175- ¡Oh, oh!

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CHRIS, CONNOR Y TRAVIS.


— ¿Y qué se supone que debemos hacer? — pregunto Chris mientras veía como Travis y Connor guardaban algunas cosas en sus mochilas

— Ayudarlo, después de todo es nuestro padre — Travis tomó una de las mochilas robadas de la tienda y se la lanzo a Chris — Ahora no te hagas el cabezota y guarda algunas cosas

— De todas formas, ¿por qué nos eligió a nosotros tres?

— ¡Chris! — le gritaron los dos obligando al tercero a guardar algo en la mochila, sin saber muy bien que cosa


Al llegar a las calles de New York, los tres jóvenes caminaron hasta el Empire State y se metieron directo en el ascensor.


— Sigo pensando que esto es una trampa — Travis y Connor pusieron los ojos en blanco, desde que habían sido llamados por su padre, Chris no dejaba de decir esa clase de comentarios

— ¿Lo golpeas tú o lo hago yo? — murmuró Travis por lo bajo, Connor sacó de uno de sus bolsillos un LouFomenta en forma de chicle

— Ten Chris, come esto — Connor le tendió el chicle a Chris y este, sin siquiera pensarlo se lo llevo a la boca


Al llegar al piso 600, los tres semidioses se dirigieron al templo de Hermes, no había ningún rastro del dios, lo que había puesto más impaciente a Chris, la habitación se volvió blanca un momento y al otro, Hermes se encontraba parado frente a ellos, en cuando él extendió su mano en dirección a Chris, este cayó inconsciente al suelo.


— ¿Eso es normal en él? — pregunto él dios viendo al chico confundido

— Le sucede todo el tiempo — Connor rodeo los hombros de su padre y sonrió — ¿Y bien, qué tenemos que hacer?

— Bueno, me agarró una de esas crisis de siglo, donde me paro a considerar si soy buen padre o si estoy malgastando mi tiempo — Travis frunció el ceño y Connor se guardo el comentario que estaba luchando por salir, ambos pusieron rostro de preocupación y asintieron — Así que, solo propongan una actividad y la realizaremos


Travis estaba por decir lo estúpido que sonaba eso de la crisis, pero Connor se adelanto.


— ¿Cualquier actividad? — Hermes asintió — Perfecto, tú consigue estas cosas y podremos empezar — garabateo en un recibo de compra las cosas que necesitaba y se la tendió a su padre — Y si no consigues de esas cosas, busca algo más potente

— ¿Para qué necesitas plumas y pegamento? — Travis se dio un golpe en la frente con su mano y supo de inmediato el sinfín de problemas que tendrían

— Créeme viejo, cuanto menos sepas, menos te arrepentirás


Él dios asintió y desapareció de la habitación, Travis le pegó un puñetazo a su hermano y esté cayó al suelo riendo.


— Sabes que apoyó las bromas pero piensas hacerlo en el Olimpo, lugar de los dioses destructores y que no tienen ninguna pizca del sentido del humor — él asintió con una gran sonrisa — Como sea, ¿qué le diste a Chris?

— Un calmante, especial de Lou, con la suficiente potencia para dormir a un dios — Travis frunció el ceño — No preguntes como lo se, sino me equivoco Chris tiene que despertar en 1 semana


Travis se quedó viendo el cuerpo inconsciente de Chris.


— ¿Qué diablos le puso a esa cosa? — Connor se encogió de hombros — Dime que tienes mas de esas cosas


***


Para el final del día, Artemisa tenía purpurina pegada en todo el cuerpo, de diversos colores, tanto que parecía un arco iris brillante. Los espejos de Afrodita habían sido encantados, cada vez que se veía en uno de ellos, el cristal se rompía. Habían hecho unos ajustes con uno de los libros de Atenea, y ahora tenía la cara cubierta de plumas. A Hera le habían teñido la piel de azul y habían usado las sobras de la tinte para teñir el cabello de Apolo. Zeus había sido drogado con una de las pastillas mágicas de Lou y actuaba aún más estúpido que de costumbre.

Casi todos los dioses que se encontraban en el sitio durante la hora de visita de Connor y Travis habían resultado de alguna forma afectados por sus bromas, Hermes reía sin control cada vez que veía la reacción de uno de los dioses luego de la broma. Llegado el fin del día, los dos semidioses y el inconsciente Chris, fueron mandados al Campamento en uno de los carruajes de su padre.


— Fue un gran día chicos, nunca lo olvidare — les había dicho su padre, antes de ser llevados al Campamento

— Te dije que todo estaría bien — comentó Connor con una gran sonrisa

— Ya veremos hermano

One Shot. Percy Jackson y los héroes del OlimpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora