Dylan O'brien es mi hermano (Thomas Sangster y tú) -corrigiendo ortografía- TERM

Capítulo 30

-_______, despierta... princesa... arriba-abrí mis ojos para ver a mi hermano intentando despertarme.

-Tengo sueño-me queje.

-Vamos, tienes que ir al colegio, princesa-me senté en la cama viéndolo a los ojos-¿Cómo estas?-preguntó, seguramente recordando lo de anoche.

-Mejor, gracias.

-Bien, alistate, te hare el desayuno-dijo parandose, y dirigiéndose a la puerta.

-Dyl-lo llame, él se detuvo para verme-no quiero desayunar, no tengo hambre-él me miro severamente.

-No permitiré que no desayune, te hara mal-dijo para irse, seguramente a hacerme el desayuno.

Entre al baño de mi habitación, mis ojos estaban marrones, pero sin brillo, rojos e hinchados por haber llorado.
Me peine bien, haciendo una trensa de lado con mi cabello, me puse mi uniforme y baje.
Al entrar a la cocina, Thomas y mi padre estaban desayunando, y mi hermano estaba dejando un plato en la mesa, sabía que me obligaria comer.

-Dyl, en serio, no tengo apetito-y de verdad, sentía como mi estómago daba vueltas.

-Tienes que comer algo-dijo, me senté en el asiento, frente al plato, suspirando. Tomé la cuchara con un poco de comida, pero mi mano temblaba al llevarlo a mi boca.

-Almenos inténtalo-dijo mi padre, lleve la cuchara a la boca, hice una mueca de asco al sentir las arcadas.

-En serio no puedo-dije apartando el plato. Mi hermano me miro preocupado-no te preocupes, comeré algo en el colegio, cuando me sienta mejor-mentí, generalmente cuando despertaba así, que era muy raro, no solía comer nada en todo el día.

-¿Segura?-asenti-bien, pero come, si te sigues sintiendo mal avisame-volví a asentir.

-Bueno, me tengo que ir, hoy volveré tarde... ¿podrás estar sola?-preguntó mirando, sólo asentí sin importancia y él dejó un beso en mi frente-Cualquier cosa me hablas, o a tu hermano, o a Thomas, me voy, adiós chicos-dijo, se despidió de ellos y se fue.

-Yo también me voy... Adiós Thomas-dijo dándole un abrazo de los típicos que solían darse-adiós princesa, avisa cualquier cosa, te quiero, adiós-y se fue.

-Vamos, o llegaremos tarde-dijo Thomas después de unos minutos, sólo asentí y subí a mi habitación para buscar mis cosas, tome mi mochila, colgandomela en un hombro, mi celular y baje.
Thomas estaba esperandome en la puerta, al llegar a su lado, él solo abrio la puerta guardando su celular y salimos hacia el auto. Yo no le habia dirigido la palabra en lo que llevabamos de la mañana y no se bien porque, pero de momento no queria hacerlo, sentia una fuerte opresión en mi pecho y mas cuando estoy cerca de él.
Subimos al auto sin decir nada, yo iba en el asiento del copiloto, y me dedique a mirar por la ventana sin prestar atención a nada, tratando de disminuir la presión de mi pecho.

-¿Qué te pasa?-preguntó Thomas, gire para verlo, pero no contesté, simplemente volví a mirar por la ventanilla. Él detuvo el auto y me tomé de los hombros, haciendo que lo mire fijamente-¿Qué te pasa?

-N-nada.

-En serio ¿Qué te pasa?. No comiste y ahora estas así ¿Qué te pasa?

-Sólo... me siento mal-y no mentía, me sentía fatal.

-¿Segura que quieres ir al colegio? Puedes venir conmigo y asi te tengo vigilada-eso hizo que mi corazón lata mucho más fuerte de lo que ya latia.

-Es-estoy bien, cualquier cosa puedo mandarte un mensaje o algo-dije, él asintió no muy convencido e hizo avanzar el auto de nuevo.

Al llegar el auto me baje y él también, para despedirse.