Celeste a sus 27 años ha logrado triunfar en su carrera profesional, tiene una vida feliz, y amigos que darían la vida por ella. Pero con cada triunfo logrado nace una nueva ambición y esta vez, ella quiere apostarle al amor, pero no a un amor cua...
Estoy casi a punto de lograr lo que pretendo, necesito regresar a lo seguro con Celeste, no quiero seguir robando besos y sintiéndome culpable por saber que no soy yo a quien ella quiere, obviamente le estoy mintiendo al decirle que besa muy mal, en realidad ella no me ha besado, yo la bese a ella y aun así no puedo negar que estoy loco por poder volver a rozar mis labios sobre los suyos he soñado con su sabor, con su aroma, con profundizar ese beso hasta perdernos en la misma esencia, pero debo de aprender a ser mas prudente si Celeste se aparta de mi por esta tontería no me lo perdonaría, cometí una gran estupidez el otro día y no pienso dejar que me ganen los impulsos por saltarle encima y comérmela a besos, creo que tomare el consejo de Lize y saldré con ella esta noche para poder aclarar mis ideas.
La veo ponerse roja de pronto, se ha enojado conmigo y no puedo borrar mi sonrisa, se ve aun mas adorable toda colorada llena de furia contenida.
—Eres un idiota Nicolas —chilla enojada borrando las distancias, atrapa mis labios con los suyos en un beso suave y tierno, me tortura lentamente, rozando su lengua con la mía en un baile demasiado sensual, un estúpido gruñido de placer sale de mi boca, dejándome al descubierto, ella ahora sabe que he mentido al decirle que besa mal, la siento sonreír en mi boca separando sus labios, pero lo siguiente que hace debería de ser prohibido por la ley, con su dedo indice recorre mi labio inferior y luego se lo lleva a su boca dándole un leve mordisco.
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—No vuelvas hacerlo Nicolas, no vuelvas a tentarme, no vuelvas a besarme, no te vuelvas a poner en riesgo conmigo, porque ten por seguro que yo se jugar mejor este juego —amenaza —No soportaría hacerte daño, no a ti —Esto ultimo lo dijo en un susurro muy bajo, tanto, que no estoy seguro si fue mi imaginación.
Yo sigo sin poder recuperar el aliento del increíble beso que me acaba de dar, no me importa si tengo que ir al infierno por conseguir otro, no me importan las amenazas de Celeste, voy a ir por todo con ella y tarde o temprano va olvidarse del modelito de cuarta para fijarse en mi, con este beso solo me demostró que no le soy para nada indiferente y que esta química entre ambos no solo es parte de mi imaginación.
Celeste sale de la oficina, al mismo tiempo que Lize entra con las copias en sus manos, con una sola mirada analiza toda la situación y me ve reprochándome, mantiene su mirada firme y dura.
—No es lo que parece —explico, pero realmente no se como expresar lo que ha pasado hace solo unos segundos, exasperado me jalo el cabello y veo hacia arriba en un intento de revelación divina.
—Nicolas —Lize me señala con el dedo y toca mi frente furiosa.
—Si no puedes hacer que ella se enamore de ti de la manera correcta, por favor, no lo intentes, aléjate o si no solo saldrán lastimados los dos, ella no necesita un amor de colegio ella ya no esta para apuestas, besos robados, ni venganzas, prométeme que si no estas completamente seguro de convertirte en el hombre que ella necesita a su lado, te alejaras —advierte.
—No quiero alejarme Lize — le digo con el corazón en la mano, solo de pensarlo me crea un vació en mi interior —No puedo alejarme, creo que me estoy enamorando de ella.
—Celeste te hará daño y al hacértelo se hará daño ella también, entiéndeme yo los quiero a ambos pero... —Lize detiene su frase y niega con la cabeza para salir de la oficina.
—¿Pero que Lize? —hablo desesperado, necesito saber mas de Celeste.
—Pero mi lealtad sera con Celeste, así que ya no te contare nada de sus gustos, ni de donde esta o con quien, hasta este momento has hecho trampa sabiendo de antemano lo que le gusta y que hacer para sorprenderla .
—Lize por favor no hagas esto —ruego, conozco a Lize desde primaria y se que darme la espalda tampoco le gusta nada, ella ha sido mi mejor amiga desde siempre, incluso fue por ella que mi papa decidió contratar la compañía de Celeste, pero estoy interfiriendo en su amistad y debo de entenderlo.
—Lo siento Nico, pero Celeste es alguien especial para mi, y quiero estar segura de que el hombre que termine a su lado la merezca.
—Eso solo me demuestra que vale la pena luchar por ella, Liz Liz — Sonríe al escucharme llamarla así, hacia años no que no lo hacia, la extrañe tanto todos estos años en el extranjero, Lize es de esas personas que son difíciles de reemplazar.
—Desde ahora estas solo en esto. —Abre la puerta para que salga de la oficina, echándome sutilmente sin darme opción a reproche.
Tengo que averiguar por mis propios medios de que hablaba Celeste y parece que he perdido el apoyo de Lize, pero no me daré por vencido.
GRACIAS POR LEERME , SIEMPRE ME ROBAN UNA SONRISA, SON LAS MAS LINDAS DE TODO WATTPAD.
