CAPÍTULO 42

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Hemos venido al lugar a comer pizza con los niños. Ya no hay ambiente tenso. Todos estamos relajados conversando de la secundaria y estudios. Estoy sentada enfrente de Allister, quien bebe coca cola. Kelsie está a su lado, dándole miradas discretas. Formarían una bonita pareja. Al menos es un año mayor que él. No hay ningún problema en ello.

Si fuera de la misma edad que él....

¿Seríamos novios?

—El lugar del viaje será en la ciudad natal de Asha —dice Luca. Un pedazo de pizza va por mal camino. Toso fuerte—. ¿No lo sabías?

¿El viaje será en esa ciudad?

Eso quiere decir que visitaré a mi familia y es posible que me encuentre con Jack el destripador de corazones. Maldita sea. ¿Por qué justo en esa ciudad? No estoy lista para ver a ninguno de ellos.

"¡Debe ser tu culpa! Te lo dije. A los hombres hay que tratarlos bien. Por eso, ese muchacho fue a buscar a otra mujer".

"Te conozco, Asha. Hiciste algo mal".

"Apresuraste las cosas. Es tu culpa. Te perjudicaste tú solita".

Mi familia me culpó del engaño de mi ex. Todos lo hicieron. Hasta la madre del mismo. Comprimo la mandíbula.

"Lo dejaste solito a mi hijo. Debes entender eso".

Una pequeña pizza aparece en mi visión, alejándome de los recuerdos amargos que tengo de mi pasado. Allister está ofreciendo más comida. Sonrío y acepto.

—Hubiera sido perfecto que el viaje escolar fuera en otra parte —cuento, mordiendo un pedazo de pizza—. No deseo visitar a mi familia.

—Debes hacerlo —replica Elicia—. Ya sabes como son.

Ya lo sé, pero no deseo escuchar las mismas palabras de siempre.

—Al menos, la pasaremos bien cuando sea de noche —dice Kade riendo—. ¿No quieres reunirte con nosotros, prima?

Carcajeo.

—Dudo que los demás alumnos se sientan bien si está un profesor entre ellos —refuto—. Aparte, los del comité estudiantil, deben supervisar a todos.

—No se reunirán nadie por la noche —ordena Allister.

—Eso no será divertido —dice Cayden sonriendo—. Recuerdo que el año pasado, Kelsie dejó hacer una reunión secreta para contar cuentos de terror.

—¡Oh sí! Fue gracioso ver algunos tener miedo —comenta Kelsie entre risas—. No olvidaré eso.

—Dudo que podamos hacerlo este año —replica Eddy el tesorero—. El presidente ya lo dijo.

Todos se quejan y miran al nuevo presidente, quien come tranquilo sin inmutarse a nada. Dudo que Allister tenga ganas de hacer una reunión secreta. Sonrío y sigo comiendo.

—¿Ni siquiera tendremos una sesión de besos robados? —pregunta Kade.

—¿Sesión de besos robados? —cuestiona Elicia ceñuda—. ¿En serio tenían eso?

Aquí vamos con los celos de la hermana mayor.

—Es normal que los chicos experimenten eso —comenta Luca sonriendo—. Ustedes también lo hacían.

PROBLEMÁTICO AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora