegaron casi al anochecer; estaba enfadada, asustada, me sentía encerrada en una burbuja a punto de estallar.

—Podrías encontrar otro lugar, uno más escondido entre el bosque —comentó Max.

—No... nada de eso va a funcionar. Nos encontraran tarde o temprano —dije dando vueltas de un lado a otro.

—Tú eres la mujer más fuerte y hábil que conozco, Carrie. Además, nos tienes a nosotros, podremos superarlo.

—Max, créeme cuando te digo que esta vez estamos muy jodidos —comentó Louis—, por lo que nos dijiste, ellos han de ser ex militares, o simples locos que disfrutan asesinar animales.

— ¿Recuerdas que es lo que hacía cuando se referían a Drake con esa palabra? —contesté.

—Sabes de lo que hablo, ellos pueden hacerle daño a Drake.

Drake: El secreto de Carrie Washington (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora