One Shot. Percy Jackson y los héroes del Olimpo

165- No tan frío

TRATIE.

Lo suyo, era tal vez, la relación más extraña que se había apreciado en el campamento desde la unión de Percy y Annabeth, pero ambos habían ignorado todos esos comentarios y habían formado su romance, vivido su historia de amor y escrito sobre la arena, la más bella de las canciones.

Claro que, las cosas nunca se mantienen bien, él amor es algo complicado y difícil de comprender.

Katie y Travis, no se dieron cuenta de ello, hasta que fue demasiado tarde, había días en que ni siquiera se hablaban.

Habían dejado de decirse cosas bonitas, y tratarse como tontos enamorados, tal vez para sostener una relación, no solo se tienen que decir cosas lindas, pero nunca esta de más un "te amo", aunque sea para recordar a aquella persona que es importante en tú vida.

— Deberías hacer un último intento-aconsejo Piper a Travis — Si le demuestras que aún hay algo entre ustedes, tal vez, vuelva a surgir un interés por su parte

Siguiendo el consejo, Travis había ido hasta la cabaña 4 en busca de su... ¿novia? Y ambos habían salido a dar una vuelta por el bosque, iban hablando de varias cosas, hasta que él se detuvo.

— ¿Cómo dijiste?

— Gracias por ser mi amigo — repitió ella con una sonrisa

— Creí que era tú novio — la sonrisa de ella tembló, pero no desapareció

— Travis, creí que ambos habíamos asumido que ya no había nada más entre nosotros — ella metió sus manos en los bolsillos de su chaqueta de jean con timidez — Digo, las cosas entre nosotros se enfriaron y ya no siento que, seamos la Katie y él Travis de ese momento

— ¿Así que esto es todo?

— Hace rato, eso fue todo — ella siguió caminando

A pesar de todo lo que había pasado, él todavía la quería, tal vez las cosas se habían enfriado, pero eso qué? Una voz en su cabeza había advertido que no era solo un "enfriamiento" era un "glaciar"

Negó con la cabeza ranció a pensar que eso era posible, comenzó a caminar de forma rápida por el sitio en el que se había ido Katie, aún quedaban marcas de sus pisadas en la tierra, iba a hacer los esfuerzos que hicieran falta, por ambos.

Luego de tanto caminar al fin la encontró, ella estaba sentada en una roca, con los pies sumergidos en una pequeña corriente de agua, recordó la primera vez que había ido con ella a ese sitio, cumplían un mes de novios y habían pasado toda la tarde sentados sobre esa roca, hablando o tal vez, disfrutando de la compañía del otro.

— No estoy segura de esto Travis — murmuró ella, mientras movía sus pies que aun se encontraban en el agua — Las cosas no funcionaron una vez, ¿por qué sería diferente?

— Porque nosotros queremos que sea diferente

Ella no dijo nada, pero él sabía que no estaba convencida, tomo su mentón con una mano y hizo que lo mirara, acerco su cara a la suya y la beso.

— Aún te amo

— ¿Todo sera diferente? — susurro ella con los ojos cerrados

— Todo

Esta vez, ella lo beso a él.