Capitulo 8

2.7K 92 15
                                    

Capitulo 8

Me fui a la ducha después de llamar a Alba y a Ana para decirles que íbamos a cenar y perdernos por la noche madrileña, iríamos a un restaurante de comida fusión, y luego a tomarnos algo en un sitio nuevo que a Alba le habían hablado. Me puse unos pantalones negros pitillo, una blusa sin mangas de color blanca y una americana. Mis botines negros de gran tacón, y un pequeño bolso para llevar lo imprescindible.

Bajé al salón ya con el pelo liso, y maquillada, me puse una de mis mejores colonias y unos pendientes que me compré en Argentina. En la sala me encontré con Alex, pasé por detrás de él, y cogí las llaves de casa.

-Hasta luego, Alex.

Dije dando un paso para irme.

-¿Dónde vas? (Preguntó)

-A cenar.

-Espérame cinco minutos, me cambio y voy contigo. (Dijo levantándose del sofá)

-No te preocupes, ya he quedado. Además, tienes que aprenderte el guión.

Me di la vuelta y sonreí. Me fui de casa muy orgullosa de mi. Iba a ser una gran noche. Llegué al restaurante junto a Inma, saludamos a Ana y Alba y nos sentamos. Pedimos unas cañas para empezar, el camarero nos indico una cerveza artesana que no estaba nada mal. Pedimos unos entrantes para compartir. Después llegó el vino blanco, y sushi variado.

-Muy buena elección, Vanesa. (Dijo Ana mirando a su alrededor) Me encanta el sitio.

-Gracias (sonreí), lo leí en twitter y tenía ganas de probar.

-Aja... (Comentó Alba) Y, se puede saber, ¿porque hoy?

-(La miré) Tenía ganas de salir de casa...

-¿Ha pasado algo? (Preguntó Inma)

-(Bajé la mirada hacia mi plato, mientras me ponía sushi en él) Nada... lo de siempre... Pero hoy, me he hartado...

-¡Ay! (Exclamó Alba) ¡Por fin! (La miré y sonreía) ¡Le has dejado!

-Alba...

-Vamos a brindar (continuó)

-Alba...

Ella seguía a lo suyo, mientras Ana e Inma reían.

-¡Alba! (Exclamé yo y por fin paró y me miró) No es eso...

-(Dejó la copa) Oye... A mí no me hagas ilusiones y luego me las quites...

-(Sonreí) ¡Cállate! Simplemente hemos discutido.

-¡Qué novedad! (Dijo Alba sin mirarme) ¿Algo más?

Cuando levantó la cabeza encontró mi mirada, y sonrió.

-No te cabrees, amiga. Si yo lo digo por ti...

Tendrá morro, menos mal que la quiero, sino... No le dije nada, miré a Inma y seguí.

-Estaba leyendo un guión, y no me ha dicho ni hola al llegar.

-Pero, quizás era importante. (Comentó Ana)

-Ya... No me importaría si nos viéramos a diario, o si todos estos días fuera de casa se hubiera dignado a contestarme alguna de mis llamadas, y no con un simple mensaje...

-Vaya, (comentó Inma) se está luciendo.

Asentí mientras me tomaba un sorbo de la copa de vino que tenía en mi mano. Y empezamos a hablar sobre diferentes temas, entre ellos un nuevo libro que salía de Planeta, el cual estaba emocionadísima Alba, los últimos castings de Inma, y la agenda tan apretada que tenía estas últimas semanas. Al rato nos interrumpió un sonido a lo lejos, me giré y vi que una madre levantaba del cochecito a un bebe que lloraba. Sonreí al ver que ella le acariciaba la cara para que se tranquilizara.

En la cola del vientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora