Dylan O'brien es mi hermano (Thomas Sangster y tú) -corrigiendo ortografía- TERM

Capítulo cuatro

Me despierto y me encuentro en mi cama, me levanto y veo por la ventana, ya amaneció. Seguro Dylan me cargo hasta aqui cuando llegamos.

Me doy una ducha rápida, me pongo un pantalón azul, una musculosa negra, pero al ver las heridas de aquel día, me cambio rapidamente poniendome una blusa de manga 3/4, una sandalias simples y bajo a desayunar.
Al entrar al comedor, me encuentro a mi padre, Dylan y Thomas.

-Buenos días-saludo mientras le doy un beso en la mejilla a mi padre.

-Buenos días-responden Dylan y Thomas a la vez.

-Buenos días, cariño-saluda mi padre-Hoy trabajo hasta tarde así que te quedaras a cargo de los chicos, hagan algo, diviertanse. Solo no destruyan la casa-dice y todos reimos.

-Claro, seguro encontraremos algo que hacer.

-Ok, me voy a trabajar. Ustedes dos-señala a Dylan y Thomas-Cuidenla bien, está a cargo de ustedes, le pasa algo y los mato-ellos asienten y yo rompo en risa-Me voy, adios-dice dandome un beso en la mejilla, y se va.

-¿Qué hacemos hoy?-pregunta Thomas.

-Si fuera por mi, iríamos de compras-digo sonriendo.

-¡NOO!-gritan los dos a la vez, aterrorizados, haciendome reir.

-No iremos de compras, tranquilos, ni siquiera me gusta... ¿y si vamos al zoológico?-Dylan asiente y mira a Thomas que estaba perdido en su celular, le pega un codazo.

-¿Ah? Ah si, claro, vamos al zoologico-dice terminando de escribir un mensaje en su celular y guardandolo en el bolsillo de su pantalón-Pero no creo que quieras ir asi-me señala-Ve a cambiarte-me ordena, yo lo miro con sarcasmo, luego sonrió y le digo.

-Supongo que tú tampoco iras asi-lo señalo, estaba en pijama-Tú tambien cambiate-le digo mientras me dirijo a mi habitación.

Me pongo un pantalón negro, una remera manga corta rosa, y una sandalias negras con detalles dorados.

Al bajar, Dylan y Thomas ya estaban esperandome y ya estaban cambiados.
Dylan tenía una camisa cuadriculada verde oscura, unos shean negros, y unas sapatillas negras.
Thomas tenía una camisa cuadriculada negra, un jean azul oscuro, unas zapatillas negras, y tenía una chaqueta negra en brazos.

-Wow,______, te ves wow-exclama Thomas al verme, Dylan le pega en la nuca-Aunch-se queja Thomas sobandose la nuca y yo rio.

-¡Es mi hermana!-le reclama Dylan y yo rio más.

-¡LO SÉ! Solo le digo que se ve bien... tambien es como mi hermana-no sé por qué, pero eso último dolió.

-Si bueno... lo siento. Es verdad,_______ , te ves muy hermosa-dice mi hermano abrasandome-¿Nos vamos?-pregunta y yo asiento. Miramos a Thomas, que estaba escribiendo algo en su celular, este le hace un gesto a Dylan sin mirarlo, termina de escribir el mensaje guarda el celular y salimos por la puerta.

Luego de un viaje de 20 minutos, entre bromas, sarcasmo y anécdotas, llegamos al zoológico.

-¡Llegamos!-anuncia Dylan bajando del auto, bajo del auto y camino hasta quedar a unos pocos metros la puerta y observo el lugar. Alguien se para al lado mio.

-Dylan esta sacando las entradas-yo solo asiento y sigo viendo la entrada del lugar, está igual que como lo recordaba, solo que tenía una nueva capa de pintura pero del mismo color, solo un poco más oscuro, que cuando tenía ocho años.

-Esta como lo recordaba...-le digo a Thomas-Son muchos recuerdos lindos y... sé que diras que es una tonteria pero... -no termino de hablar porque él me interrumpe.

-No es una tonteria... es tierno, no estuviste aqui durante años, y al volver, recuerdas todo los lindos momentos con tu hermano.-dice mientras despega su mirada de su teléfono y me abraza con un brazo-Yo diria que es adorable-dice volviendo a mirar su celular, sin dejar de abrazarme con el otro brazo.

-Ya saqué las entradas-Dylan se acerca a nosotros, Thomas guarda su celular, y saca su billetera sin dejar de abrazarme con el otro brazo.

-¿Cuánto te tengo que dar por mi entrada?-le pregunta seleccionando billetes.

-No jodas, hermano, no me tienes que dar nada-niega Dylan, bajando suavemente la billetera de Thomas con una mano-¿Vamos?-asiento, entramos cuando Dylan entrega las entradas al guardia que estaba para no dejar entrar a gente que no tenga entradas.

Camino a la primera jaula que había, jirafas.
Luego de unos, veo una jirafa bebé que estaba oculta tras su madre, la observo embobada, es hermosa.

-¿No es linda?-pregunta un chico, rubio de ojos claros, que se coloca a mi lado viendo a la jirafa-Es un recien nacido... nació ayer-me cuenta.

-Y... ¿tú cómo lo sabes?.

-Bueno... mi hermano trabaja aqui, y ayer vine con él porque mi madre no quiere que me quede solo, y la vi nacer-dice-Y hoy quise venir a verlo... es machito-me dice al final.

-Genial... yo no recuerdo jamas haber visto una jirafa bebé. Y a este zoológico no vengo hace años, la última vez que vine tenía 8-le confieso, no sé por qué habló esto con un extraño-Por cierto, soy ______, un gusto.

-Soy Pablo, el gusto es mio-dice sin despegar la vista de la jirafa.

Siento una mano en mi hombro derecho, y al girarme veo a Dylan serio, con un algodón de azucar en su otra mano y Thomas atras de él, también serio.

-¿Seguimos recorriendo, ______?-me pregunta mi hermano.

-Claro-me giro hacia Pablo-Gracias por la información, un gusto, Pablo, adiós-él se gira, sonríe y me da un beso en la mejilla.

-Que el gusto es mio... Cuando quieras, adios-dice volviendo a mirar la jirafa.

Dylan me toma de la mano y empieza a caminar, Thomas se pone a mi lado, quedando yo en el medio.

-¿Qué fue eso?-me pregunta a unos metros de ahi, la verdad ni yo lo sabía.

-No lo sé. Solo se acercó y me habló. Y no sé porque se despidio con un beso-contesto, él asiente sonriendo, me saca el algodón de azucar y lo saca de la bolsa donde estaba envuelto y me lo regresa, sacandole un buen pedazo para comérselo él, mientras caminabamos hacia otra jaula. Thomas tenía su vista en el celular, como siempre. Al llegar a otra jaula veo una mano que me saca un pedazo enorme de mi algodon de azucar.

》Hey-le reclamo a Thomas que se comía el pedazo de algodón, en eso Dylan tambien me saca un gran pedazo, yo solo rio y dejo que coman. Luego de dos minutos, mi algodón de azucar ya no existía.

Segimos recorriendo las jualas, hasta que llegamos a la de los pingunos.
Tambien había pinguinitos bebés, realmente adorables, casi no se veian porque se ocultaban debajo de sus padres, quedo totalmente embobada con ellos, hasta que una voz chillona me saca de mi trance.

-¡THOMASS!-grita una voz chichona, pensé que era una fan, pero al darme vuelta, una chica rubia abrazaba a Thomas.

-_______-me dice Thomas-Ella es.....

*Belu