Capítulo 31

1.3K 83 5
                                    

Camila

Suaves y cálidos labios se presionan contra los míos. Me está besando. Mis párpados se abren, me alejo. _____ ahueca la parte posterior de mi cabeza con su mano, llevando mi cara a la suya. Sorprendida como estoy, no puedo tirar de nuevo.

Quiero más.

Me abro para ella, las puntas de nuestras lenguas se conectan y aumenta el calor a través de mí a la velocidad del rayo. Abrumada, un gemido de necesidad se me escapa. Nuestro beso se convierte rápidamente codicioso y apasionado, como dos personas que han sido privadas de la otra. _____ tiene un firme agarre en la parte de atrás de mi cabello y su otro brazo está alrededor de mi cintura, me abraza fuerte contra ella. Encajo en su lujurioso abrazo posesivo. Su piel está ardiendo, se siente suave y firme, pero muy caliente. Puedo sentirlo en todas partes, me consume, casi no puedo respirar. Esto es increíble, abrumador. El sabor de su boca es una mezcla a nuevo, a frescura y a la cerveza. Su lengua acaricia la mía, profundamente, a fondo.

¡Oh, Dios mío, estoy besando a _____! Sí, sí, sí, ella es definitivamente una buena besadora. Tan buena, que me arrepentiré de esto.

Antes de darme cuenta, ya no estamos sentadas una frente a la otra. Estoy de espaldas con _____ encima de mí, una de sus piernas entre las mías, su erección presionando contra mi cadera. ¡Erección! Que. Mierda. Oh, oh wow. Nunca he experimentado tanta pasión en un hombre (Este caso mujer) antes de follar y...santa mierda, mi camisa está fuera. ¿Qué? ¿Cómo sucedió eso? ¿Tal vez estoy borracha de sexo, también? Empiezo a gemir, agarrando su cabello con mis dedos y empujando mi pelvis contra la suya.

No, no, no.

Reacia y abrumada, rompo nuestro contacto girando mi cara hacia un lado. Me faltaba el aire, me siento como si hubiera estado retenida bajo el agua por mucho tiempo.

—Dios, _____ —Apenas logro decir—. No podemos hacer esto —jadeo.

—¿Por qué? —Besos comienzan a bailar por mi mandíbula. Mierda, mierda, mierda.

—Porque no podemos, _____, somos amigas. No hagamos de esto un lío. —La alejo utilizando toda mi fuerza física y mental que tengo, y la mantengo atrás con mis manos en su pecho. Puedo sentir su violento latido del corazón machacando bajo mis palmas. Es tan fuerte como el mío.

—Te amo, Camila —dice ella, su mirada reclamando la mía.

Todo mi cuerpo se vuelve tan quieto como un modelo de arcilla. No me puedo mover. No puedo creer lo que oigo.

¿Ella realmente llega tan lejos sólo para follarme?

La muevo más lejos y me siento.

—¿Qué demonios, _____? No puedes hacer esto. Tira esa mierda a alguien más, no te atrevas a intentarlo conmigo. —Estoy furiosa y confundida. Confundida por sus palabras, y el intenso deseo todavía dentro de mí, y furiosa porque no sé por qué está diciendo esto.

Esta mujer no ama, y yo no soy tonta.

—Lo digo en serio, no tienes idea de lo mucho que te he querido.

Sólo puedo mirarla. Lo que dice es imposible, no puedo ni siquiera parpadear. Antes de volverme móvil, sus labios están sobre mí, mi nariz, mi boca, por mi barbilla hasta mi cuello. Todavía no puedo moverme. ¿Por qué está diciendo esto? La caliente boca cubre mi pezón.

Mierda, mierda, esto es demasiado.

Me alejo y esta vez me pongo de pie.

—Esto es jodidamente ridículo, _____, no puedes estar hablando en serio. ¿Realmente crees que voy a comprar esta mierda?

Hay un crujido en los arbustos a mi izquierda. _____ salta y toma una postura defensiva frente a mí, las dos mirando al ruido.

Gerard salta.

—Bastardo —le grito, mientras me agacho a recoger mi camisa y me la empiezo a poner. No estoy avergonzada por estar vestida con sólo mi ropa interior, pero en este momento me siento más desnuda que nunca. Por primera vez en la historia, tengo que estar lejos de _____. No puedo comprender la mierda que está intentando aquí.

Gerard camina hacia nosotros, poco a poco, con sus manos en alto como si fuera un atraco a mano armada. Se detiene aún en el lugar.

—Lo siento, chicas, no quise asustarlas. Oí voces, por lo que me acerque a ver cómo estaban. Veo que por fin han hecho movimientos entre sí

—¿Qué? —le espeto—, ¿Qué diablos significa eso?

—Sólo estoy diciendo que ya es hora, eso es todo. Veo que he tenido una mala idea, sin embargo.

—Sí, lo has hecho —dice _____.

—Por favor, vete a la mierda, Gerard —digo, volviendo a recoger mis cosas.

Él hace una salida rápida, y siento nada más que rabia ahora. No puedo creer que _____ dejaría caer esa mierda de amor sobre mí. Soy consciente de ella de pie, detrás de mí, mirándome. Estoy enrollando mi saco de dormir, dispuesta a volver a la tienda. Me voy esta noche.

—Mira, lo siento, por favor, quédate. No voy a decir una palabra más, ni hacer nada.

—No puedes hacer eso, _____, no es justo —me quejo. Me siento muy jodidamente patética ahora.

—Lo sé, no te vayas. Vamos a olvidar lo que he dicho.

Quiero quedarme. ¿Por qué tenía que hacer esto?

Con un suspiro cargado de frustración, puedo reinstalo mi saco de dormir en el suelo. Me deslizo en él, cierro la cremallera, y me recuesto con la capota subida hasta debajo de mis axilas. Mis brazos cruzados sobre mi pecho, miro fijamente las estrellas.
_____ se sienta. Sé que me está mirando, probablemente esperando que yo dijera algo. Cierro los ojos. No puedo verla, ni hablar con ella.

¿Por qué intentaría eso conmigo, ella que puede tener a cualquier mujer que quiera? No creí, durante un segundo, que _____ haga eso. Confundida, suspiro lo más suave que puedo, así no me habría escuchado. Mierda, esto es complicado. Mierda, mierda, mierda. Antes de que pueda detenerme, exhalo duro con fastidio. Maldición.

Reproduzco todo en mi cabeza, sus acciones y sus palabras.

¿Es realmente posible que ella...que nosotros? Parece demasiado bueno para ser verdad, ¿pero lo es? Estoy segura de que no perdería el tiempo conmigo, somos muy cercanas para eso. Ella no es así. Cuando Paige dijo que la amaba, terminó las cosas, así que no lo diría si no lo decía en serio. Pero dijo que no quería tener nada profundo, por eso terminó. No ha logrado estar cerca de alguna mujer desde que ha estado soltera, y ha pasado más que un poco, puedo decir. Nada de esto tiene sentido.

—¿_____? —le susurro. No sé qué decir.

—¿Sí? —responde, en un tono de voz como el mío. Me puse nerviosa.

—Nada.

If Only (Camila  y Tú G!P)Onde histórias criam vida. Descubra agora