CAPITULO 40

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Patrick

De todas las personas en el mundo, con la que me encontré, fue la última que hubiera imaginado ¿Vieron cuando dicen, ya nada puede sorprenderme? Y de repente ¡bum! El universo te tira un pelotazo a la cara y te pregunta burlón ¿Qué decías?

-¿Que haces tu aquí?

-¡Simón!-grito Clara.

Mi primo levanto la cabeza y nos miro. Tenía la ceja y el labio partido.

-Pasen y siéntense -nos hizo una seña con la mano, indiferente a nuestras reacciones.

-¿Te eres el jefe?

Clara era una maquina de preguntas hoy y me irritaba el por que tanto interés con mi primo. Ya había tratado de competir contra uno de mis primos y me había salido el tiro por la culata, no iba a permitir dejarle siquiera una abertura por la que Simón, pudiera inmiscuirse.

-Solo manejo la agencia -se quito importancia.

-¿Desde cuando ustedes...?-escupí enojado. Me molestaba que se tan humilde, por que hacia mi tarea de odiarlo difícil, de todos nosotros, siempre había pensado que Simón era el mejor. El mas sabio, humilde, generoso y noble y ahora me daba cuenta que no lo conocía en realidad, que bajo todo ese optimismo y humor, había algo mas oscuro. Sabia que el no era mal hombre, pero también me daba cuenta de que tenia cierto interés en Clara y no podía evitar sentirme amenazado.

El enarco una ceja y luego lo miro a Duncan - cuando tu padre trajo a Duncan, yo solo era un mero agente. Me entere de su historia y quise proponerle unírsenos, pero el me lo hizo difícil.

Duncan se rio- eras peor que una mujer desesperada, buscando mi atención.

-Eras un hijo de puta pretencioso y desconfiado.

Siempre había detestado la confianza y dinámica que había entre ellos dos. En la familia eran tres hermanos, mi padre Thayer, Ian, el papa de Simón y Elizabeth, la mama de Duncan.

Simón y yo nunca habíamos sido cercanos, pero nos llevábamos bien. Megan y yo éramos inseparables.

Pero desde que llego Duncan todos habían prestado atención a el y los demás desaparecimos antes sus ojos, en especial mi padre.

-¿Y tu que delito cometiste para estar aquí?-pregunte molesto.

Sus facciones faciales se endurecieron al escuchar mi pregunta- esa es otra historia, que no contare hoy.

Ahora el que enarco una ceja fui yo. Mi instinto de investigador salió a flote y de pronto quise saber más de mi primo, que era lo que ocultaba. Que cosas habían por ahí, esperando ser descubiertas.

-Hoy hablaremos de lo esencial-dijo Duncan cambiando de tema.

-¿Y eso es?

-Tenemos un problema entre las manos y tiene nombre, Alek Petrov.

Clara bajo la cabeza y suspiro.

-¿Que pasa con el?- ya le ganamos ¿no?-dije tratando de sonar seguro.

-El volverá por mí-dijo Clara.

-No lo dejaremos-zanjé.

-No lo entiendes Patrick, Alek es un hijo de puta, que no para hasta que obtenga lo que quiere-dijo ella enojada.

-Efectivamente ese bastardo volverá. Pero esta vez no nos va a tomar desprevenidos-afirmo Simón-redoblaremos la seguridad de todos, especialmente la de mi hermana, ella debe permanecer ajena a todo esto.

La preocupación volvió a mi cuerpo con fuerza. Había sido tan iluso de pensar que ya se había terminado-¿que proponen?-si teníamos que vencer a un mafioso, iba a necesitar de su ayuda, al fin de cuentas, ellos eran los profesionales en esto.

-La única forma de deshacernos de el, es matándolo-declaro Clara.

Me asusto ver determinación en su mirada. Los sucesos de la tarde volvieron a mi cabeza y un escalofrió subió por columna, nunca había visto nada igual.

Me había quedado obnubilado viéndola actuar, era como verla en su estado natural, como si fueran dos personas en una.

-Tu no harás nada estúpido y nadie matara a mas personas-la mire con la misma determinación que tenia ella en su mirada.

Clara nunca tuvo quien la cuide, más que su padre, que ahora estaba bajo tierra. Pero no más, yo velaría por su seguridad de ahora en adelante.

Ella me miro intensamente. Si las miradas mataran yo ya estaría muerto.

-Patrick tiene razón Clarita-rechiné mis dientes al escuchar el apodo por el cual la llamo-no puedes hacer esto sola, pero también tiene algo de razón, solo su muerte traerá la paz que anhelamos.

-No me subestimen-gruño-siempre pude sola y esta no va a ser la excepción.

-Clara...-suplique.

Ella me miro y sus ojos brillaron con una emoción que no supe dilucidar-ustedes no entienden. Yo les agradezco que quieran ayudarme, pero este es mi problema y como tal yo lo tengo que solucionar. No quiero que nadie más salga lastimado. Suficiente con el secuestro de Megan, hoy tuvimos suerte, pero mañana, no se si seremos tan afortunados.

-Cla...

-Basta Patrick-suplicó-no quiero hablar más del tema. Ahora quiero saber ¿como se encuentra Megan?

Ella estaba cambiando de tema y algo en mi me decía que debía preocuparme. Simón suspiro frustrado al igual que yo- ella esta bien. La salvo uno de mis mejores agentes, no iba a dejar la vida de mi hermana en manos de cualquiera.

De repente sentimos unos gritos, seguidos de un portazo. Una Megan despeinada y con el maquillaje corrido, entro furiosa por la puerta, seguida de un moreno.

-¿Alguien me quiere explicar que cojones paso aquí?-chilló desaforada.

-Hermanita...-trato de tranquilizarla Simón, pero no tuvo remedio.

-Ni hermanita ni leches ¿Quien demonios eres Simón? Y ¿tu?-le dijo a Duncan ¿Tu también estas metido en esta mierda?-me señalo a mi.

-Ya habrá tiempo para explicaciones-la censuro Duncan.

-¡Estoy harta de oraciones monosilábicas!- se agarro la cabeza-y tu-lo señalo al moreno-deja de seguirme como un maldito acosador.

El moreno enarco una ceja y se cruzo de brazos en el lugar. Megan estaba roja de furia, hasta que miro a Clara y su cara se transformo al ver su pierna.

-¡Oh por dios! ¡Tu pierna!

Si. Mi prima era bipolar.

-¿Estas bien?

-Si, lo estoy. ¿Tu como estas?

-Agradecida de que me salvaras-nos pico.

-Auch hermanita-dijo con una mano en el pecho dramáticamente Simón.

Ella rodo los ojos- estoy bien, pero harta de que me tengan a secretos. Mi plan era salir, emborracharnos y agarrar algunos peces atractivos, no terminar drogada y secuestrada y para ponerle la cereza a la torta que mi hermano y mi primo me hayan ocultado que eran unos intentos fracasados de James bond.

-¡Hey!-nos quejamos al unisonó los tres.

Especialmente Duncan y yo al escuchar la parte de emborracharse y buscar peces atractivos.

Clara en cambio, largo una carcajada sonora y le dio una palmada en el hombros - amo tu sentido del humor chica.

Megan le sonrió y luego puso una cara que dio miedo. Nos miro fijamente a los tres y sentados sin delicadeza en el sillón nos señalo seria-¡ahora desembuchen bitches! Y no me mientan, que les aseguro que lo sabré.

Siempre Te Encontrare © 2 Libro De La Saga "Un Escoces Enamorado"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora