16. La cita de Lizzie.

49.4K 3.8K 725
                                    

16. La cita de Lizzie.

— ¿No ha llegado ya Robert? —Pregunté saliendo del baño mientras me ponía unos pendientes dorados, el último toque de mi vestuario para el baile de bienvenida.

Llevaba un vestuario bastante simple, no quería que Logan se hiciera demasiadas ilusiones acerca de si me había arreglado para él. Se trataba de un vestido blanco de escote redondo totalmente cerrado a la altura de mi clavícula, que caía ajustado hasta por encima de mis rodillas. En un primer lugar había optado por ponerme unos tacones bastante altos de color negro, pero después de ponérmelos y tener vértigo, al final me puse unas sandalias doradas con apenas tacón.

—Robert está estudiando. No va a venir. —Respondió Lizzie desde la cama. Mientras que yo seguía arreglándome para ir al baile de bienvenida, ella ya estaba echada en la cama, con su bata rosa de algodón, contemplando la pantalla de su ordenador portátil.

Robert se estaba tomando demasiado en serio aquello del último año. Desde que había sacado un notable bajo en biología en el primer examen parcial, se había encerrado en su habitación a estudiar sin tregua. Quería graduarse con honores, y cómo había dicho cuándo el profesor había posado el examen sobre su mesa, eso no se conseguía con simples notables. Así que después de montar todo un drama había decidido encerrarse en su habitación hasta lo que quedaba de curso, dejándome con una depresiva Lizzie poco acostumbrada a no ser el centro de atención.

Y mientras yo, había sacado un simple cinco raspado, y estaba arreglándome para el baile. Definitivamente tenía que juntarme más a Robert y a su buena influencia, y menos a Logan, el amante de los problemas.

Pero esa noche no tendría el gusto.

— ¿Estas segura de que no quieres venir? —Me aseguré por décima vez.

—Muchas gracias, pero prefiero quedarme aquí y tener una sobredosis de chocolate. —Contestó ella con desdén mientras devoraba ferozmente una chocolatina. No se había tomado demasiado bien que nadie quisiera invitarle al baile de bienvenida. Desde el año pasado, Ian dejándola plantada y la llegada de Alison, la nueva abeja reina,su popularidad no había dejado de bajar. Y a pesar de que nunca le había caído demasiado bien al resto de estudiantes, ahora que ya no era un personaje popular, todos podían manifestar su odio hacía ella. — Además, no quiero ir de sujeta velas a tu cita con Logan.

— ¡No es una cita! —Protesté yo cruzándome de brazos. Había repetido lo mismo casi noventa veces, pero Lizzie y Robert parecían no haberlo pillado todavía. —Estoy siendo chantajeada por el manipulador de Logan.

— ¿Y por eso te has puesto ese pintalabios?—Inquirió Lizzie arqueando las cejas con sorna.

—Es mi pintalabios preferido. — Apunté yo mientras me miraba de nuevo al espejo. Me encantaba pintarme los labios de rojo brillante, me daba un aspecto sofisticado y elegante, como si acabara de salir de los años 20. No tenía nada que ver con Logan.

— Por supuesto. —Contestó Lizzie sarcástica arqueando las cejas.

¿Pero y si Logan pensaba que me lo había puesto para él? No podía permitir que eso pasara. Con resignación me quite el pintalabios y me eché un gloss rosa más discreto.

—Lizzie, no tienes por qué ser así de borde. Si te apetece venir con nosotros, puedes hacerlo. Repito que no es una cita ni nada de eso. Además sabes que me harías un favor...

—Tranquila, no voy a estropear tu cita. Porque Jo, te repito que si es una cita. — Había apartado la mirada de la pantalla de su portátil para clavar sus ojos sobre los míos.

Jo es nombre de problemas. (JNENDC2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora