LA FAMILIA

CAPITULO 1

-Año 1950-

-No, no y no, ya te he dicho que no me casare con esa pobre mujer, no la condenare a vivir en una vida de burlas he humillaciones padre- Me encontraba furiosa en la sala en medio de una discusión con mi padre, el alcalde Mike Jáuregui.

-Hija acabas de cumplir 30 años, tu padre y yo queremos lo mejor para ti, y lo mejor es que te case y formes tu propia familia. Lauren, Cristopher tiene 27 años y ya está casado esperando a su segundo hijo, Taylor tiene 24 y espera a su primogénito, es hora de que sientes cabeza hija- esa que nos comparaba siempre es mi madre Clara Morgado – Lo que tu padre está haciendo es por el bienestar tuyo.

-¿Bienestar mío madre? ¿Casarme con una mujer a quien no conozco y que estoy segura que le daré asco apenas este cerca de ella, creen que lo es mejor para mí?– Voltee a verla justo donde ella se encontraba, sentada en el sillón a un costado de mi padre, mismo que se puso de pie y camino justo hasta quedar enfrente de mí y poner su mano en mi hombro.

-Esto no está a discusión Lauren, te casaras para fin de mes y es todo- dio un ligero apretón en mi hombre para luego pasar de largo y salir de ahí. Camine hasta arrodillarme en donde mi madre se encontraba sentada.

-¡Madre, por dios! No pueden hacer esto- dije tomando sus manos –ayúdame con papa para que cambie de opinión-

-Lo siento hija, pero estoy de acuerdo con tu padre, has vivido una vida en donde te has desvalorizado y no te has permitido incluirte a la sociedad- puso una de sus manos en mi majilla y me dio una mirada de lastima y adoración –sabes que tu padre y yo te amamos más que a nada en este mundo y si tu no quieres ser feliz entonces buscaremos la manera de que lo seas.

Me puse de pie –no saben el error que van a cometer con esto madre, pero está bien no hay mucho que yo pueda hacer ¿No?- Di media vuelta y salí a mi estudio.

Vivía con mis padres en un pueblo llamado Sitka perteneciente a Alaska, era la mayor de 3 hermanos. Cuando nací todo indicaba que era una niña, pero conforme los años pasaban, empecé a desarrollar un miembro masculino pero seguía siendo niña. A la edad de 9 años el Dr. Simon Cowell pudo decirnos a ciencia cierta que era el padecimiento que presentaba y por su propia boca dijo "Lauren es Intersexual, es una alteración de su ADN", por lo que se, es que es una probabilidad de uno en un millón, y sí, yo fui ese uno; no hay cura o cirugía que puedan hacerme, así que me resigne a vivir siendo de la mitad para arriba una mujer y de la mitad hacia abajo un hombre. Cuando los niños de la escuela se enteraron de lo que tenía recibí todo tipo de insultos y golpes, mismos que llevaron a mis padres a sacarme de la escuela y estudiar desde casa. Cuando quise estudiar Artes mis padres no estaban de acuerdo con que yo saliera de casa para estudiar en otro estado, pero con mucha persuasión de mi abuela hacia mis padres, pude estudiar Artes en la UCLA (Universidad de California). Fue una experiencia diferente a la que viví de pequeña, era tan libre y tan feliz que no tenia deseos de volver, pero se preguntaran porque volví a un lugar en donde soy juzgada, sencillo, hace 3 meses mi abuela Angélica enfermo y su estado a estado de mal en peor, no hay nada que yo no haría por ella y si sus últimos días es estar en casa con ella, lo haría una y mil veces. No me quiero casar sea con quien sea y menos si es de este pueblo, me lleva a la conclusión que debe de saber de mi problema y será humillante tanto para mí como para ella.

-Lolo, puedo pasar- ahí estaba mi más grande amor para en la puerta respetando mi espacio dándome una sonrisa más hermosa.

-Abuela no tienes que pedir permiso para entrar- camine hasta ella para tomar sus manos y caminar de nuevo al centro del estudio para sentarnos.

-Hija sabes que te amo más que nada en el mundo y que no me escuchen tus hermanos porque si no me harán bronca- me dio una ligera sonrisa –sé que estas molesta por lo que tu padre está haciendo pero yo también tengo culpa con eso, yo fui quien le hizo el comentario a tu padre- dejo de mirarme para bajar su cabeza con un sentimiento de vergüenza –lolo no me queda mucho tiempo y lo que más quiero es verte feliz con una familia ya hecha. Quiero ver tu boda mi niña e irme sabiendo que no estarás sola.

