20. ¿Crees Que Yo No?

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CALEO.

Calipso miraba a los lejos a Leo Valdez, el chico que había robado su corazón hacía un buen tiempo, pero él chico parecía estar comprometido con esa chica que parecía modelo, con su perfecta sonrisa, sus hermosos ojos y ese cuerpo envidiable para cualquier mujer, ella era la mujer perfecta para él. Hacía dos años cuando empezó a trabajar allí, conoció a Leo, al principio venía solo y se sentaba en una mesa alejada, a leer o a teclear unas cosas en su computadora, luego venía con sus amigos pero hace casi tres meses empezó a venir con esa chica sin falta todos los lunes, miércoles y viernes.

Siempre están riendo o conversando, es obvio que son pareja se nota por la forma en la que se tratan, claro que no les presta mucha atención, si se van a besar ella no quiere verlo.

Suspiro con pesadez y le llevo su pedido al señor Valdez y a su acompañante, apenas dejo el pedido se volvió casi como flash atrás de la barra, no quería escuchar lo que ambos se decían, tenía ganas de llorar pero eso no era posible, estaba trabajando y tenía que mantenerse fuerte. Extrañaba los tiempos en los que Leo venía solo, entonces la retenía con sus bromas, experimentos o con alguna charla sin sentido, pero desde que empezó a venir acompañado hablaban poco y nada. La chica se dirigió al baño y Leo se acerco a la barra donde ella estaba limpiando.

– ¿Cuanto es Cal? – le pregunto con una deslumbrante sonrisa

– $35 – contesto la chica esperando a que el chico pagara – ¿Sumo lo de tu novia?

Leo se le quedo mirando sin comprender cuando dijo eso, lo que dejo a Calipso sorprendida, acababa de mencionar a su novia y el la miraba sin comprender a que se estaba refiriendo.

– ¿Novia? – pregunto el chico frunciendo el ceño

– La chica – contesto Cal señalando a la mesa donde antes estaban sentados

Leo pareció entender a lo que ella se refería... y por alguna extraña razón comenzó a reír, como si le hubieran contado un muy buen chiste, a todo esto Calipso lo miraba con una ceja alzada.

–¿Tu creíste que Piper? – pregunto el chico riendo – Piper es la novia de mi mejor amigo – contesto el chico volviendo a explotar en una carcajada – Él chico rubio que siempre venía conmigo... – su sonrisa se apago – Tuvo un accidente en su auto hace 3 meses atrás... esta internado en el hospital a unas cuadras aquí, ella se encarga de cuidarlo... Jason no soportaría verla tan deprimida o preocupada, pasando tiempo en ese lugar así que me encargo de sacar a Piper del hospital para que se despeje... por eso viene conmigo... es para que se despeje y no este tanto tiempo en ese lugar horrible que llaman hospital

Calipso se sintió tan mal, el chico solo estaba ayudando a la novia de su amigo, y ella que estaba celosa, también había juzgado mal a la chica, había pensado mal de ella siendo que la chica tiene un novio internado.

– ¿Esta muy mal? – se animo a preguntar

– Entro en estado de coma, los médicos tienen esperanza de que despierte la semana próxima – contesto el chico bajando la mirada

Por alguna razón Calipso sintió ganas de abrazarlo al verlo así, se notaba que el también necesitaba despejarse un poco y no era solamente Piper, por ahí era algo extremo lo que estaba por hacer, pero quería intentar.

– ¿Te gustaría salir conmigo a cenar? – pregunto ella llamando la atención del castaño

– Claro

***

Leo y Calipso estaban volviendo de su cita, la habían pasado muy bien, tenían algunas cosas en común y otras cosas que no, pero eso no importaba, cuando llegaron al departamento de Calipso, Leo se despidió con un fugaz beso en los labios para luego irse caminando hacía quien sabe donde.

Calipso tenía una sonrisa que nadie podía borrar de sus labios, había empezado a salir con Leo hacía 3 semanas, había podido conocer mejor a Piper, que le había caído muy bien, era una chica tierna y dulce que a pesar de todo lo que le estaba ocurriendo a su novio seguía sonriendo, había hablado con Leo sobre eso una noche, aun con todo lo que le había pasado a Jason se sentía feliz de que su amigo tuviera a alguien como Piper a su lado, ya que cualquier otra chica se habría ido cuando corría riesgo de que su novio no despertara, pero Piper se mantuvo a su lado desde el principio y si no fuera porque tiene necesidades humanas como dormir y comer seguro no saldría de esa habitación.

Cada vez que ve que Jason se mueve mucho llama a una enfermera, cada tanto se pone a hablar con él con la esperanza de que despierte, en fin la había visto llorar de dolor pensando en que Jason no despertaría nunca.

– Tenemos que irnos linda – susurro Leo en su oido

Calipso abrió los ojos y se encontró con la mirada de su novio, se estiro un poco y luego se envolvió en una sabana para ir al baño a cambiarse, sin importar la confianza que tenía en Leo no dejaría de sentirse avergonzada porque la viera así, caminaron juntos de la mano hasta el hospital nuevamente. Allí estaba Piper mirando con lagrimas en los ojos la habitación de su novio a través de la ventana mientras muchos médicos estaban en la habitación.

– ¿Que ocurrió? – pregunto Calipso viendo que Leo no podía hablar

– Despertó – contesto Piper en un susurro

Los tres se abrazaron con fuerza, y luego miraron la habitación, Leo no pudo evitar robarle un beso a su novia de la emoción, cuando los médicos salieron dejando a uno solo dentro de la habitación pudieron entrar, Jason miraba al doctor con atención, pero en su mirada se reflejaba la duda.

Apenas vio a Leo –que fue el primero en entrar–, su mirada de duda paso a una de felicidad, cuando vio a Calipso también la miro con duda, pero cuando la vio a Piper su mirada destellaba amor. Leo y Calipso se abrazaron y se dieron un corto beso mientras vieron como Piper y Jason hablan.

– Te amo – le susurro Leo sonriendo

¿Crees que yo no? – le pregunto Calipso volviendo a robarle un beso

One Shot. Percy Jackson y los héroes del OlimpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora