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Inclinada sobre mi hombro contra el marco de la puerta, veo a Camila poner sus tachones en su oído rosado. El Cordón de manga larga, el apretado mini vestido revelando toda su espalda, el color crema de la ropa de un tono más oscuro que su piel clara. Me concentro brevemente en sus sandalias brillantes stiletto, imaginándomela en ellos y nada más. Maquillaje sencillo, con el pelo levantado en un moño alto con rosas de color rosa, ella no tiene idea de lo hermosa que es.
Dando vuelta del espejo, ella me ve mirarla. Camina hacia mí. Contempla mi atuendo, parte del cual es un lujosa camiseta que ella y Lauren me compraron para mi cumpleaños.
—Me encanta esta camiseta en ti, dice alisando sus manos por mi pecho.
—Te ves sexy de negro.
—Me encanta ese vestido en ti —Trazo mis dedos hacia abajo sobre sus caderas, sintiendo la tela súper suave aferrándose a sus curvas—. Tengo muchas ganas de quitártelo pronto, también —tomo a Camila de la mano y caminamos por el pasillo hacia la escalera.
Todo el mundo está bebiendo esta noche, por lo que tenemos un par de taxis en el club. Estamos en la sección VIP, por lo que no tenemos que unirnos a la línea de fuera. La música es una mezcla de géneros, lo cual es ideal dado el gusto variado entre los sietes de nosotros. A ritmo del hip hop que está sonando mientras nos sentamos en nuestro semicircular stand de cuero púrpura y negro, tomamos shots y cocteles. No estoy tomando shot no esta noche, pero estoy con ganas de tomar alcohol.
Las tres chicas se levantan y comienzan a bailar cuando Justin Timberlake suena. Mi enfoque se bloquea en Camila y su ritmo sexy. Summer love esta cantando, sus caderas se mueven con ello. Siempre me ha fascinado la forma en que se mueve y la forma en que se pierde con la música y no me importa si alguien la mira. Ella nota mi atención y hace contacto visual conmigo. Siento como que estoy teniendo mi propio show privado, no existe nadie mas es solo dos de nosotras. Canta junto con el coro, levanta su pequeña cámara digital, que utiliza cuando no está trabajando, y comienza a tomarme fotos. No me muevo. La veo mirándome.
Todos estamos ahora, la atmósfera es eléctrica, todos en el espacio de la sala sienten la vibración cuando la pista pasa en una versión extendida. Estoy detrás de Camila, teniendo un movimiento sensual, la fluidez de su columna y su trasero, oh, ese trasero. Me asiento sobre sus caderas, me muevo más cerca.
Después de algunas otras reproducciones de canciones Camila va al baño de mujeres. Aprovecho la oportunidad para hablar con Jhonny, el hombre que es el dueño de Blaze.
Camila vuelve poco después. No se ha demorado tanto tiempo y tiene una mirada maliciosa en su rostro, que me divierte y me excita. La pista de baile esta mas ocupada, más caliente, el ritmo sigue siendo fuerte, aunque un poco más rápido. No movemos hacia una esquina. Sus brazos hacia arriba alrededor de mi cuello, las mías apretadas a alrededor de su cintura, ella se siente tan pequeña. Si la sostengo de la forma que quiero, la rompería probablemente. Sus tacones ayudan con la diferencia de altura y me adapto a mi misma para ayudarla un poco más. Encontramos nuestro propio ritmo, más lento que la canción que suena, pero es perfecta para nosotras.
Ella sabe que soy difícil, es imposible no serlo, me aprovecho de su trasero, en parte por frustración, y la tiro con más fuerza contra mí. Alcanzando detrás de ella, toma una de mis manos y lo guía en medio de nosotros y por debajo de su vestido. Siento sus cálidos y húmedos pliegues. Sin bragas.