Tome sus manos y le dije –no estoy de acuerdo con ese jodido plan abuela, pero no tengo opciones, Mike ya lo decidió así solo espero que con esto puedan están felices.

-Así será mi amor- me dio un ligero beso para ponerse de pie y salir del estudio pero antes de salir por completo volteo y me dijo –le estarás haciendo un favor a Camila mi amor y ella te lo pagara haciéndote feliz, me dio su palabra-.

-¿Camila? ¿Favor? ¿De qué hablas abuela?- pregunte intrigada.

-Tranquila lolo, hemos acordado una cena con Camila y sus padres para la próxima semana, ahí hablaremos de tu boda y como se planeara- Dijo saliendo del estudio, dejándome más que nunca con la mente a punto de explotar.

Conforme los días pasaban trate de evitar el tema de la dichosa boda a todas costas y concentrarme en mis punturas, aunque por ratos si tuve pensamientos de ello evitándolos rápidamente y es que mis padres de cierta manera se dieron por vencidos cuando a la hora de la comida evitaba el tema. Hablar con ellos realmente siempre fue difícil y estresante, mi padre es el alcalde del pueblo y desde que tengo uso de razón siempre ha estado ocupado tratando de conseguir ese puesto y mi madre siempre ha sido la esposa ejemplar que ha sido presentada en casa a cenas que mi padre convocaba con los de su partido. Me han aceptado a pesar de mi problema y me han amado a su manera intentando que viviera a mi manera, para ellos no hay un favorito entre sus hijos, nos han tratado y amado a los 3 por igual y ahora también a sus nietos. 

El día de la cena con Camila y sus padres había llegado, hoy era el día en el que la conocería y hablaría con ella para persuadirla de que desista de esta boda. Tome una ducha con agua helada y cuando termine de vestirme decidí bajar a desayunar, esperando que todos estuvieran ocupados ya en sus asuntos, lamentablemente ese deseo no se cumplió, en la mesa estabas mis padres, en la cabeza de la mesa está mi padre y su lado derecho estaba mi madre, mi abuela Angélica ocupaba el asiento alado de mi madre, mi hermano Cris con su esposa Julia quien cargaba su panza de 5 meses de embarazo, junto con su hija, la pequeña Anna de 2 años estaban sentados de lado izquierdo de la mesa dejando vacío el lado continuo al de mi padre.

-Buen día- dije a todos, contestándome los buenos días todos. Le di un beso a la pequeña Anna quien me regalo una hermosa sonrisa.

-¿Estas ansiosa hermanita?- pregunto mi hermano cuando ya estaba sentada en la mesa.

-Cris por favor deja a Lolo en paz, tenemos lo menos que quiero es que se empieza una disputa en la mesa ahora mismo- dijo mi madre con suplica, solo le sonreí y asentí con la cabeza. 

-Bien, Lauren hoy vendrán Camila y sus padres, me gustaría que cuando terminemos de comer me acompañes al estudio hay unas cosas que quiero hablar contigo en privado hija- Dijo mi padre.

-De acuerdo padre- El desayuno paso lo más tranquilo hablando de cosas banales y intentando entender lo que mi sobrina nos contaba de sus juegos.

Cuando entre al estudio mi padre ya estaba esperándome mientras fumando un cigarro.

-Toma asiento lolo- dijo mientras tomaba asiento enfrente de él, tenía tiempo en el que mi padre me llamaba así.

-De que querías hablar papa-

-Sé que imponerte algo como una boda es lo más bajo que he hecho pero sé que es por tu bien, pero no es por eso que quiero hablar contigo. El nombre de la muchacha con la que te vas a casar es Camila Cabello Estrabao, hija de mi amigo Alejandro Cabello y si esposa Sinuhe Estrabao. Camila aparentemente es una joven de buena familia y educada. Hace unos meses Camila tuvo un problema y es a lo que nos lleva hoy hablar contigo de tomarla como esposa- Dijo mi padre con nerviosismo o eso es lo que podía observar -Hija, ¡¡Camila esta embarazada!!